Una increíble celebración se había efectuado en aquél mediano departamento perteneciente al Rockstar de profundos ojos azules y cabellera rubia, misma que al parecer se desarrolló para festejar que solo faltaban dos días para que la tan ansiada colaboración musical se llevará a cabo en la gran ciudad de Tokyo, maravilloso hecho que no hacía más que emocionar de una gigantesca manera a los dos representantes más importantes de la gran industria artística en general.
Emoción que a su vez los llevó a festejar con un notable número de bebidas alcohólicas, las cuáles fueron consumidas sin moderación por los demás presentes, siendo Naruto y Ai los dos individuos que más habían quedado verdaderamente embriagados después de haber ingerido alcohol como si no hubiera un mañana, hecho que fue muy mal visto por la fémina llamada Miyako Saitou, la cuál se había encargado de reprender a ambos jóvenes dedicados a la industria musical.
Cantantes que a pesar de no querer frenar su festejo, ambos habían tenido que hacerle caso a la pelirubia para no hacerla enojar más de lo que ya se encontraba, misma fémina de bellos ojos color vinotinto que durante casi toda la celebración se mantuvo vigilando a los dos chicos más populares del país Nippon.
Chicos que en todo momento, se mantuvieron conversando de una forma sumamente alegre entre sí mientras observaban divertidamente y de reojo a la linda mujer de elegante apellido Saitou, la cuál se había logrado convertir en toda una espléndida figura maternal para ellos sin pedir absolutamente nada a cambio.
Trabajo que a su vez era agradecido de una forma sumamente enorme por los dos jóvenes artistas de Tokyo nombrados como Naruto Uzumaki y Ai Hoshino.
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Tokyo - Japón.
12:00 de la noche.
En el tiempo actual y después de unas cuantas horas transcurridas desde el inicio de la celebración entre los miembros de Konoha Productions e Ichigo Productions, un ambiente sumamente tranquilo se había apoderado completamente del mediano departamento de aquél chico de curiosas marcas zorrunas en las mejillas, tratándose de un ambiente que no dejaba de encantarle a la mujer Miyako Saitou, la cuál era la que menos se veía envuelta por el espeso sabor del alcohol de las bebidas.
Mujer de cabello rubio cenizo que en ese preciso momento era la única adulta que aún permanecía en el hogar del Rockstar de intensos ojos azules como el océano, siendo esto debido a que tanto Kakashi como Ichigo habían decidido marcharse del departamento para poder seguir con su celebración en un lugar más privado, de esta simple manera dejando detrás a la fémina de orbes color vinotinto y a los dos cantantes juveniles más populares de aquél majestuoso país lleno de montañas.
Jóvenes que en ese instante se podían visualizar sentados cómodamente juntos en lo que parecía ser un mediano sillón, mismos individuos de apellidos Uzumaki e Hoshino que además continuaban conversando alegremente entre sí, aunque al mismo tiempo un notable embriagamiento seguía siendo demasiado notorio en los dos cantantes juveniles.
Tratándose de un hecho que a su vez continuaba molestando ligeramente a la bellísima fémina de largo cabello rubio cenizo perteneciente a Ichigo Productions.
Miyako: Cuánto más piensan estar sentados ahí, deberían de estar durmiendo ahora mismo par de torpes.
Comentó con un ligero enojo en sus palabras al estar enfocando sus orbes en dirección a los dos cantantes juveniles, los cuáles no habían hecho otra cosa más que iniciar a reír divertidamente a causa del alcohol que aún tenían en la sangre, acción que simplemente ocasionó que la pelirubia ceniza adoptará un semblante sumamente serio en su angelical mirada.
Naruto: Oye...no...no seas tan aguafiestas.
Dijo de una manera entrecortada debido al fuerte consumo de alcohol mientras procedía a demostrar una notable sonrisa zorruna en su embriagada expresión, siendo esa simple facción facial totalmente imitada a los pocos segundos transcurridos por aquélla hermosa fémina de bellísimos ojos con forma de estrellas.
Semblante perteneciente a los dos cantantes que rápidamente provocó que una vena palpitante apareciera en la sien de aquélla mujer llamada Miyako Saitou.
Ai: Porque...no nos dejas...divertirnos.
Preguntó con molestia en su voz a causa de la negativa que tanto ella como Naruto habían recibido durante casi todo el festejo por parte de su madre adoptiva, misma fémina de ojos color vinotinto que a continuación sólo procedió a cruzarse completamente de brazos debido al reproche de aquélla famosa Idol de Tokyo.
Miyako: En solo dos días, ambos protagonizarán uno de los eventos musicales más grandes del país, así que no puedo arriesgarme a que tu y Naruto hagan una tontería antes del concierto.
