Once upon a time in Hollywood (libro #3)

Capítulo 1:El intruso

Siempre había sostenido que el inviernos era la época ideal paa dormir tapados hasta la cabeza, tomar café , disfrutar de una buena película en la cama y ver la lluvia caer.

No para ir a trabajar, pero la vida del adulto era así y tenía que hacerme cargo de mis propias decisiones y responsabilidades.

Después de todo eso es lo que era… una adulta. A veces me preguntaba porque había decidido vivir aquí, en la ciudad de las luces, en el glamuroso Hollywood. Claro era glamuroso para el resto de las personas , porque en lo que a mi respecta , mi vida era bastante ordinaria.

Pero quien puede juzgarme? Tenia tan solo 19 años y un abanico de posibilidades al alcance de mi mano. Por que no elegir la que se acecaba a mi vida ideal?

De chcica veía todas esas películas que filmaban aquí y mis ojos centellaban al ver los hermosos lugares que habían y sobre todo ese gran cartel que te indicaba que habias llegado al lugar donde los sueños se hacen realidad.

De más está decir que visité cada uno de los lugares importantes apenas puse un pie aquí.

Pero hoy en día la realidad era otra.Apagué de un solo manotón el molesto despertador que sonaba desde la mesita de luz y que estaba taladrando mi cabeza, mostrando cero empatía por mi o por mis marcadas ojeras que ya se habían convertido en rasgo característico de mí y eran producto de trabajar arduas horas en la tienda de cosméticos más importante de aquí.

Los rumores dicen que si seguía así, en dos o tres meses me ascendería al puesto de gerente.

Me levanté obligada de mi cama,me puse mi bata a regañaditentes y bajé a desayunar.Después de todo ese puesto no se conseguiría solo.

Al pasar por al lado del espejo me asombre con la imagen que este me devolvía. No era consciente de lo mucho que había adelgazado y sabía a la misma vez lo mucho que se molestaría mi madre al verme asi.

Al entrar al comedor del pequeño piso que compartía con mi compañera de piso Jessica  la encontré sirviendo lo que sería nuestro desayuno : tocino, omelettes,café y jugo recién exprimido.

Siempre sostuve que debería haber seguido su sueño de estudiar gastronomía para algún día abrir su propio restaurante pero si lo hacía sus padres la desheredarían y no estaba en condiciones de valerse por ella misma…ninguna de las dos lo estaba ,si tenía que ser honesta.

-Buen día-dijo colocando una margarita en nuestro pequeño jarrón.

-A que se debe tanta preparación?Si solo somos notras dos-la miré intrigada.

-Te equivocas-levantó un dedo-Nosotras dos y Misky-tomó en brazos a nuestro gato que estaba jugando entre sus pieranas-No siempre seremos nosotras dos.

-Estas embarazada y esta es tu retorcida manera de comunicarmelo?-dije tocando su estómago.

-Jajaja, eres graciosa-me miró sonriendo-Aunque no es de tu  incumbrencia no lo estoy y no planeo estarlo hasta que lanzemos la revista o hasta que Kev quede fijo en el hospital.

La revista era un sueño que teníamos ambas desde que nos habíamos mudado aquí, yo me encargaría de subir las noticias mientras que ella se encargaría del diseño y de las fotografías. Nos habíamos puesto la meta de hacer esto en 5 años,ya llevábamos la mitad de ese tiempo y las cosas iban sobre ruedas.

-Por cierto –la mire con curiosidad- Cómo están las cosas entre ustedes?

Una débil sonrisa se asomó por su rostro y me hizo sentir un poco de envidia por su vida amorosa.

-Muy bien de hecho-se mordió el labio-De hecho  este fin de semana me invitó a la casa de fin de semana  me invitó a la casa de campo de su familia.

La miré atónita , intentando procesas esa información.

-Me…dejarás sola-la miré con mi mejor cara de perrito que podía hacer.

-Serán solo unos días y además –hizo una pausa dramática.

Odiaba que hiciera aquello.

-No estarás del todo sola.

-Claro que no, estará Misky.

-Técnicamente si, pero también vendrá alguien más.

-Maureen?

-No, no vendrá mi hermana.

-Y- levanté mi dedo.

-Tampoco Gabriel-dijo interrumpiéndome.

Me estaba volviendo loca aquí.

-Me estoy cansando de este juego de adivinanzas-admití-Me doy por vencida-alzé mis manos en señal de derrota.

-Vendrá Ian, es un amigo de Kevin, se llevarán bien , ya que lo verás-sonrió quitándole importancia.

Si hubiese tenido un espejo posiblmente me hubiese reído ante mi expresión.Setnía que mi mandibula rozaba el piso.

-Y esperaste hasta hoy para decírmelo?

-Sabía que te enojarías.

La fulminé con la mirada y no me dí cuenta de que me estaba sujentandome con exagerada fuerza a la mesa hasta que ví a mis nudillos tonarse blancos.

-Lo estoy-admití y mucho.

-Lo siento-dijo poniendo cara de corrego sabiendo que me derretía cuando hacía eso.

-Y cuando llegará?

Un silencio molestó inundó la sala y Jessica abandonó el lugar con Misky en brazos .

-Jessica , dime cuando llegará-la seguí hasta la puerta principal.

El timbre sonó y un escalofrío me recorrió la espalda.

-Ahora –dijo con una sonrisa dejando al gato en el piso y tomando un bolso cuya existencia no había notado.

-Pero…

-Adios linda, nos vemos 5 días-salió corriendo al auto dejándome con la palabra en la boca.

Frente a mí había un chico alto,rubio,con ojos color miel que tenía una mochila al hombro.

-Soy Ian –dijo estirando la mano , asumiendo con la esperanza de que la sacudiera .

-Pasa –dije señalando la sala de estar con la cabeza.

El intruso entró a nuestro hogar y dejó las cosas en el sofá.Mi celular sonó en el bolsillo y lo saqué.Un mensaje de Jessica iluminó la pantalla.

“Disfruta de tu cita a ciegas”.

 

 

 

 



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En el texto hay: diversion, amor, amor amistad

Editado: 12.05.2020

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