Unos días después del cambio en la personalidad de Nagi, tanto el chico lobo como la chica zombie lo espiaban en el salón de clases. Nagi estaba sentado junto a la ventana mostrando una total o diferencia a lo que lo rodeaba. Elizabeth y Shiba no sabían si aquel era el chico normal de siempre o no.
- ¿Qué están haciendo? - Erika apreció de repente sorprendiéndolos a ambos
- ¡Oye! ¡No me asustes así! - rugió Shiba.
-¿Qué están haciendo? - insistió Erika - ¿No entrarán al salón? - y sin oir más entró al salón seguida de ellos - Buenos dias Nagi - saludó como siempre pero este la ignoró rotundamente - ¿Nagi?
- N-Nagi...¡Buenos días! - dijo nerviosa Elizabeth
- Oye Nagi ¿Te encuentras bien? - quiso saber Shiba - ¿Eres el Nagi de siempre?
- ¡Cállate! - rugió Nagi mirando a Shiba - ¡Eres un fastidio! - su mirada estaba cargada de desprecio hacia el chico lobo
Con esa respuesta ambos confirmaron que no había regresado en lo absoluto.
- Veo que no regresó - comentó Shiba
-¿Qué quieres decir con eso? Soy yo - respondió indiferente
Elizabeth veía que él había cambiado por completo, aquel nuevo Nagi no se parecía en nada al que ella amaba y eso la entristecía y decepcionaba a su vez. Pero Erika no entendía nada de nada
- ¿A qué estás jugando Nagi? - quiso saber la chica demonio
- ¿Jugando? Cállate y deja de decir idioteces - le espetó Nagi - No por ser un demonio de alto rango debo subyugarme a tí
- Es un juego ¿Verdad Shiba? - intervino nerviosa Elizabeth
- Si claro - contestó el chico lobo - Es un juego, estamos jugando y Nagi está actuando
- Que extraño que Nagi haya accedido a participar en un juego así.- Dijo Erika - ¿Cuánto tiempo durará este juego?
- No lo sé - dijo sinceramente Shiba - Espero que termine pronto
- No me importa en tanto no se meta conmigo claro está - aquello lo dijo Erika sonriendo pero con una mirada amenazante a Nagi quien le devolvía esa mirada con frialdad.
Elizabeth estaba muy nerviosa y rogaba que todo acabe sin problemas graves pero lo cierto era que Nagi no le estaba facilitando nada la tarea. Con ese nuevo Nagi ella sabía que sería imposible que no haya problemas. La clase de biología había dado inicio y el profesor estaba explicando algo que les resultaba un tanto aburrido a todos y Nagi no fue la excepción. Se quedó dormido en plena clase, algo que jamás había echo desde que hubo entrado a la Academia Star. El profesor al ver al chico invisible cambio su expresión a confusión y posterior furia ya que este era un gran estudiante. De haberse tratado de otro, simplemente lo habría despertado pero no a Nagi. Todos los compañeros se veían confundidos al observar a Nagi actuar así. El timbre que anunciaba el final de la hora sonó. El profesor abandonó el salón evidentemente irritado. Elizabeth miró a Shiba muy preocupada y este sintió ganas de llorar con solo ver la exposición de preocupación de su amiga.
- Elizabeth - dijo Shiba - No puedo creer que se haya pasado la clase durmiendo, solo yo hago esas cosas
Nagi seguía durmiendo sin haberse enterado de nada sobre lo sucedido. Erika se les acercó
- ¿Esto es parte del juego del que hablaban? - preguntó
- ¿Un juego de castigo? - preguntó ironizado Ray
- ¿Qué están haciendo? - quiso saber Natsume - Aún tratándose de un juego, lograr que se quede dormido así....ese no es el Nagi que conocemos.
Elizabeth sentía que ya era imposible ocultar lo que estaba sucediendo pero antes despertó a Nagi o al menos eso intentó hacer pero este seguía dormido. Tuvo que insistir bastante para que reaccionase y despierte.
- Cállate, hacen mucho ruido. ¡Callense! - dijo bruscamente él
- ¿Callense? - repitió Ray
- ¿Eso también es parte del juego? - preguntó Natsume - Bueno a mí no me lo parece.
- ¿Qué juego? ¡Me tienen harto todos ustedes! - dijo despectivamente Nagi - No iré a la próxima clase, tengo sueño y son una maldita porquería. Nos vemos
-¡Espera! ¡Nagi! - gritó Elizabeth pero fue al vacío, él no estaba.
