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Mi sobrino Cami toda la noche del evento estubo a mi lado, aunque él si estaba bien acompañado de su novia Andrea, que por cierto ya vivian juntos hacía un año y en dos meses se pensaban casar, mi hermana Patricia estaba feliz y se pintaba ya con nietos, camilo también era un muchacho exitoso, había estudiado administración de Empresas y ocupaba el cargo de gerente Logístico de Col-Export, en el puerto de Santa Marta, y él aunque no tenía tanto compromiso cómo el de Luis, también mantenía mucho tiempo ocupado en el puerto. Tenía una manía muy conocida por todos ir a almorzar a su casa materna junto con Andrea, a la que también le encantaba pasar tiempo con su suegra, y cómo no, nuestra familia es un goce total, siempre pasa algo nunca estamos sin líos, aunque no entenderé cómo Andrea siendo una joven linda, de familia muy creída y adinerada sea feliz y en verdad muy feliz compartiendo en mi barrio, con la familia. Pobre Andrea, la primera vez que llegó al barrio fué porque en la universidad les habían colocado un trabajo grupal y Cami ofrecio su casa para revisar apuntes,la pobre se habia perdido, le daba miedo preguntar, pero llevaba ya cómo una hora buscando la dirección, que se bajo cerca a la primera tienda que encontró pidió una botella con agua y de paso preguntó por la dirección, cosa rara en el barrio no sabiamos de direcciones entendiamos por apodos, nombres o apellidos, es más hasta por el color de la casa, pero de direcciones no, así que apenas le preguntaron a quién buscas?, Cómo se llama la persona qué buscas? ella sacó su papelito y dijo - Camilo Rodrígez, él está estudiando en la universidad del Magdalena-

y así sin más entendieron de quien se traba, - ah, tu buscas al camilin, de la familia manjarrez y ahi si le explicaron cómo llegar, todos en el barrio se conmocionaron al ver una rubia tan arregladita, tan bonita bajarse de tremendo carro ( un mercedez ) pero era tan sencilla, que esos jeans con tenis se le veía muy elegante,  luego de que mi hermana les ofreciera su famoso jugo de corozo con bastante hielo, Andrea quedó flechada con todo el cariño que se respiraba en esa casa, algo que ella pocas veces veía en su familia, no porque no la quisieran, el tiempo se apoderaba de todo y no les permitía apreciar lo mucho que ya tenían, así que escuchar carcajadas al fondo de la casa era raro para ella, y no le molesto para nada, al contrario le pidió a Cami ir hacia el patio de donde ella sentía salían las risas, y si señor ahí estabamos mi mamá, mi hermana Patricia, mi comadre Lizbeth, y yo, tomando café en las mesedoras y riendonos con todo los cuentos que sacabamos, cuando vimos llegar a la pareja de una mi mamá la miró de arriba abajo, analizandola con mirada de bacterióloga, igual la comadre y yo, patricia de una nos pillo y dijo - un momento, no inventen en sus cabezas, la muchacha es compañera de la U de Cami - , ahi si nos reímos con la muchacha, y le ofrecimos café,el pobre camilo enrojecio de la vergüenza, pero Andrea estaba dichosa lo decia su rostro se sentó con nosotras y puedo decirles que hasta comimos juntos porque ella se fué bien noche, y ese día en toda la tarde hubo un desfile en la casa de vecinos con muchas ganas de saludarnos, pero nosotras sabiamos que era el chisme de saber sobre la dueña de ese hermoso carro que estaba parqueado afuera, aprovechamos y a cada vecino que llegaba algún chisme nos contaba. esa tarde fue muy entretenida, nunca habiamos tenido tantos cuentos juntos, ya para irse, Cami la acompañó, obviamente todos estabamos preocupados que llegara bien, así que decidimos enviar a Cami y que se devolviera en taxi, esa noche todas en vela hasta que por fin llegó el taxi, camilo se bajo presuroso que le dieramos $5.000 pesos más que el taxista le estaba cobrando disque tarifa adicional que no se porqué, pues ni se imaginan todo lo que le dijimos a ese taxista ladron, le cobró la tarifa nocturna y una adicional, que era disque por el barrio, ofendidas y calladas no nos iba a dejar, a lo que el pobre taxista nos grito cuando se iba grupo de locas. Esa noche Andrea entró a nuestras vidas, y buscaba cada tanto una excusa para llegar a visitarnos y así enamorarse de nuestro Cami, y aquí siguen ellos ahora acompañando a Luis y aún enamorados con planes a futuro.

Eso mismo quisiera para mi Luis.

Luego de las fotos y muchas felicitaciones mi hijo se me acercó abrazandome y dandome las gracias por haberlo acompañado, porque siempre pensó que no lo iba a hacer y era que necesitaba que estubiera a su lado en el momento de dar su discurso, hay que nervios que me empezaron a dar, y aunque a mis 49 años, no me sentía nada mal, pues había luchado por muchos años con mi sobrepeso, y mi baja autoestima, no era raro que se sintieran nervios estar en la tarima y ser vista por tantas personas importantes, y si señor, mi hijo me llevo de gancho casi que a rastras y me dió de mi colada, me dijo mi frase. Qué tal!!!! - a veces no es lo que uno quiere sino lo que le toca- Lo miré horrorizada, caramba mi hijo dandome de mi colada tan así , tan descaradamente y yo, con mis piernitas temblorosas sin poder huir, me sonrío y ya en la tarima me ubique junto a él, para escucharle su hermoso poema.

Bueno sí su discurso.

Esta noche, ha sido una muy especial y aunque todos aquí celebramos mi nuevo nombramiento, quiero que sepan que para mí, es mucho más que eso, había preparado todo un discurso, y aunque raro en mi lo acepto, cambié todo en ultimo momento ( empezaron muchos murmullos) pero antes de eso, quiero que conozcan a esta mujer que tengo a mi lado, su nombre es Nubia Garnica Santos, mi Mamá (empezaron a aplaudir)y con su carita de orgullo empezo a hablar de mi, de una manera tan linda. - Esta señora a quién ven aquí toda tranquilita, no siempre fué así, pero es la que me impulso a seguir siempre adelante y luchar por mis sueños, estudiar la matemática hasta el punto que llegue... a amarla, pero ahora que lo pienso no entiendo cómo esta mujer logro que un niño amara las matemáticas - sonrió - a esta mujer quiero darle todos los aplausos y agradecimientos por haberme obligado a estudiar a luchar - y la gente colocandose de pie empezaron a aplaudir, yo como siempre llorando.