Opuestos |en EdiciÓn|

CAPITULO 1

 U N O

Mentiras, Chismes, fiestas... y un chico Raro.

 

Me encontraba ahí, una vez mas, aquel sueño, aquella escena, aquel bosque. 

De nuevo

Iba corriendo a través de un bosque completamente tenso, las piernas me dolían mis manos temblaban, y mi corazón latía con desespero. Me detuve por un momento mire hacia arriba, y luego hacia abajo

¿Lo, o la había perdido de vista?, ¿había logrado escapar? , cuando de pronto escuche las hojas crujir me cubrí la boca con las manos para evitar gritar. Me escondí tras unos arbustos y mire aquello. Era una figura alta, esbelta, perfectamente definida. las gotas de lluvia no paraban y caían cada vez con mucha mas intensidad. 

Tome una bocanada de aire pero de repente aquello volteo, era... ¿una mujer? si, era una chica. decidí salir corriendo pero me persiguió corría bajo la fuerte lluvia de la media noche. Me estaba asustando todo aquello. Respire tres veces antes de continuar pero no había notado el gran árbol que estaba en frente de mi. y choque contra de el. Di un grito ahogado, mi corazón se acelero. Mire mis brazos, los mismos estaban todos rasguñados y lastimados intente seguir corriendo pero esta vez mas lento cuando su voz me detuvo...

—No tan rápido— Dijo.

—¿A donde crees que vas?Intente levantarme del suelo pero no pude, mis pies temblaban con intensidad. Al igual que mis piernas y manos.

Te aseguro que tu muerte no sera tan dolorosa... 

—Astuta te creíste y pasaste por alto a tu peor enemiga— Dijo otra voz a mis espaldas. Esta era la de un hombre voltee pero ya era tarde solo escuche un impacto de bala, y posteriormente vi mi sangre en el suelo.  

(...)

Me levante bruscamente por aquel sueño, mis manos temblaban y mi corazón latía muy rápido. Me coloque la mano en el pecho y di un gran suspiro. mire alrededor de la habitación y me levante un poco Hastiada la luz del sol entraba por la ventana causándome un ligero ardor en los ojos. Camino en dirección a la ventana y la cierro bruscamente haciendo luego que la pared vibrara por un momento Eran como las siete y cuarenta minutos de la mañana, Aún era muy temprano. así que me tire de nuevo en la cama. El reloj despertador sonó aquel sonido retumbo fuertemente en mis oídos haciéndome reaccionar inmediatamente. Tome uno de los cojines color Beige que adornaban mi cama y me lo coloque en la cara dando en este un ligero chillido de fastidio. Tome el cojín y lo lance hacia el reloj haciéndolo callar después. 

Me levante de la cama, tome mi toalla, me coloque las pantuflas de color vino que se encontraban a mi lado y camine hasta el baño. Me cepille los dientes. Luego me quite la ropa y camine hasta la ducha, abrí la regadera y deje que el agua cayera sobre mi, solo deje que las gotas, cayeran por toda mi cuerpo al igual que mis pensamientos. imágenes y recuerdos se apoderaban de mi. Cerré los ojos con fuerza me relaje un poco y luego salí de la ducha, envolví mi cuerpo con una toalla, y con otra seque mi cabello. Camine hasta el armario lo abrí y me coloque unos Jeans de color negro con estampado de color crema. Tome una camisa de color claro y mi chaqueta de cuero. Me coloque mis zapatos de color negro y me mire por un momento en el espejo. Solo... perdida en mis pensamientos. Pensaba una y otra vez en el pasado. 

Tocan la puerta.

—Venus, cariño—Era la voz de mi abuela Margaret, Margaret carter  la Madre de mi padre, una señora un poco mayor, de tez clara. ojos color marrón con un tono de voz un tanto intimidante y cabello recogido. Digamos que es un poco sobre protectora cuando de mi se trata... Mas que sobre protectora un poco controladora pero aveces era un poco inquietante verla de esa manera.

—¡Venus—Elevo un poco el tono de voz. —¿Pasa algo cariño?— Dice en tono dulce y suave. Aquel "¿Pasa algo cariño?" Puede parecer que fue dicho por una persona "Cuerda" No digo que mi abuela no lo sea, pero hace un par de años no lo era. digamos que cuando mis padre fallecieron todo cambio por completo. yo era hija única y ellos murieron en un accidente automovilístico  aquello paso cuando yo tenia tan solo diez años. Digamos que me aislé por completo de la sociedad, me volví un poco mas callada ya casi no tenia amigos. Claro... a diferencia de Arthur, y Beverly. Mis mejores amigos desde que estoy en este lugar, en este pueblo. Antes vivía con mis padres en el condado de Crawford en Wisconsin. ahora vivimos en Jefferson Pero con mi abuela. Todo aquello, el funeral de mis padres, las noches que pase llorando, Hoy en día suelen proyectarse ante mis ojos en una especie de secuencia pasmosa que no me da respiro alguno.

—¡Venus voy a entrar ya!—Exclamo mi abuela con autoridad sacándome repentinamente de mis pensamientos. 

—He... yo... ¡Enseguida voy!—Exclame desde mi habitación, camine hasta la puerta di un gran bufido y la abrí.  

—¡Buenos días abuela!—Le dije con una media sonrisa.

—Cariño, ¿porque tardaste tanto?, ¿Te pasa algo?—Dice con una amplia sonrisa y adentrándose en la habitación.

—Venus, tu habitación, ¡Esta echa un completo desastre!—Me reprocha.

—Lo siento, e estado un poco cansada pero la ordenare—Le digo

—Eso espero... Sabes que no me gusta que dejes tus cosas fuera de su lugar, debes ser ordenada Me responde ella caminado por el lugar. Si, estaba muy desordenada. Pero vacía

—¿Que tal dormiste?—Me interroga. en ese momento recordé aquel sueño. 

—No tan bien, tuve una fea pesadilla.—Respondí sin ánimos. 

—Abuela, ¿no has considerado la idea de volver a vivir en Crawford?—Le digo encogiéndome de  hombros. 

—¡No!— Se exalto. —¡Nunca volveremos a ese sitio!—

—Pero... ¿Porque?—Pregunte con extrañeza. 



#2642 en Joven Adulto

En el texto hay: juvenil, juvenil amor drama

Editado: 22.03.2023

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