Contestó con demasiada seriedad al continuar observando de una forma detenida a los dos embriagados chicos, los cuáles aún permanecían sentados cómodamente sobre el amplio sillón que se ubicaba dentro del gran departamento, jóvenes que además se podían visualizar restándole importancia a lo dicho por la mujer perteneciente a Ichigo Productions.
Naruto: Ahí se...nota la falta...de confianza.
Habló antes de soltar un ligero bostezo, para después únicamente dirigir su mirada en dirección a una de las medianas ventanas pertenecientes a su vivienda, de esta forma el pelirubio contemplando el cielo totalmente oscurecido y repleto de estrellas qué en ese momento se filtraba a través de aquéllas mismas ventanas.
Tratándose de un paisaje que en muchas ocasiones no hacía más que llenar de una gran cantidad de tranquilidad la mente del cantante de estruendosa música Rock, tranquilidad que normalmente aquél joven llamado Naruto Uzumaki no podía disfrutar como era debido a causa del arduo trabajo que poseía todos los días.
Miyako: Tienen que entender, hay demasiado dinero invertido en ustedes dos, si algo les llegara a pasar, absolutamente todo se perdería para Konoha Productions e Ichigo Productions.
Decía seriamente mientras continuaba cruzada absolutamente de brazos y con un semblante autoritario en su expresión, elegante mujer que a continuación pudo contemplar como el gran departamento procedía a sumergirse en un total silencio, fémina que debido a ese hecho, había dirigido su mirada rumbo a la ventana que aquél pelirubio aún seguía contemplando.
De esta forma la individuo de apellido Saitou tratando de evadir un poco la inmensa incomodidad que en ese instante inundaba completamente las instalaciones.
Ai: Nos tratan...como si fuéramos...unos simples objetos...comerciales.
Se quejó con un tono de tristeza antes de comenzar a incorporarse lentamente de aquél cómodo sillón en el cuál había permanecido sentada junto al Rockstar, para una vez de pié, iniciar a movilizarse con un poco de dificultad rumbo a la mediana mesa circular que se ubicaba en esa misma zona del gran departamento.
Miyako: ¿Qué es lo que vas a hacer ahora?.
Exclamó al darse cuenta de cómo su hija adoptiva se encontraba movilizándose hacía a un respectivo lugar en concretó, lugar en el cuál se podía visualizar actualmente una pequeña cantidad de botellas de vidrio repletas de total vino, siendo una escena que no hizo más que llenar de una gigantesca preocupación a la bella mujer de largo cabello rubio cenizo.
Ai: Sólamente...tomaré un trago.
Mencionó con un notable semblante divertido en su angelical mirada una vez que había logrado posicionarse justo enfrente de la mediana mesa circular, misma fémina de bellos ojos morados con singular forma de estrellas qué después sólamente procedió a tomar entre sus manos una de las botellas llenas de vino.
Acción que al parecer no hizo más que alarmar a más no poder a la mujer perteneciente a la mediana empresa productora llamada Ichigo Productions.
Miyako: No te dejaré tomar más alcohol.
Pronunció enojadamente al decidir acercarse a toda prisa en dirección a donde se ubicaba de pié la Idol ojimorada, cantante pelimorada que en ese instante se encontraba tratando de abrir la botella que todavía mantenía en su posesión, misma que a los pocos segundos no pudo hacer nada para evitar que la pelirubia le quitara la bebida alcohólica de las manos.
Idol que al parecer únicamente fue capaz de demostrar una mueca de disgusto en su hermosa expresión a causa de la acción tomada por parte de su madre adoptiva, la cuál en ese preciso momento se podía distinguir negando con su cabeza como única forma de decepción a lo que estaba a punto de hacer la gran cantante juvenil.
Miyako: Aunque no quieras, tendrás que obedecer mis órdenes niña.
Ordenó con un semblante ligeramente autoritario al estar apreciando como la fémina de largo cabello morado se podía visualizar observándola con molestia, Idol portadora de unos ojos con forma de estrellas que actualmente se distinguía apretando sus respectivos puños debido al gran enojo que invadía todo su corazón.
Ai: Tú...tú no eres...mi madre verdadera...así que porqué no te...marchas y me dejas...en paz por unos...momentos.
Pidió de una manera seca al estar enfocando sus ojos morados contra los orbes vinotinto de su madre adoptiva, misma que a su vez no pudo evitar quedar totalmente estática a causa de lo que acababa de escuchar sólo segundos atrás, incluso siendo unas palabras que además provocaron qué Naruto Uzumaki dirigiera su mirada rumbo a las dos bellas mujeres.
