CAPITULO 01

Mire las carpetas sobre mi escritorio y gire mi rostro hacia el monitor donde observaba varias imágenes de las recientes victimas. Eran diez en total, diez personas asesinadas en un radar de treinta kilómetros de la cuidad. La razón por la cual esas diez personas eran un caso especial fue debido a la similitud en la cual fueron asesinadas.

- Tenemos un nuevo reporte, agente.

Asentí e hice aun lado las carpetas y tome mi placa. Saque el arma de mi cajón y fui detrás de mi compañero.

- Kelly Benson, veintitrés años, estudiaba en  la universidad local que se encuentra a unos minutos de aquí. La ultima vez fue vista tomando café con un chico el cual asegura haberse ido antes que ella.

Mire el cuerpo de Kelly. La pobre chica tenia varias marcas, incluso mas que las anteriores victimas.

- Esta peleo - le dije a Logan quien seguía anotando lo que los testigos y su pobre madre que apareció minutos después que nosotros. - Lucho contra el. Tiene marcas alrededor de sus brazos y cuello, debemos llevarla con Patrick para que nos ayude a verificar si hay alguna huella que podamos revisar en el sistema.

- Aun no puedo creer es como aun no hemos podido atrapar a este bastardo.

- Es un asesino profesional Logan, no nos lo hará fácil. Para ellos esta mierda es un juego, un juego en donde nosotros solo somos una pieza importante. - entre dientes me levante y le pedí a los forenses hacer su trabajo.

Una vez que obtuvimos unas cuantas pruebas nos dirigimos a la estación donde esperaríamos por el examen forense. Lo mas difícil de todo esto fue hablar con sus padres ¿Como les explicas a estas personas que su hija no fue alguien al azar? Quien sea que la hubiera asesinado conocía muy bien su rutina.

Talle mis ojos cansados y saque las llaves de mi apartamento. El día de hoy termino de la misma manera que los demás, el muy maldito no dejo huellas. Supo perfectamente borrarlas de su cuerpo, incluso la piel debajo de las uñas de la victima no se logro identificar.

- ¡Blake! - mierda. Cerre la puerta. Había olvidado por completo a Alia. Mire como la morena me observaba con una hermosa sonrisa curvar su delicado rostro maquillado ligeramente, hice una mueca al notar las velas a su alrededor. - ¿Te olvidaste, no he cierto? - la sonrisa que decoraba su rostro se elimino por completo. Resoplo molesta y se giro para tomar una vela y apagarla con un fuerte soplido.

- Alia, bebe, lo siento. Hoy tuve un día muy difícil y... - Levanto una mano callándome.

- ¿Cuando sera que tendrás tiempo para mi Blake? -

- Siempre tengo tiempo para ti, Alia.

- Eso no he cierto. Hoy es nuestro aniversario y lo has olvidado por completo, desde que entraste al FBI no has echo mas que evitarme. Escucha... - camino hacia a mi colocando sus manos sobre mis hombro - Se que has trabajado muy duro para estar donde estas ahora, pero soy tu novia.

Suspire y coloque mis manos sobre su estrecha cadera para acercarla un poco mas hacia mi cuerpo. Acerque un poco mi rostro hasta rozar su nariz y cerré mis ojos necesitaba sentirla de esta manera. Alia había llegado a mi vida como una luz iluminando todo a su camino, en mi camino como ninguna otra mujer. Con sus rasgos hindúes y aquellos ojos grises fue todo para llamar mi atención, pero lo que mas me atrajo fue la forma en que tenia una opinión para todo y no dejaba sus palabras al aire sin luchar. Ella fue mi verdadero salvavidas.

- Te prometo que haré todo lo posible para estar mas tiempo contigo y tachar en mi calendario cuando son nuestros aniversarios. - dije casi susurrando y la sonrisa que surco en su rostro fue todo lo que necesite para cerrar nuestras distancias y sellar mi promesa aplastando mis labios contra los suyos.

Mire la luz entrar por la ventana de nuestra habitación, como era tan clara y la luna se asomaba por una esquina. Quite el brazo de Alia que rodaba mi estomago y me levante de la cama para ir al baño, en el transcurso tome mis boxers los cuales mi novia quito con mucha rapidez y me los coloque. Una vez terminado mis necesidades eche un vistazo al cuerpo desnudo de Alia y sonreí torpemente al recordar como me había montado y me había hundido tan profundamente dentro de ella, sacudí la cabeza y me encamine hacia la cocina por un vaso de agua.

Una vez que mi boca no se encontraba seca me encamine hacia la habitación, estaba seguro que Alia estaba lista para una tercera ronda.

- Blake - me congele ¿Que demonios fue eso?

Un suave gruñido como de un animal salvaje provoco que mi corazón latiera con fuerza.

- ¿Quien anda ahí? - dije lo suficientemente fuerte pero no tanto para no despertar a Alia.

Nuevamente otro gruñido un poco mas fuerte se escucho desde la entrada del departamento, camine de prisa hacia ella aunque era mala idea por suerte tenia un arma debajo de la mesa de la sala. La tome y mire sobre el ocular. Nada.

Suspire pesadamente y tire de la puerta al mismo tiempo que apunte con mi arma. Mi corazón se sentía pesado al estar golpeando violentamente mi pecho y mi respiración agitada. No había nadie, baje mi vista y fruncí al ver huellas de perro. No estas era mas grandes, me incline hacia ellas y toque el lodo.

- Debo estar delirando.

Si, era la única respuesta. Estaba seguro que esas huellas desaparecían y como dijo Alia estoy tan metido en mi trabajo que ya veo cosas.