CAPITULO 27

Connie.

Octubre 31, 2019 🌹


























 

La mirada de Marco luce más allá de lo alarmada y eso es todo lo que necesito para sentirme de la misma manera. Esta tarde, aprovechando que no se encontraba nadie en casa, traté de localizarlo con desesperación por teléfono para pedirle que viniera a verme. Desde lo ocurrido no nos habíamos visto, pero él me ha aclarado que últimamente ha estado muy ocupado buscando respuestas por todos lados.

Lo que me ha dicho ahora... me ha dejado sin esperanzas de encontrar una solución.

Sinceramente ya dudo de que exista una.

— Lo... lo lamento tanto, pequeña.— su voz suena más allá de lo débil y angustiada. Trato de mantenerme firme, pero siento que en cualquier momento me desarmaré—.  Tampoco lo entiendo... Ningún sargento ha querido escucharme, ni aún mencionando que se trata de una inocente la que corre peligro ahora. — Bufa y después talla su rostro, en claro gesto frustrado —. No me han creído. Parece que están realmente conscientes de que eres...—

— De que soy... Lamia. Es por eso que no quieren ayudarnos a detener a esas cosas, ¿cierto?— no dice nada, pero es su silencio y su mirada desviada, decaída, la que ahora me muestra la dura verdad detrás de eso. Suspiro y después me pongo de pie, dándole la espalda. Mis ojos enfocándose en la chimenea frente a mí—. Tus amigos deben creer entonces que yo... que yo merezco esto por lo que antes fuí. Deben creer que... que yo no...—

— Están cegados por el miedo, Connie. — me interrumpe, pero no lo miro, siento que si lo hago terminaré de destrozarme y no quiero que él me vea así porque también lo siento muy preocupado por esto. Por mí—. Ellos jamás dejarían solo a alguien que de verdad los necesitara, los conozco. Sin embargo ahora no los entiendo. Siento que me ocultan algo, en especial mi sargento. Si él temiera de ti... me pediría que me alejara y que no interviniera, pero sabe que tengo una misión importante con Adela. Ni siquiera le ha dado tanta importancia al asunto que tengo contigo. Ni siquiera me ha pedido el dejar de involucrarme para protegerte.

Esas palabras me hacen regresar mi mirada a él.

— ¿Qué es lo que supones, Marco?

— Que ellos parecen tener otra intención contigo, Connie.

— ¿Otra intención?— mis ojos se abren al tope al considerar algo horrible—. Marco... ¿acaso también tus compañeros planeaban matarme?

— No, tranquila. No pienses eso...— ahora él es el que luce angustiado por eso—. Bueno... sí sospecho que el Guardián haya tenido algo que ver con tu regreso cómo humana, por eso sería absurdo pensar que él te quisiera muerta, ¿no lo crees? Así que te ruego que confíes en nosotros por ahora, Connie. — esas palabras me hacen sentir un poco aliviada de pronto, así que asiento—. Nosotros estamos para proteger, recuerda. Sin embargo me ha dado mucho que pensar el comportamiento de mi sargento. Tal vez guarda algo importante con respecto a ti. Él jamás actuaría tan despreocupado ante una situación así de alarmante con los Oscuros.

Sus palabras me hacen cuestionar también la reacción que han tenido sus superiores y sus compañeros respecto a este desastre y, considerando todo lo que me ha contado de ellos, me ha hecho sentirme un poco extraña, pues, aunque ellos lo han ignorado con sus llamadas de auxilio para que nos ayuden a detener a los demonios que me persiguen... también han actuado de manera misteriosa al mantenerse tan tranquilos y quietos, cómo si ellos también tramaran algo en secreto, cómo si lo tuvieran todo bajo control.

<<Están planeando algo...>>

Es a lo que Marco y yo hemos llegado.

Tanta duda e incertidumbre me ha revuelto la cabeza. Ya estoy harta de vivir a la espera de algo horrible, ya estoy harta de sentirme insegura con todo y con todos. Selen me dijo la otra tarde, cuando se manifestó aquí frente a mí, que no temiera, que la ayuda estaba en camino, que era importante que resistiera y que por nada del mundo cediera ante ninguno de esos seres, y tampoco que lo hiciera con... él.

¿Él?

¿A quién se habrá referido exactamente? ¿Quién es ese él?

No he querido mencionar esa duda con Marco porque, además de que no había tenido oportunidad de hablar con él sobre esto, tampoco quería preocuparlo con el tema. De por sí ya luce muy estresado con todo lo que me ha dicho, ya ha sido demasiado lo que ha hecho por mí. Ha salvado mi vida más de una vez... Ha investigado por semanas todo este desastre, ha intentando solucionarlo, arriesgándose a meterse en problemas con los suyos.

Le he aclarado lo que el... fantasma o espíritu de Selen, me confesó la otra vez, le traté  de explicar lo mejor que pude lo que ella me pidió con mucha desesperación, acerca de las horribles intenciones que tiene alguien importante y peligroso conmigo, y que por eso no sólo yo estoy en peligro, si no que también el resto del mundo. Ella me rogó para que no me dejara vencer. Selen era consciente de que algo horrible estaba por venir para mí. Ha sido difícil para mí asimilarlo, y también para Marco, pues me he dado cuenta de lo afectado que se quedó después de contarle todo eso.

Es por ello que he preferido callarme algunas cosas que sé que podrían perturbarlo más. No puedo darle más molestias, siento que ya lo conozco un poco, por lo tanto sé o al menos deduzco que si se lo digo él volvería a irse para tratar de investigarlo también.

No quiero que se vaya de nuevo...

Temo de cualquier cosa cuando él no está cerca. Por él es que sigo aquí.

Ni siquiera ha estado para cuidar de Adela. No puedo creer todo lo que hace para no dejarme sola en esto, aún sabiendo, tal vez, que ni siquiera debería, que ni siquiera... lo merezco.

Lo escucho suspirar de pronto, devolviéndome al aquí.