Un pesado silencio se había apoderado nuevamente de las instalaciones del departamento mientras ambas féminas seguían observándose de una forma fija, silencio que en ese preciso momento se encontraba incomodando ligeramente al chico portador de unos inigualables ojos azules y de una alborotada cabellera rubia, el cuál simplemente procedió a dirigir su mirada en dirección al suelo del escenario, de esta forma tratando de eludir un poco la gigantesca incomodidad de la escena.
Incomodidad que concluyó totalmente cuándo la mujer llamada Miyako Saitou decidió posar una de sus manos sobre una de las mejillas de aquélla flamante Idol, cantante juvenil perteneciente a Ichigo Productions que sólamente fue capaz de demostrar un semblante neutre mientras sentía la caricia de parte de la pelirubia.
Miyako: Lamento querer ser lo que no soy, pero yo solo quería cuidarte un poco más...has lo que tu quieras Ai Hoshino.
Comentó suavemente antes de apartar su mano de la cálida mejilla de aquélla Idol de maravillosos orbes con forma de estrellas, fémina de dieciséis años de edad que a su vez pudo distinguir una notable tristeza en los ojos de su bella madre adoptiva, madre adoptiva que solo se mantenía observando fijamente a la chica más popular de la zona urbana llamada Tokyo.
Ojimorada que además pudo presenciar cómo la mujer de ojos vinotinto decidía darse la media vuelta, de esta manera dándole la total espalda a su hija adoptiva, Idol de apellido Hoshino que después observó sin hacer nada como la pelirubia comenzaba a caminar lentamente rumbo a la única entrada del gran departamento, acción que al mismo tiempo ocasionó que el corazón de la gran cantante juvenil llamada Ai comenzará a estrujarse de una manera sumamente dolorosa y apresurada.
Siendo al parecer sólamente cuestión de minutos para que aquélla misma fémina procediera a salir de una forma lenta del hogar del joven llamado Naruto Uzumaki, tratándose de un acontecimiento que fue apreciado en un absoluto silencio por la bellísima chica de larga cabellera color morado de vestimenta normal y casual.
Artista juvenil que aún seguía sin realizar ningún solo movimiento físico mientras observaba la puerta por la cuál salió la segunda al mando de Ichigo Productions.
Naruto: No...no crees que fuiste un poco...dura con ella?.
Preguntó al estar contemplando desde el sillón como su flamante compañera de profesión seguía simplemente de pié, la cuál únicamente había decidido soltar un pequeño suspiro a causa de todo lo sucedido solo algunos momentos atrás, además de que una pequeña pizca de arrepentimiento fue inundando poco a poco su corazón lleno de emociones.
Ai: Si...creó...creó que si lo fui.
Respondió justo al comenzar a movilizarse lentamente en dirección al sillón donde todavía se podía visualizar sentado aquél chico de curiosas marcas en las mejillas, mismo individuo de alborotado cabello rubio que sólamente la contemplaba acercarse con una expresión neutre adornando su muy embriagada mirada.
Popular Rockstar que después solo procedió a cerrar sus ojos azules como el océano a causa del sueño que ligeramente iba apoderándose de todo su cuerpo.
Ai: No me digas...que ya te dormirás.
Dijo al momento de sentarse lentamente justo a un costado de aquél famoso cantante de música Rock que aún seguía con sus profundos orbes azules cerrados, el cuál a su vez sólamente había procedido a abrirlos de nueva cuenta, mismos ojos que decidiría enfocar directamente contra su inigualable compañera de profesión.
Chica de vestimenta casual que durante el siguiente lapso de tiempo se dedicó a mantenerle la mirada fija al Rockstar más popular e influyente del gran país Nippon, hombre de diecisiete años de edad que a causa de este hecho, únicamente fue capaz de regalarle una muy leve sonrisa a la mujer más hermosa del mundo para él.
Naruto: En ocasiones pienso...qué tal vez hacemos mal al comportarnos...terrible.
Decía con una pequeña pizca de preocupación al continuar enfocando sus ojos azules sobre aquéllos orbes morados, aunque con estas palabras logrando que un semblante de asombro se reflejará por completo en la mirada de la pelimorada, cantante juvenil perteneciente a Ichigo Productions que sólamente se dedicó a pensar en aquél mismo comentario.
Ai: Pero, no es algo...qué hacemos habitualmente todos...los días Naruto.
Habló antes de colocar de una forma sumamente suave una de sus manos sobre una de las manos del chico más importante en la música en la actualidad, pelirubio de curiosas marcas zorrunas en las mejillas que simplemente se dedicó a sentir la calidez que le proporcionaba el contacto de aquélla dulce cantante juvenil.
