—¿Quieres ir a casa ahora o prefieres esperar a más tarde? —le pregunte a Mack cuando íbamos saliendo del edificio, afuera ya no estaba Alex, estaba una banca vacía iluminada por los rayos del sol no tan fuertes. Caminamos en silencio sin prestarle tanta atención
—Nos vemos en dos horas en tu casa, Max quedo en terminar el trabajo hoy, iré a su casa y después paso a la tuya, la ventaja es que viven cerca. Mira, ahí viene giré a ver en la dirección que indicaba, no venía solo —¿Ustedes terminaron el trabajo ya?
—Nos falta poco, tal vez mañana demos fin a los últimos detalles.
Seguimos caminando en silencio, se podría decir que un poco incómodo, aunque no debería ser así, después de un rato caminando los cuatro hablábamos de temas triviales, íbamos en nuestro mundo como de costumbre, no le tomábamos mucha importancia a nuestro alrededor más que a seguir nuestro camino y a las ocurrencias que de vez en cuando decimaos.
—Me gusta mucho hablar contigo, no sé qué sería de mi sin ti —dijo Mack tratando de no reírse por lo que acababa de decir.
—Tal vez no te reirías tanto, aunque tengo una duda
—¿Cuál?
—¿Te ríes conmigo o de mí? —eso nos hizo reír a ambas y más por la voz en que lo había dicho
—Las dos cosas
Entre risas llegamos a casa, donde Mack y Max siguieron no sin antes despedirse, Alex por su lado se despidió de Mack diciendo que tenía que hablar conmigo sobre el trabajo antes de irse.
Le pedí que entrara, todo estaba en silencio. Era más que incómodo. Nos quedamos en la sala, trate de estar lo más alejada posible.
—¿Quieres que terminemos lo que falta del trabajo? —dije sentándome en el sofá al frente de él.
—Tenemos una conversación pendiente —dijo mirándome fijamente
—No es un tema que no tenga fin Alex, no es conmigo con quien tienes que hablar ahora.
—Ya no es lo mismo entre nosotros, ella está viendo a alguien más, supuse que ya lo sabias.
—No hemos hablado de eso, debes entenderla, y habla con ella. Por una razón ella ha encontrado a alguien más. —nos quedamos en silencio, su mirada reflejaba tristeza —no sé qué estén pasando exactamente, no he pasado por algo similar.
—Te has enfocado en los libros, lo sé, pero esto es la realidad Ali, entre nosotros ya no hay nada que salvar, la quiero, sí, pero no como antes, y no veo por qué yo no puedo encontrar a alguien más.
—No veo problema en que busques amor en otros brazos, pero no puedo ser yo, ella y yo somos mejores amigas —me levante del sofá —creo que es mejor que terminemos lo que falta del trabajo —fui por un par de libros a mi habitación y baje deprisa.
—¿Por qué te niegas a darme una oportunidad? —se levantó acercándose a donde estaba yo.
—Porque pides algo imposible, no puedo salir con el ex de mi mejor amiga por mas que te quiera —ambos nos quedamos en silencio, no estaba pensando lo que decía, grave error —por favor no hablemos más del tema.
—Ali, ¿yo también te gusto? ¿Cuándo te pregunte si alguien te gustaba, ese era yo? —tenia una sonrisa en su rostro
—No hablemos más del tema, por favor —tenía el corazón acelerado, y lo menor que quería son problemas, me aparté de él y puse los libros en la pequeña mesa de centro. Así fueron pasando los minutos, en un silencio incomodo, mi mirada no se separaba de los libros, quería terminar esto lo antes posible. Mis pensamientos vagaban en las palabras de Alex, ¿Mack había encontrado a alguien más? ¿Cómo paso? ¿cuándo?, como es que todo había cambiado y no me había dado cuenta, me suele pasar mucho, quizás no preste la suficiente atención a las conversaciones con mi amiga, ¿nos estábamos alejando?
El tiempo paso un poco lento, más de lo que hubiese querido, es de esas veces en las que quieres que el tiempo pase lo más raído posible, pero hace de las suyas.
—Ya hemos terminado —dijo Alex con la voz un poco apagada.
—¿Te puedo hacer una pregunta?
—Claro, dime —se quedó en el sofá con la mirada baja.
—¿Cómo supiste que Mackenna había encontrado a alguien más?
—Vi una conversación en su teléfono por equivocación, ella no lo sabe aún, al ver esa conversación me di cuenta de que lo nuestro no era lo mismo que hace un par de meses, hemos cambiado mucho, nos hemos alejado poco a poco, no la culpo, no nos enfocamos lo suficiente en que queríamos a largo plazo.
—Entiendo —fue lo único que atine a decir.
—Creo que es mejor que me vaya —se levantó, tomo sus cosas y se fue.
Me quede en silencio en la sala, no había nada que yo pudiera hacer para frenar los latidos del corazón que me retumbaban en los oídos, estaba un poco desconcertada, y es que no me había imaginado que llegaría a tal punto donde el novio de mi mejor amiga me llegara a confesar sus sentimientos, si había fantaseado un par de veces con que todo fuera diferente, pero que más que desde un principio no un año más tarde, cuando ya han creado una historia juntos, cuando ya tienen recuerdos en común. Me levanté y fui a mi habitación, después de todo necesitaba algo en que distraerme para dejar de pensar en el caos que tenía en mi mente. Me senté en el sofá frente a la televisión en mi habitación y puse un programa al azar, y me quedé ahí perdiendo el tiempo hasta que Mack llegara.