La chica caminaba despacio bajo la lluvia, no llevaba paraguas ni impermeable, no le importaba mojarse, es más, se sentia bien mojandose, no tenia prisa en entrar a la universidad, una vez divisó la gran reja metalica que servia de portón aceleró el paso un poco, no quería que la tomaran por loca al estar caminando bajo la lluvia sin ningun tipo de prisa por no mojarse, al ingresar caminó por los extransos corredores sin ninguna prisa, sabía que el tiempo no era un problema, quedaba 1 hora para que empezaran sus clases, iba tan distraida en sus pensamientos que no se fijó que en direccion contraria iba caminando su ex, que también estaba distraido, en ningún momento ninguno de los dos se percató de la presencia de el otro, sino hasta cuando chocarón y ella cayó al piso se dió el momento en que sus ojos se conectaron por microsegundos.
- ¿¡QUÉ TE PASA IDIOTA!? ¿¡ACASO NO TIENES OJOS EN LA CARA!? -Gritó la chica desde el suelo-
- ¿¡PERDÓN!? PERO SI FUISTE TU LA QUE CHOCÓ CONMIGO -Respondió furioso el chico-
- ¡YA QUISIERAS! -Respondió levantandose del suelo de un salto- En todo caso, no tengo tiempo que perder contigo- Dijo sacudiendosé la ropa-
- Eso no es verdad, sabes que te encanta verme, hablarme y tocarme -Dijo con tono burlón-
- ¿De que hablas? El tinte te quemó las neuronas jajaja, alucinas querido -Dijo ella del mismo modo-
- Dí lo que quieras, mientele a tus amigos, -Se acercó un poco- A tu familia -Se iba acercando mas- Si quieres mientete a ti misma -Se detuvo a unos milimetros de mi- Pero jamas me mientas a mi -Me robó un beso-
- ¿M-Mentirte? -Tartamudeó-
- Así es -Respondío respirandole en el cuello a la chica. para este punto él la tenia acorralada contra los casilleros sin posibilidad de escabullirse- Sé que aún sientes algo por mi, y ¿Qué crees? Yo tambien siento cosas por ti -Dijo antes de besar el cuello de la chica y subir de nuevo a sus labios para deborarlos-
-¡No! esto no puede pasar y lo sabes, me haces daño -Dijo ella mientras empujaba a aquel chico que tanto amaba, pero que no podía amar ni en un millon de años. De pronto millones de recuerdos llegaron a su memoria de golpe y las lagrimas no tardaron en aparecer, eran mas los recuerdos felices que los tristes, pero ella tenia miedo, y si lo arruinaba de nuevo, y si el llegaba a odiarla, tenía muchas cosas que perder si el se enteraba de su pasado, debia dejar que el se olvidara de ella por el bien de ambos, ella habia hecho un pacto con alguien muy peligroso y no queria comprometer a alguien tan importante en su vida-
- Olvidemos todo, empecemos de cero ¿Te parece? -Propuso el intentando secar las lagrimas en el rostro de ella-
- ¡Tú no entiendes! ¡Te estoy protegiendo! -Dije exasperada-
- ¡Protegiendome de que! -Respondío-
- ¡DE LOS DEMONIOS DE MI PASADO, DE LO QUE SOY, DE LO QUE HAGO!, ¡DE MI! -Dije para luego correr lejos de el sin posibilidad de que me alcanzara