Capitulo V

Entramos a la casa y los chicos llamaron y les dieron permiso. Mientras ellos llamaban yo estaba en la sala sin saber que hacer , ¿Que tenia que preguntarle a mi tía?, ¿Como debía preguntárselo?... Y ¿ si me gustaría la respuesta?. luego volvimos al sótano, y ahí me volví a sentar.

No sabia que hacer me estaba volviendo loca pensando en mi tía y en lo misteriosa que se había vuelto, tal vez solo era mi imaginación pero... Y si no lo era... Y si en vez de decirme: "Son solo tonterías y juegos que inventábamos" me decía: "Si es verdad a tu tío lo mataron, hay hombres muy malos y de mal carácter por estos lugares y puede que a tus padres los mataran también ".

Me volví más pequeña y enterré mi cara en mis piernas, mientras unas lágrimas salían de mis ojos, en mi mente pasaban mil imágenes que solo podrían ser de mi imaginación, o, a lo mejor no.

-Hey Kat deberías ver esto - Dijo Camilo mostrándome una carta algo vieja y amarilla por el descoloramiento y la humedad - Esto te va a interesar y tal vez resuelvas muchas de tus dudas -Me sugirió el.

Lo mire, y mire la carta, la tome con miedo y empecé a ver cada detalle en ella . Estaba escrita con tinta negra y con unas extrañas letras que casi no podía leer además de que por el tiempo el papel se sentía débil. Pero... Mi mayor sorpresa me la lleve al leer lo que decía.

"Hola Hija Es Un Placer Volver A Escribirte A Pesar de Que Me Odies Por Decirte La Triste Y Dura Verdad, Pero No Podía Hacer Nada Mas, Decidí Contarte Para Que Protegieras A Katalina Ya Que Yo Ya No Podre Hacerlo, Ni Siquiera Se Si Voy A Estar En Este Mundo Dentro De Dos Días, Así Que Te Escribo Para Contarte Algo Mas Sobre Muestra Hermosa Naturaleza, Nena No Somos Los Monstruos Que Nos Pintan, Solo Somos Criaturas Que Han Vivido Mucho Antes De Que El Mismo Cielo Existiera. 
Nena Se Que Esto Es Duro Y Que Después De Mis Ultimas Tres Cartas No Quisiste Saber Mas De Mi Ni De Tu Madre, Pero Eso Es Casi Imposible, Aunque Bueno Dentro De Muy Poco No Será Así, Debes Aceptar Lo Que Eres, Un Hibrido, Mitad Bruja Mitad Vampiro, Solo Acéptalo, Y Deja De Comportarte Como Una Niña Pequeña Y Haz Lo Que Te He Dicho.
Se Que No Es Fácil Pero Debes Afrontarlo, Hacer El Ritual Y Apagar La Maldición, Como Lo Hemos Venido Haciendo Tu Madre Y Yo, Pero Ahora Que No Podremos Deberás Hacerlo Tu Y Nadie Mas. Tal Vez Estés Asustada, Pero Tu Madre También Lo Estaba La Primera Vez Que Lo Hizo, Debes Hacerlo Si Quieres Que A Katalina No Le Suceda Nada. Recuerda Que Te Amamos Y Por Favor Haslo Lo Que Te Pido, Antes De Que Sea Muy Tarde..."

No sabia a quien iba dirigida pero suponía que era de mi abuelo, inmediatamente me levante y empecé a caminar por todo el sótano mientras los chicos me miraban atónitos, excepto por Camilo que estaba relajado y tranquilo recostado en el marco de la puerta. Lo cual me pareció algo extraño pero no le preste mucha atención, Camilo me paso el sobre de aquella carta y vi que habían tres cartas mas, así que las tome y las comencé a leer, tenían la misma tinta y la misma letra, entre mas leía mas me asombraba era como si me estuvieran contando un cuento, no podía creerlo, hasta que ví el nombre de mi tía en una de esas cartas, no se podía leer muy bien ya que la mitad de la carta estaba desteñida pero por partes, se le habían borrado todas la palabras de la parte de arriba y unas del final pero, lo que decía era espeluznante.

"...Misao Debes Tener Cuidado, Ellos Van Por Tu Hija Y Por Kata Debes Protegerlas, Sobre Todo A Kata, A Pesar De Que Es Solo Una Bebe Tiene Las Mismas Habilidades Tuyas Y Las De Su Padre... Así Que Cuídala Con Tu Propia Vida Si Es Necesario, Cuídalas, De Lo Contrario Las Mataran Y Eso Seria Malo Para La Mal... Misao Protégelas Sobre Todo A La Pequeña Kata..."

Eso fue horrible, cuando lo leí me paralice totalmente, pues no sabia que decir, la carta estaba incompleta, dejaba muchas dudas, pero lo que si sabía, era que yo estaba en peligro, o, al menos me hizo pensar que lo estaba. Esto debía...

-¡¡Katalina!! - el grito hizo que me estremeciera - Ven aquí por el amor a Dios- Siguió gritando York desde la casa. Cuando Me di cuenta, ya estaba corriendo a la casa con los chicos detrás de mi. Al oír mi nombre sabia que algo no estaba bien, York jamás me llamaría por mi nombre, siempre me decía Kat o Kata pero jamás Katalina, algo no iba bien y sabia que cuando me dijera no me iba a gustar para nada-

-¿Que pasó York? ¿Por que ese grito? - cuando lo dije sentí que me caía pues la mirada de York me lo decía todo, algo le había pasado a mi tía. - ¿Que le pasa a mi tía York? - le pregunte de nuevo preocupada-