Desperté en mi cama, y con un leve dolor de cabeza, me levante y Salí del cuarto, baje a la sala y me encontré con Camilo Maicol y Jonathan sentados en la sala, y parecían algo preocupados, pero no estaban solos estaban con York y con Raúl.
-buenas tardes ¿Qué pasa? –pregunte algo confundida, cuando me vieron todos bajaron la mirada excepto York, que me miraba muy fijamente-
-tengo algo que contarle señorita Katalina –dijo muy seriamente-
-¿Qué paso? –Dije sin emoción, sabia que tenia algo que ver con mi tía-
-su tía se quedara mas tiempo de lo que pensábamos en el hospital, su estado es algo critico, pero los médicos dicen que estará bien. Y creo que es tiempo de que usted decida que va a hacer de ahora en adelante, sobre todo por que su tía no va estar en un largo tiempo –dijo señalándome-
-¿a que te refieres con tomar decisiones mientras ella no esta? Tú eres el segundo al mando no yo, ni siquiera tengo edad para eso –dije alzando un poco la voz-
-no me refería a la casa señorita, me refiero a usted, por favor tome asiento y escúcheme –le obedecí y me senté al lado de los chicos, que seguían sin mirarme- me refería a estar con los chicos, a conseguir amigos y amigas, un novio, vivir su vida, salir los fines de semana, hacer fiestas, desobedecer una que otra vez, ser una chica de 15 años que vive una vida común y corriente –sentencio York seriamente-
-yo tengo una vida normal York, y lo de desobedecer creo que no me suena, eso da castigo y solo lo han hecho una vez en mi vida, y si quiero salir con los chicos, sobretodo ir a estudiar con ellos, ya no quiero mas tutores, es estúpido, y ¿para que un novio? Tengo a mis amigos y eso es mas que suficiente –dije mirando a Raúl que hacia gestos extraños detrás de york-
-esta bien entonces desde mañana empiezas, yo me encargare de todo el papeleo, y ahora me iré con tu tía, mañana llegara una nueva ama de llaves, y los del servicio, aunque no serán los mismos, Raúl se quedara esta noche con ustedes por si acaso, chicos en la entrada hay una maleta con sus cosas, las del instituto y lo que les haga falta, mañana vendré en la tarde para hablar con ustedes y sus padre, eso es todo, que tengan una linda noche –cuando termino salió dejándonos a todos en la sala sin decir absolutamente nada-
-bueno y ahora que tienen ¿Por qué no hablan? –Dijo Raúl con una sonrisa-
-no se que decir –dijo Camilo aun sin mirarme, eso me enojo bastante-
-que les pasa a ustedes tres, desde que me levante me han estado ignorando, no han volteado a verme ni un segundo, y tú me debes muchas explicaciones Raúl –dije mientras lo señalaba-
-le contamos todo a Raúl y él nos dijo algo que nos sorprendió y nos dejo sin palabras –dijo Camilo, evitando que Raúl hablara-
-¿así? Y ¿que fue lo que les dijo para que quedaran así? –dije bruscamente y cruzándome de brazos-
-que morirías... -no pude seguir escuchando por que solo escuchando esas dos palabras mi mundo se vino abajo, no podía creer que eso fuera verdad, como que yo iba a morir, entonces para que se molestarían en intentar que yo viviera una vida "normal" si iba a morir, eso era lo mas estúpido que podían hacer...- kat estas bien
-ah ¿Qué? –dije mirándolos a todos, estaba sentada en el piso con las piernas dobladas hacia atrás, todos me miraban confundidos-
-que si estas bien, y escuchaste lo que te dije ¿verdad? –dijo Jonathan seriamente-
-no, que decías –dije mientras me levantaba-
-kata ven conmigo, creo que necesitas un poco de aire fresco, hablaremos mientras caminamos, ¿quieres? –Solo asentí suavemente con la cabeza-
Salí con Raúl a caminar como había dicho pero en el transcurso de los primeros 20 minutos ninguno de los dos dijo nada salo admirábamos la luna y algunos animales que habían por ahí, hasta que él rompió aquel silencio, deteniéndose en seco, a lo que yo pare y lo mire.
-se que tal vez tienes muchas dudas, muchas preguntar, pero ahora nada de eso te lo voy a responder, no puedo quitarte las dudas, y no puedo decirte nada mas de lo necesario y solo tienes tres preguntas que yo responderé con toda sinceridad –cuando lo dijo me vinieron miles de preguntar, pero pare cuando pensé que seria mejor dejarlas para otro día-
-bueno, creo que podemos guardarlas para después, excepto una ¿Quién es lobo que había en el cuarto de mi tía? Cuando me vio pareció reconocerme, pero en cuanto Camilo se acerco a mi se enojo y salto por la ventana –dije mirándolo seriamente-
-bueno él te conoce desde que naciste e incluso antes de que tu madre tuviera mas de 5 meses de embarazo, a estado contigo desde pequeña, y es algo sobre protector sobre todo con los chicos que se te acercan –dijo quitándole importancia-
-pero sigues sin responder a mi pregunta –dije cruzándome de brazos-
-bueno, es un viejo amigo de la familia, pero por ahora no sabrás quien es exactamente –dijo imitando mi gesto-
-esta bien me conformo con eso –quise preguntar si lo volvería a ver pero ya serian dos preguntas y no quería perderlas, preguntando bobada-