CAPITULO 8

"Ella no es fría, ella es cálida, ella tiene mucho amor para dar, solo tiene miedo de lastimar su corazón"

CAPITULO 8

AARÓN KOCH

Observo la fría expresión de Elle al subirse a la camioneta, me muerdo la lengua para no reírme, por un momento me parece tierna, su puchero y sus mejillas me hacen sonreír.

No entendía por qué se avergonzaba por el beso, la hubiera dejado en paz si lo hubiera admitido. Las mujeres son tan difíciles de entender, Elle se parece tanto a mi hermana menor, nunca se sabe que está pensando esa tonta.

—¿Por qué me dijiste que querías salir conmigo? —pregunta por lo bajo con la voz tensa, retrocedió un poco para cruzar los brazos sobre su pecho.

No había notado lo que llevaba puesto hasta ahora, el vestido negro le resaltaba su figura, su cabello tenía algunas ondas. Puse una mano en el volante y arranqué la camioneta manejando hacia la fiesta.

—Por cierto, te ves muy bien y solo quería hacer una pequeña broma —respondí con una sonrisa al recordar su cara de tonta de hace momentos. Elle resopló y gruñó aún más enojada.

Infló sus mejillas como si mi comentario la explotara aún más, —¡Demonios! ¡¿Por qué sigues haciendo esto, Aarón?! —exclamó sacudiendo sus manos.

—Tanto te molesta mi presencia, ¿eh? —inquirí enarcando una ceja, la verdad era que me importaba muy poco lo que pensara de mí, me divertía su expresión de fiera.

—Sí, desde que te conocí me has traído problemas, ¿Quieres acostarte conmigo?, ¿tienes alguna apuesta sucia y después planeas dejarme? Porque créeme que conozco esa clase de chicos y lo peor que le pueden llegar hacer a una persona —soltó sin tapujos, la sinceridad en sus ojos me dejo sin aliento, por un momento creí haber visto en su expresión dolor, pero si hubo algo lo cambió de inmediato.

—Wow, no tienes que ser tan dura, ¿sabes? No soy ese tipo de chico podrido. El maldito beso de ayer solo fue un error, algo que no debió pasar, así que no tienes que preocuparte, no entiendo por qué simplemente no lo admites —contesté con rapidez.

En cierta manera sentí cierto rechazo cuando me dijo que solo le causaba problemas. Joder, ¿qué estás pensando, Aarón? No te debe importar lo que piense.

¿Por qué cuando está conmigo siempre está enojada? Cuando está con Noah y Carlos siempre la veo sonreír, ¿piensa que haría una estúpida apuesta para acostarme con ella? Podré ser un estúpido, pero a pesar de todo tengo un poco de moral.

—Reconozco que ayer nos besamos, ¿estás satisfecho?, ¿eso era lo que querías? —confesó frustrada, Elle parecía una fiera cuando le quitan a su hijo y hay que decir que es algo loco.

—No perdiste ningún órgano, menos un diente por admitirlo, ¿tanto me odias?

Hundió su ceño como si mis palabras la hubiesen calmado un poco, —No te odio, solo que siempre haces cosas estúpidas a mi alrededor, lo cual hace que no quiera verte —masculló entre dientes.

—Okay, de ahora en más trataré de mantener mi distancia contigo —emití sin más, esta chica no me importaba tenerla cerca, siempre que conversábamos me salía de mis casillas.

—Por fin razonas algo bien —espetó con sarcasmo, demasiado sarcástica diría yo —. ¿Alguna vez has confiado en alguien? —añadió mirando por la ventana, al parecer logró calmarse.

—¿Por qué tienes que preguntarme eso ahora? —sentencié.

—Simplemente, quiero saber la razón de porque eres así, algo te marcó en el pasado para que actúes como si no tuvieras corazón —respondió esperando mi respuesta.

La pregunta me tomó por sorpresa, no pensé que sacaría ese tema en este preciso momento. Nunca nadie me había preguntado algo así, hubo algo que me marcó totalmente y fue la muerte de Stefany.

—Déjame pensar, alguna vez lo hice, sin embargo, no vale la pena, entregarte a alguien es como entregar todo de ti, al final esa persona nunca lo valora.

—Yo no pienso así, creo firmemente que el amor es una montaña rusa. Tienes que estar preparado para bajar y subir, si es la persona correcta tomará tu mano y no te soltará, de eso se trata confiar en alguien —admitió Elle, di un vistazo en su dirección y tenía una ingenua sonrisa en sus labios.

—¿Y si es la persona incorrecta? —pregunté girando en dirección a una calle, algo intrigado en realidad.

—Si es la persona incorrecta, debes dejarla ir y aunque quedarán cicatrices, llegará alguien que cure todas tus heridas. El miedo a enamorarse siempre estará ahí, el temor a salir lastimados, pero si estás con la persona adecuada, ese miedo poco a poco desaparecerá.

En cierta medida, la cerdita tenía un poco de razón. Mi padre le fue infiel tantas veces a mi madre, y ella aun sabiendo simplemente lo ignoraba, es por esa razón que no creo en los finales felices, si es amor, ¿por qué hay tanta infidelidad?, ¿por qué uno de los dos tiene que sufrir?

—No veo el amor de esa manera —le respondí cortante.

—Creo que todos tenemos un concepto distinto del amor, debes tener tus razones para pensar así.

—Sí —me limité a responderle. No preguntó la razón de que me sucedió, lo cual si hubiera preguntado no hubiera respondido, no hablaré de mis padres con la persona que en cierta medida me odia.

[...]

ELLE WALTON

No quiero invadir su privacidad, siempre he pensado que la actitud de alguien se debe a los traumas que ha pasado cuando joven. Si algún día confía en mí, entenderé por qué es tan desconfiado con todos.

Al llegar a nuestro destino la lujosa entrada me sorprendió, todo era muy sofisticado, e incluso el guardia de la entrada tenía un aspecto que daba miedo. Me miré a mí misma y mis instintos naturales me decían que no estaba vestida para la ocasión, todo por culpa del idiota de Aarón. Se bajó de la camioneta con su esbelta figura que lo caracteriza, le entregó las llaves a un joven y me ofreció su brazo, de mala gana lo tomé.