Él no parece del tipo de chicos que leen, es más alto que yo, pero no igual que Tae, sus ojos cafés y su apariencia dicen muchas cosas, que te hacen creer que es del tipo de chico que se mete en problemas, que tiene algún tipo de adicción o algo por el estilo.
No soy del tipo de persona que se queda con primeras impresiones, aunque la primera si deja mucho que decir, prefiero darme el tiempo a conocer a la persona, no juzgar lo que veo... Es mejor intentar conocer a las personas y deshacernos de ideas equivocadas.
El tiempo paso, no sé si fueron segundos o minutos, mis mejillas comenzaron a sentirse calientes, me sonroje por su tacto, y entonces escuche su voz.
—Quédate el libro —intenté soltarme, pero su mano seguí sosteniendo la mía, es incómodo, sentí como mis mejillas comenzaban a sentirse más calientes. —Al parecer tú has tomado el libro primero así que tú debes quedarte con él. —su mano dejo la mía.
Su tacto es suave y cálido, diría que sentí una corriente pasar por mi mano, pero no fue así, sus ojos estaban en mí y simplemente baje la mirada, entablar una conversación no se me da así que solo tome el libro.
—Puedes quedarte con él, por mí no hay problema —dije con el libro en mis manos.
—Solo quería verlo, no te preocupes —y sonrió, una sonrisa hermosa a mi parecer.
No me gusta ser del tipo de chica enamoradiza, pero con el enfrente de mí no podría negarme a conocer a mi nuevo fracaso sentimental como siempre.
Y es que seguido me pasa, el ser enamoradiza no es algo que me guste mucho, pero pues no he aprendido mucho con el paso del tiempo acerca de chicos más allá de lo que puedo leer en libros. Nunca he tenido novio o algo parecido, siempre he estado apegada a los estudios y que mis padres no me dejen tener novio también tiene mucho que ver, son muy sobreprotectores al igual que mi hermano mayor. He tenido varios amores platónicos, pero solo se quedan en eso, nada se da más allá de solo ver a la distancia a la persona que me gusta en determinado momento, pero que puedo hacer yo para cambiarlo si no se nada de chicos.
—¿Te gusta este género de libros? —no soy sociable, por lo que no sé qué preguntar ni cómo iniciar una conversación.
—No soy muy fan de los libros románticos, ni mucho menos de leer, pero quiero salir de lo monótono. —su voz es tan cautivadora.
—Hay muchas formas de salir de la monotonía, simplemente déjate llevar y no necesariamente hay que dejar de hacer lo que hacías antes —dije mientras caminábamos en busca de un libro para él.
—¿Es lo que tú haces? —dijo mientras miraba un libro de terror.
—No, la monotonía en que vivo me agrada un poco —tome un libro que me llamó la atención "A todos los chicos de los que me enamore"
—Al parecer te agradan ese tipo de libros ¿verdad?
—Sí, son de mis favoritos, aunque he leído otros géneros literarios
—¿Qué me recomiendas? —dijo mientras nos dirigimos a pagar los libros que tome y el que él tomó.
—Todo depende de tus gustos, pero si quieres salir de lo monótono puedes leer un libro romántico —dije con una sonrisa
Con él se me estaba haciendo fácil mantener una conversación, lo que no me había pasado con muchas de las personas que conozco, salimos de la librería, su apariencia estaba llamando la atención de las chicas que paseaban por la plaza y pasaban por nuestro lado, una sonrisa apareció en mi rostro, creo que así nos vemos mi mejor amiga y yo cuando vemos a alguien guapo.
—Fue bueno hablar contigo hoy T/N, nos vemos mañana.
—Digo lo mismo —seguí mi camino de regreso a casa entre canciones al azar.
Entre a mi casa y subí las escaleras para luego entrara a mi habitación, entre y dejé los libros en el escritorio al lado de la pequeña ventana para luego volver a bajar
—Hola mamá, ¿qué haces? —dije entrando a la cocina
—Estoy preparando unas galletas de bienvenida
—¿Quien ha llegado?
—A la casa que era de Thomas, el chico que te gusta; llegó una nueva familia —dijo mi mamá sin preocupaciones y mi papá entro a la cocina
—¿Hablan de Thomas? ─dijo mi papá
—¿Quién les dijo? —dije sintiendo como me ardía la cara, me había puesto roja de la vergüenza
—Querida, eso pregúntaselo a tu hermano —dijo mi mamá —¿Por qué no lo haces ahora que acaba de llegar?
—¡Jin! —en cuanto dije su nombre salió corriendo de la cocina y se encerró en su cuarto, no perderé mi tiempo corriendo hacia allá porque se bien que no abrirá la puerta.
Tareas, libros, lo mismo de todos los días, la verdad es que muy pocas cosas cambian en mi rutina, desde que mi mejor amiga y mi mejor amigo son pareja estoy cada vez más aislada, lo que me da un poco de tiempo para pensar por qué tengo tan pocos amigos, es decir, no soy como otras personas que están rodeadas de amigas y amigos y salen a fiestas o a algún lado todos juntos.
Joo Ri siempre me ha dicho que debería de salir más, conocer más personas y tener más amigos, pero que nada de cambiarla. Sé que eso no pasará; también me ha hablado de que debería tener novio, de dejar de estar siempre leyendo. Pero es demasiado difícil a mi parecer y no voy a salir con cualquiera que se cruce en mi camino, no estoy para besar sapos y ver cuál de todos se convierte en el príncipe que tanto espero.
Ya he hablado con muchas personas, pero mis conversaciones solo duran unos cuantos minutos y después a no tengo nada que hablar, me pongo demasiado nerviosa y no sé cómo hacer para encontrar algo interesante de que hablar, no tengo un amplio conocimiento de la sociedad en la que vivo, todo es más fantástico. Esas conversaciones largas solo son con Joo Ri, y el día de hoy con Jimin, es de las pocas personas con quien se me ha hecho realmente fácil hablar.
Después de un rato debatiéndome entre tener más amigos y elegir que canción escuchar completa mi madre me hablo para que bajara.