Naruto: Aún así...pienso que...deberías de pedirle...una disculpa a tu mamá.
Exclamó al momento de decidir dirigir su expresión en dirección al foco de luz blanca que en ese instante orbitaba sobre toda esa precisa zona del departamento, intensa luz que no hacía más que iluminar completamente el rostro de aquél chico dedicado a la exigente industria musical del majestuoso país nombrado Japón.
Ai: Lo sé...es solo que...a veces no soporto que quiera controlar...tanto mis acciones.
Pronunció cansadamente al proceder a acomodarse algunos cuántos mechones de su maravilloso cabello color morado, misma fémina que al parecer todavía seguía pensando en la mirada triste de su madre adoptiva llamada Miyako Saitou, siendo una dolorosa facción facial que además continuaba estrujando de una manera sumamente fuerte su corazón.
Naruto: Yo...yo quisiera que mi mamá estuviera...aquí diciéndome qué hacer.
Susurró con un poco de dolor emocional en sus palabras al bajar ligeramente su mirada mientras un semblante pensativo se visualizaba adornando su expresión, tratándose de unas palabras que a su vez lograron dejar absolutamente callada a la estrella más grande y popular de la empresa productora Ichigo Productions.
Pelimorada que sólamente desvió un poco su respectiva mirada, ya que mientras ella estaba quejándose de su madre adoptiva, la cuál solía ser demasiado atenta con ella, el Rockstar pelirubio le daba entender que daría absolutamente lo que fuera por volver a ver a su madre, madre que no veía desde que tenía solo cuatro años de edad.
Ai: Lo...lo siento, no debí...quejarme tanto.
Se disculpó al seguir con su bella mirada desviada de aquél flamante chico de profundos orbes azules cómo el océano, mismo que en ese preciso momento continuaba dedicándole todos sus pensamientos a su amada madre fallecida, siendo un hecho que normalmente hacía durante las noches, ya que era cuando una inmensa tranquilidad se apoderaba de él.
Naruto: Sabes...mi madre tenía los ojos color violeta, así que...en ocasiones, los tuyos me la recuerdan...ligeramente.
Reveló nostálgicamente mientras una pequeña y cálida sonrisa se encontraba en ese preciso instante reflejada en su rostro, revelación que además hizo que la pelimorada decidiera dejar de desviar su bella mirada repleta de arrepentimiento, misma mirada que a continuación procedió a enfocar en dirección al chico que la hacía sentir nuevas emociones.
Ai: Ella...era muy hermosa?.
Mencionó curiosamente al estar pensando en las palabras antes mencionadas por el cantante de estruendosa música Rock más popular del majestuoso país Nippon, hombre de curiosas marcas en las mejillas que a su vez se dedicó a apreciar por unos cuántos momentos en silencio a la mujer de lindos ojos con forma de estrellas.
Fémina que a los pocos segundos y que para la enorme sorpresa del joven de apellido Uzumaki, había decidido sentarse suavemente sobre las piernas del ojiazul, hecho por parte de la bellísima Idol que al parecer provocó que las mejillas del famoso Rockstar de cabello rubio se tornarán levemente de un color rojizo.
Color rojizo que poco a poco fue desapareciendo del semblante del chico que actualmente era la estrella más influyente del exigente mundo artístico.
Naruto: Si...era demasiado hermosa...era una mujer espléndida...al igual que tú...Ai.
Comentó cálidamente al estar sintiendo el peso de su maravillosa compañera de cabello morado sobre sus dos piernas, mismo individuo de ojos azules que después solo decidió rodear con sus brazos la cintura de la fémina pelimorada, para a continuación apegarla suavemente contra su cuerpo, siendo una acción que no le desagradaba para nada a la bella Idol.
Apacible momento que sólamente estos dos artistas se encontraban disfrutando entre las diversas paredes de ese mediano y reconfortante departamento de Tokyo.
Ai: Dime Naruto...yo en verdad te...gusto?.
Habló con un poco de duda mientras podía sentir cómo el joven de sólamente diecisiete años de edad seguía rodeándola con sus brazos de la zona de su cintura, flamante cantante juvenil perteneciente a Konoha Productions que únicamente acercó un poco más su mirada a la de su maravillosa compañera de profesión.
Naruto: No me gustas...me encantas.
Decía con demasiada seguridad en su tono de voz al estar observando fijamente a los ojos a la mujer de cabello morado, mujer que a causa de ese comentario, sólamente había procedido a ocultar su rostro en el cuello del flamante Rockstar, acción que la Idol realizó debido a las millones de sensaciones que ella todavía no entendía completamente del todo.
