Nacer es comenzar a morir

En la profunda y vacía oscuridad, la luz parpadeante de una bombilla surgía, debajo, yacía una mujer solitaria, tratando de expulsar un alma que tenía dentro, pero no era suyo.

_ahgg , ya sal carajo! . Noo! , no puedo, voy a morir ...

Jadeos y un llanto muy amargo se escuchaban por ese lugar que parecía no tener paredes a su alrededor, pues la oscuridad devoraba todo. Unos minutos después unos llantos agudos y no muy fuertes opacaron los de la mujer. El alma que tenía dentro había salido al exterior cayendo en el frío piso de cemento, con pocas fuerzas la mujer sostuvo al pequeño y frágil niño , lo miró a los ojos sin ninguna expresión y dijo , " nacer es comenzar a morir "

Las mañanas, las tardes, las noches. Me gustaría saber que son, la verdad eso no es lo único que quiero saber, hay tantas cosas ... 9 años, toda mi vida he estado en este cuarto que tan solo tiene una bombilla que brilla muy poco y unas frazadas que uso para dormir. Este cuarto tan frío, oscuro y gris es un lugar que me hace sentir muy solo e intranquilo, me gustaría mucho salir a ver que hay detrás de esa puerta por donde entra una mujer, con un plato de comida. Ella es delgada, y siempre tiene una cara sin expresión, me mira con esos ojos fríos, que siento que me maldice mucho sin necesidad de hablar . Justo ahora ella entrará, la puerta se abrirá lentamente y ...

-Levántate, es hora de que veas lo miserable que puede ser tu vida.

Son siempre las mismas palabras, y se va. Pocas palabras salían de mi boca y, casi todas eran preguntas que nunca eran respondidas, me limitaba a no hablar más, puesto que le hablaba al aire. Eso recuerdo en toda mi vida, con el tiempo me empecé a quedar callado porque sentía que si hablaba o balbuceava, esa mujer me golpería, tenía miedo y no quería molestarla.

Aparte de aquella mujer, no he visto a otra persona , no sé nada sobre lo que pasa fuera de este pequeño y frío cuarto, no sé si hay más niños como yo, ¿Todos estarán en un cuarto como yo? , tengo mucha curiosidad por saber muchas cosas que desconozco, y más que eso, quiero salir. Aquí todo es tan rutinario, ella entra una sola vez y se va, yo me quedo en este cuarto, esperando, aún no sé qué, pero tengo el presentimiento de que si sigo aquí esperando pronto llegará el momento en el que pueda salir de aquí.

Aquel lugar donde se encontraba, era un lugar poco habitado, se sabía que algunas veces las personas con problemas se quitaban la vida por estos lugares, para evitar a la caprichosa vida.

La noche había llegado y el estaba profundamente dormido cuando de pronto un ruido fuerte lo despertó de golpe. Era la puerta que había sido abierta toscamente .

- ¿Qué es esto? ¿por qué hay un niño en este cuarto?

- No es nadie.

- Jajaja , ¿acaso lo secuestraste? , como sea míralo parece que va a morir con ese aspecto, si estás pensando ganar dinero con él, al menos trata de que no se muera antes jaja._ Dijo el hombre que apenas podía mantenerse en pie por lo ebrio que estaba.

- Vamos , estás borracho .

-tsk, no me digas que hacer carajo._dijo molesto

Los dos salieron y la mujer cerró la puerta. Él estaba un poco sorprendido, era la primera vez que veía a otra persona que no sea la mujer que todos los días entraba al cuarto.

Aunque no se parecían en nada, pudo sentir que una mala vibra se desprendía del cuerpo del hombre, algo que lo hacía sentir enfermo, y sofocado.

-¿Quién era esa persona? , como sea, no se veía como si fuera una buena persona , ¿acaso todos los que están a fuera son así? Bueno eso no importa, ya nada importa, solo quiero salir un momento._dijo un poco inquieto.

Fuera, el cielo estaba más estrellado que nunca, el viento era frío, pero era un frío agradable. La noche transcurrió normal y con un poco de ruidos al exterior que el niño pudo escuchar , estaba curioso pero optó por irse a dormir, ya que sentía que, si la mujer lo atrapaba, se enojaría mucho y, probablemente el niño sería golpeado.

Las horas transcurrieron pero el niño aún seguía despierto, no podía quitarse de la cabeza la idea de salir y ver el exterior. Levantó su cuerpo del piso y acercó su oreja derecha a la puerta fría que, rápidamente lo hizo estremecer. Dejó dee respirar por unos segundos, intentando eliminar cualquier sonido para que pudiera escuchar bien. Exhausto retiró su rostro que estaba pegado a la puerta, y se sintió una ola de ansias, y nerviosismo, no había escuchado nada y por un momento la idea de salir de ese lugar se le asomó por la cabeza, dejándolo con el cuerpo temblando.