- ¿Qué sucedió? Eso fue gracioso - dijo Natsume
- No es un juego de castigo ¿No? - dijo Erika - Vamos, cuenten qué sucedió.
Elizabeth y Shiba sin poder ocultarlo más les contaron toda la verdad sobre lo sucedido.
- No puedo creerlo - dijo Erika al finalizar la explicación - ¿Por qué dejaron que Nagi beba eso? Tú debiste beberla Shiba
- No me culpes por eso - contestó Shiba
- Yo le dí la bebida antes de poder explicarle pero... él no escucho y la bebió
-¿Qué clase de bebida magica le dieron? - quiso saber Ray
- No lo sabemos - contestó Shiba
- ¿Cómo que no lo saben? - preguntó sorprendido Natsume
- Bueno la descripción estaba en la lata pero escrito en la lengua oficial así que no sabemos - respondió Shiba
- ¿Qué clase de idiota eres Shiba? - dijo Erika
- Puedo hablarla pero no leerla ni escribirla - dijo Shiba
- Yo tampoco...lo siento - dijo Elizabeth avergonzada
- Que inútiles - dijo Ray
- ¿Tienen la lata? - quiso saber Natsume
- Si, está aquí
Ella buscó entre su bolso la lata y se la dió a Natsume quien la leyó y enmudeció
- ¿Qué dice? - preguntó Ray - No me digas que tampoco puedes leerlo
- No soy tan estúpido - se defendió Natsume - Puedo leerlo
- Lamento ser tan estúpida - dijo avergonzada Elizabeth
- Eso es un poco hiriente - dijo Shiba
- Este refresco corrige las personalidades - continuó él chico momia
- ¿Corrige las personalidades? ¿Hablas en serio? - preguntó Erika
- Beba este refresco y su personalidad cambiará por completo, úselo en personas malvadas y crueles, eso dice exactamente - respondió Natsume - Se volceran personas buenas en un momento, es todo lo que dice
- Definitivamente debista tomar esa bebida Shiba - decía Erika
- ¿Por qué yo?
- Si te cambia por completo, tal vez hubieses dejado de ser tan estúpido - le dijo Ray
- ¡No me insultes así! - Se ofendió Shiba
- ¿Cuánto dura el efecto? - preguntó Elizabeth preocupada
- Aquí dice que dura una semana, así que habrá que esperar al próximo fin de semana - contestó Natsume
- ¿Toda una semana? - la chica zombie no podía creerlo
- ¿Por qué demonios la academia deja que se venda algo así? - se quejó Shiba
- Debieron leer bien las instrucciones - dijo Ray - La académia no tiene la culpa de que sean unos estúpidos
Elizabeth sentía una gran ansiedad de que acabará pronto la semana pero no había otra opción más que ser paciente y esperar. Solo esperaba que no haya conflictos aunque ella tenía malos presentimientos sobre eso. Ahora Nagi era otra persona diferente. Los días fueron pasando y las clases también, en la clase de Medicina Natural el profesor optó por hacer una pregunta a Nagi. Pero este ignoró al profesor completamente. Elizabeth lo empujó para hacerlo reaccionar ya que estaba mirando por la ventana.
- ¿Eh? ¿Qué quieres? - preguntó despistado Nagi
- Abre el libro en la página 128 y resuelve el problema - ordenó el profesor
- ¿Problema? - dijo Nagi indiferente - No sé de qué me hablas
El profesor le pidió a Shiba resolverlo pero este expresó que no entendía nada, sin embargo el profesor decidió darle una oportunidad
- ¿Por qué no intentó convencer a Nagi de que lo resuelva? - dijo Shiba
- Será por su actitud - le contestó Erika
- Definitivamente fue eso - prosiguió Ray
- Creo que a Shiba esa bebida le habria echo bien - dijo Natsume - Deberíamos comprar una ¿No?
- Oye no te metas conmigo - dijo Shiba - Me doy pena a mí mismo
- Shiba - dijo el profesor - Inténtalo
- Es que no se
Nagi empezó a dormir sintiéndose en extremo aburrido en clase, no estaba interesado en nada ni en nadie. Elizabeth se sintió frustrada ya que sentía que no podría hacer nada sin la ayuda de Nagi, tan así que tomo una decisión. Se levantó del escritorio y fue a otro lugar a sentarse.
- Si a él nada le importa - murmuró - Entonces a mi tampoco me importará ya él