Oscuridad en tu mirada

CAPITULO 6

Los errores pueden mostrarse de muchas maneras, una de ellas es besar a la persona que más odias.

 

CAPITULO 6

 

ELLE WALTON

 

Finalmente, llegó el domingo, hora de la fiesta, le dije a Emma que me hiciera compañía, pero dijo que estaría ocupada ayudando a sus padres. Opte por ponerme un bikini, compuesto por un sujetador y una braguita ceñida verde, dejo mi cabello suelto con un pequeño broche. Bajo las escaleras expectante por ver la fiesta, es difícil reconocer a alguien de tantas personas, busqué a mis hermanos en la multitud como loca, finalmente vi a Michael, tengo que gritar para que me logre escuchar.

—¡¿La fiesta no se suponía que era a las tres, Michael?!—pregunté gritando, carraspeé la garganta del dolor que siento después de alzar la voz.

Se acerca a mi oído, —¡Era hermanita! ¡Pero los chicos adelantaron la fiesta, hace una hora que comenzó! —respondió tomando un sorbo de su cerveza.

Bueno, qué más da, una hora no es la gran diferencia. El día está soleado y parece que va a permanecer así por mucho tiempo, por lo que hace calor. Los hombres están vestidos con pantalones cortos y las mujeres con bikini. Me alejé de mi hermano y me dirigí a una silla lejos de la civilización, empecé a frotar protector solar en mi cuerpo relajándome, pocos minutos después aparece en el suelo una sombra de alguien acercándose.

—¿Te ayudo? —preguntó Aarón con una sonrisa, su tono adquirió una voz sexy y coqueta, se sentó en una silla a mi lado y de inmediato me alejé de él.

—No, gracias, idiota —respondí sin interés alguno, sería la última persona que me tocaría.

La sonrisa de Aarón se enganchó, —¿Por qué siempre me llamas idiota? —inquirió sin esa pisca de burla.

¡Oh, Dios de los solteros!, Como lo odiaba.

—Porque lo eres —dije sin pensarlo dos veces.

Él se ríe ligeramente y esboza una sonrisa burlona, no pude evitar fijarme que tiene una sonrisa encantadora. Su boca está algo roja por el vodka, al fijarme en su abdomen veo que tiene un tatuaje de un pequeño dragón en la parte superior de su cintura, tiene unos shorts cortos que lo hacen ver demasiado atractivo.

Es un pecado en vida que no voy a cometer.

De donde vino este tipo, parece un jodido ídolo del kpop.

Al notar que lo estoy mirando, él hace lo mismo, —No sabía que tenías todo eso escondido —susurro, señaló el bikini con su dedo índice en mis pechos, ¡mis pechos!

Hundí el ceño y lo miré perpleja, —¿Ahora eres un pervertido? —ataqué.

—¿Esperas venir con ese bikini ajustado y no verlo? —preguntó incrédulo, su voz salió con un carraspeo nervioso

—Yo no soy la que tiene ese abdomen para morirse —murmuré, pero sé que alcanzó a escuchar.

Resopló ante mi estúpida declaración, Aarón se muerde el labio reflexionando por un momento y la comisura de su labio inferior se levanta formando una sonrisa arrogante—¿Te gusta lo que ves?

—No —me limité a responder, no iba a aportar más a su ego.

—Eres una mentirosa cerdita, te he pillado mirándome intensamente —se burló por mi expresión de horror en mi cara, ¿Cómo alguien podía tener tanto egocentrismo en sí mismo? —: ¿Quieres saber todas las cosas que te haría aquí mismo con ese pequeño bikini? —expresó arrogante, decir que estaba sorprendida era poco, casi se me sale el alma y los dos pulmones.

—¡Qué demonios Aarón! ¡¿Desde cuándo somos tan cercanos para que digas esa clase de cosas?! —exclamé enojada por sus repentinas palabras.

—Ya sé que te gusto Elle, ¿por qué no lo admites? ¿Estabas tratando de llamar mi atención al desafiarme? Pues ya la tienes —emitió orgulloso esbozando una de sus típicas sonrisas, como si fuera el sultán de un harem, harem, mi trasero y su abuela.

Hago una mueca y frunzo el ceño, —¿Así es como tratas a todas las chicas? ¿Así tratas a Raquel? Fríamente y después te la follas, sabía que eras un mujeriego y un idiota, pero llegar a este punto creo que estás pasándote de la raya, amigo —reclamé aún sorprendida por lo que había dicho hace momentos.

—Sé que te gusto, aunque lo niegues, lamentablemente no estoy disponible, nunca me he enamorado y nunca lo haré —respondió como si a mí me importara, me importa una hectárea de limón y tres libras de coca.

¿Su voz siempre es tan fría? Este idiota tiene que ser el Dios del frío, de eso estoy segura.

—¿Quién dijo que me gustas? —evite reírme para no avergonzarlo frente a las personas, — No me importa tu concepto sobre el amor, al contrario de tu amigo que me dijo que estabas interesado en mí, pero ya veo en qué aspecto se refería —inquirí viéndolo como un monstruo pervertido.

—¿Yo? ¿Interesando en ti? Serías la última chica de la cual me enamoraría, eres una malcriada, tonta y una completa mocosa —pronunció en seco, sin aderezo, sin plastilina, como toma y vete, no hay vicks VapoRub para que te sobes.

Dios, sí que sabía hacer sentir mal a una persona.

Tuve que tomar un respiro profundo para encontrar paz interior, —Lo mismo digo, espero que no vuelvas a hablarme como lo hiciste hace un rato —le contesté seca y cortante, mi voz sonó tan fría como la de él.

—Como sea, me da igual —respondió sin interés, se alejó dando zancadas, como tiene piernas largas, llegaba en cinco pasos a donde quería, al contrario de mí, que era algo bajita a su lado.

Qué jodido drama con ese chico, ¿pensar que estoy interesado en él? Ja, ni en mil sueños pasaría eso.

No han pasado ni diez minutos cuando se está besando con una chica en la piscina y Raquel apretando los dientes en otra dirección. De verdad se pasaba de idiota. Noah y Carlos se acercan, al llegar se sientan a mi lado.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.