La reunión se llevó a cabo y las noticias no fueron nada alentadoras, mientras Lucy se encuentra en la zona más apartada del campo de entrenamiento, piensa en todo lo que Elyonar ha informado; según el guardia de turno, la prisión fue tomada por los Maras de alguna manera y han liberado a Nyxia, ellos fueron capturados cuando entraron a investigar y se encontraron con la terrible sorpresa; la pelea fue feroz, el compañero fue acribillado hasta morir por los Maras y a él lo dejaron con vida para que enviara el mensaje: Nyxia viene, la prisión de cristal se convirtió en su fortaleza y con ella tomará al Reino Onírico, esta vez no tomará prisioneros.
Lucy suspira preocupada al recordar el informe una y otra vez, ella apenas tiene una semana de vida y de entrenamiento, y ya se avecina una crisis que según Elyonar, se pronostica que es la peor que han visto hasta ahora, Lucy comienza a sentir mucho miedo y puede ver en los ojos de sus compañeros e incluso de los maestros, que sienten lo mismo.
El día no ha sido bueno para Lucy ni sus compañeros, por más que trató de mantener la compostura y concentrarse en las lecciones, ha bajado el rendimiento; los maestros no pueden culparlos, apenas llevan una semana de vida y ya reciben muy malas noticias. Esa misma noche, Lucy va directo a su habitación, está tan desanimada que ni siquiera quiso ver que islas habían frente a la Colmena, le dijo a Yliana que no quería hablar con nadie, solo encerrarse en su habitación; a Yliana no le pareció buena idea, pero se lo concede con la condición de que mañana tengan una conversación seria sobre la crisis, es necesario hablar sobre cómo proceder en caso de que la oscuridad llegue a la Colmena, Lucy acepta a regañadientes.
Por fin llega a su habitación, pero se lleva el susto de su vida cuando enciende la luz y ve a Raz sentado en su cama, ella lo mira enojada y él solo está ahí examinando su espada sin siquiera reconocer su llegada, Lucy siente que su estómago se contrae por el desagrado, lo que menos desea en ese momento es hablar con alguien, y mucho menos con Raz.
- El entrenamiento terminó temprano para todos, los maestros van a tener una reunión con Elyonar para discutir los planes de defensa. - Comenta Raz manteniendo la mirada fija en la hoja de su espada, Lucy tuerce su mirada y disimula un suspiro.
- Yliana ya me comentó al respecto, no es que quiera hablar ese asunto contigo. - Dice Lucy en tono efusivo y cruzándose de brazos, pero el comentario le arranca una sonrisa maquiavélica a Raz.
- ¿Asustada? -
- Me haces esa pregunta cuando eres tú el que vino a mi habitación, ¿no me digas que temes dormir solo? - Pregunta Lucy en tono de burla.
Raz apenas se ríe y se levanta de la cama, después de dedicarle una última mirada a su espada la guarda en su funda con ágil movimiento; Lucy arquea una ceja al ver lo arrogante que es este Caballero; Raz se acerca a ella con una mirada presumida y la mira de arriba abajo.
- Que casualidad, justamente estuve pensando en eso, la pobre Lucy debe estar aterrada, debería pasar a su habitación para darle un abrazo. - Responde Raz en un tono burlón y solo recibe una expresión dura de Lucy; él solo se hace a un lado para retirarse a su habitación. - No te preocupes, pequeña; yo cuidaré de ti. - Concluye Raz.
Lucy no tuvo tiempo de contradecirle porque cuando abrió la puerta y miró a ambos lados del pasillo, no estaba por ninguna parte; en medio de su enojo Lucy se pregunta cómo hace Raz para desaparecer tan rápido sin recurrir a la magia; ella deja salir un suspiro y vuelve a cerrar la puerta de golpe, después de tomar un baño y apagar la luz, se acuesta en su cama y comienza a pensar en todo lo que puede ocurrir el día de mañana, según Elyonar, pronostican que Nyxia llegará a la Colmena al atardecer, todos deben estar preparados; los guerreros más experimentados deben estar al frente mientras que los cadetes junto con sus maestros deben permanecer en la Colmena para proteger a la Reina; a pesar del miedo que pueda sentir, Lucy está dispuesta a dar todo de sí para cumplir con su deber.
- Yo no necesito que me cuiden, yo puedo hacerlo sola. - Se dice a sí misma mientras piensa con amargura en las palabras que le dijo Raz.
Poco a poco, Lucy siente que el cansancio se apodera de ella y el sueño la envuelve con su manto.
***
Al día siguiente, los Caballeros se despiertan más temprano de lo habitual, todos reciben la orden de reunirse en el campo central de la Colmena; todas las unidades están ahí esperando las órdenes de Elyonar, los maestros también están ahí conversando con el líder mientras esperan a que la Reina haga acto de presencia.
Después de veinte minutos, un guardia anuncia la llegada de Su Majestad, todos se paran firme y hacen un saludo en señal de respeto; la Reina camina entre sus Caballeros con expresión calmada y confiada, su concejero la sigue de cerca y más atrás dos escoltas que resguardan la seguridad de ambos. La Reina llega al trono y una vez que toma asiento, los Caballeros dejan de hacer el saludo y se mantienen atentos; Elyonar aparece frente al ejército, luego de pedir permiso a la Reina para hablar y que ella se lo concediera, él procede.