Varios días han pasado desde aquella batalla con la Pesadilla Nyxia, todo volvió a la normalidad para todos los Caballeros, varios lampyrians han nacido y ahora están siendo entrenados por sus maestros, algunos Maras siguen haciendo de las suyas pero nada que los Caballeros no puedan controlar, en fin, todo está relativamente tranquilo en el Reino Onírico.
Un día, la Reina se pasea por los pasillos de la Colmena, se detiene en uno de los ventanales para disfrutar del paisaje que ahora es diferente, un pequeño planeta naranja comienza a crecerles cientos de cristales de diferentes tonos de azules y verdes hasta quedar completamente cubierto y luego desaparece por un portal, una isla con forma de perro corre alegremente ladrando y brincando y luego se echa para tomar una siesta, un planeta con forma de diamante se abre progresivamente y muestra que es hueco por dentro, excepto por el bulbo que está en su centro y comienza a germinar en una planta, crece, crece y crece hasta perderse en el cielo, varias flores de diferentes colores crecen a los largo de planta, el enorme rostro de la mujer en el horizonte está dormido y sus cabellos ondean en el cielo como una aurora boreal; Lucy suspira disfrutando no solo de la vista, sino de la tranquilidad, pero esa tranquilidad dura poco al recibir una visita inesperada, Lucy no pensó que volvería a ver a la Phoerivor de la Muerte tan pronto, ella está flotando frente a Lucy y parece estar un poco perturbada, Lucy se da cuenta que ella no trae sus anteojos.
- Su Majestad, espero no haberla interrumpido. - Dice Mei Ling con una sonrisa extraña.
- En lo absoluto, siempre estoy disponible para las visitas, aunque, presiento que tú no estás de paso. - Contesta Lucy mientras se apoya un poco en el ventanal, Mei Ling baja la cabeza algo avergonzada y asiente.
- No, no lo estoy; he sido asesinada, Su Majestad. Nuestros rivales, los Kharadros, han estado fortaleciéndose a medida que pasa el tiempo, la batalla fue dura y a pesar de que logramos repelerlos, tuvimos que pagar un alto precio, otro de mis hermanos también cayó ante ellos, ya debe estar aquí, supongo. - Cuenta Mei Ling con tristeza, Lucy siente pena por el alma de la Phoerivor.
- Cuanto lo siento, Mei Ling, por ti y por tu hermano de armas; pero estoy segura de que todo estará bien, tu alumno podrá llevar a cabo la tarea que le encomendaste. - Dice Lucy con voz suave pero también con seguridad, Mei Ling sonríe al recordar a su alumno.
- Byron, si, estoy segura de que él cumplirá con su deber y en su momento será un gran maestro, se lo dije antes de morir, pero, creo que él no está muy seguro de eso. - Dice Mei Ling mientras dirige su mirada al cielo nocturno, Lucy se da cuenta de que la Phoerivor tiene algo más que decirle ya que aún no se retira a su descanso.
- ¿Hay algo más que deseas decirme, Mei Ling? - Pregunta Lucy con curiosidad, Mei Ling vuelve su mirada a la Reina y la ve con ojos implorantes.
- Mis hermanos tendrán batallas duras de ahora en adelante, probablemente necesite de su ayuda en algún momento. - Dice Mei Ling con algo de urgencia en su voz, Lucy siente algo de pánico al escuchar esas palabras.
- Los Phoerivors y los Kharadros son mucho más poderosos que nosotros. ¿Cómo podríamos ayudar los lampyrian?, somos insignificantes en comparación con ustedes. - Pregunta Lucy preocupada, Mei Ling alza sus manos en señal de calma.
- No les pediría nada que no pudieran hacer, cuando llegue el momento sabrás de lo que estoy hablando, por favor Su Majestad, confíe en mí. - Implora Mei Ling y Lucy la mira por unos instantes sin decir nada, luego, ella suspira resignada y acepta la petición de la Phoerivor.
- Está bien, Mei Ling, ustedes nos ayudaron con nuestro predicamento, estamos muy agradecidos y también estamos en deuda con ustedes, los ayudaremos cuando el momento llegue. - Dice Lucy y Mei Ling sonríe aliviada.
- Gracias, Su Majestad; le prometo que no será… tan grande como se imagina. - Dice Mei Ling y luego desaparece dejando a una Lucy muy pensativa.
Lucy mira una última vez por el ventanal y luego se devuelve al salón para conversar con Yliana y el concejero, deben pensar en un plan de contingencia en caso de que algo con los Phoerivors o los Kharadros salga mal, porque los primeros no son los únicos que tienen acceso al Reino Onírico, los agentes del Caos también lo tienen y estos son mucho más destructivos que su contraparte del Orden, los Caballeros Oniros deben estar preparados para cualquier eventualidad.
***
Varios meses han pasado desde la visita de Mei Ling a la Reina, un guardia corre por los pasillos de la Colmena, esquiva a todos los compañeros y estos lo ven como si estuviera loco o algo así, lo que no se han enterado sus hermanos de armas, es que ellos tienen visitas y son inesperadas; el guardia llega al gran salón donde está la Reina Lucy reunida con su concejero, Raz e Yliana, discutiendo nuevas formas de acabar con los Maras, la reunión es interrumpida cuando el guardia entra sin previo aviso, exaltando a quienes están conversando, el guardia primero recupera su aliento y luego da el reporte una vez que está más calmado.