Ai: 🎶 Sabes bien...se me dificulta hacerte saber, se me dificulta ver...quiero estar a tu lado, sabes que te amo y no lo aguanto...no lo aguanto 🎶.
Tarareo bajamente al seguir con su mirada oculta en el cuello del chico portador de unos inigualables ojos azules cómo el mar, mismo individuo que a su vez no pudo evitar quedar sumamente en Shock a causa del tarareo de parte de su amiga, ya que de la letra de ese respectivo cantó, la palabra te amo era la que más se había introducido en la mente del gran pelirubio.
Pelirubio que además se distinguía sintiendo como su corazón palpitaba a mil por segundo mientras no dejaba de pensar constantemente en aquélla palabra.
Aunque a su vez el ojiazul no sabiendo en lo más mínimo si la joven de intenso cabello morado le estaba dedicando aquélla frase porque realmente lo sentía, o simplemente la fémina de maravillosos ojos morados con singular forma de estrellas lo estaba diciendo porque era la letra de una de sus respectivas canciones.
Naruto: Poco a poco...te estás convirtiendo...en mí mundo Ai Hoshino.
Dijo con cariño al seguir abrazando de la zona de su cintura a la Idol más popular de la gigantesca zona urbana llamada Tokyo, mismos jóvenes dedicados a la industria de la música que todavía continuaban posados sobre el sillón del departamento, siendo más respectivamente la ojimorada la que aún se contemplaba sentada sobre las piernas del cantante de música Rock.
Ai: Siempre...me hace sentir bien...torpe.
Exclamó con suavidad al momento de alzar ligeramente su mirada, de esta forma volviéndose a topar con aquéllos bellos orbes azules que tanto le fascinaban, profundos ojos como el inmenso océano que a su vez no dejaban de observarla con demasiada calidez, la cuál poco a poco iba apoderándose del cuerpo de la pelimorada.
Naruto: Y te haré sentir...mucho mejor.
Susurró justo antes de comenzar a depositar pequeños besos de una manera suave sobre el cuello de la flamante Idol, cantante juvenil de dieciséis años que solo había logrado sentir como una corriente eléctrica recorría todo su angelical cuerpo, ojimorada que además no pudo evitar soltar algunos ligeros suspiros de placer a causa de los besos del joven pelirubio.
Naruto: Tú...tú piel...es tan dulce.
Mencionó al instante de seguir besando constantemente el cuello de Ai Hoshino, acción que el ojiazul realizaba con cariño y de una forma sumamente lenta y apacible, tratándose de un placentero hecho que al parecer se encontraba siendo disfrutado demasiado por aquélla gran cantante juvenil perteneciente a Ichigo Productions.
Ai: Eres...eres tan...tierno.
Pronunció dulcemente mientras apreciaba como su compañero de intenso cabello rubio enfocaba su mirada hacia ella, aquélla misma radiante mirada que todos los días le introducía una gigantesca cantidad de seguridad y determinación, siendo algo que la había ayudado mucho a mejorar sus terribles carencias respecto a la hora de demostrar sus sentimientos.
Ai: Gracias...por enseñarme tanto.
Agradeció con mucha sinceridad al decidir posar sus labios sobre los del chico de curiosas marcas zorrunas en las mejillas, el cuál no dudo ni un solo segundo en corresponder aquél dulce beso repleto de una enorme cantidad de emociones, beso que a su vez estaba resaltando a más no poder lo que ambos cantantes juveniles verdaderamente sentían el uno por el otro.
Beso que en ese preciso momento se podía visualizar siendo presenciado únicamente por la luz de la brillante luna que se filtraba a través de las ventanas, tratándose además del único testigo de lo que sucedería un poco más adelante entre los dos individuos más populares de la música Japonesa de los últimos tiempos.
Naruto: Te deseo...mucho Ai.
Comentó antes de intensificar más y más el dulce beso, el cuál fue volviéndose más apasionado con el paso de los minutos, al mismo tiempo que el Rockstar de intensos ojos azules apegaba más el hermoso cuerpo de su compañera contra el suyo, misma Idol que simplemente se encontraba disfrutando del contactó con aquél chico de marcas en las mejillas.
Ai: Yo también...no sabes cuanto te deseo.
Decía de una forma entrecortada a causa del profundo beso que aún se distinguía compartiendo placenteramente con el chico más popular del gran país Nippon, acontecimiento que al parecer estaba provocando que la temperatura de ambos jóvenes fuera aumentando poco a poco a causa de la excitación que padecían.
Excitación que no hacía más que incrementarse segundo a segundo junto con la respiración de los dos artistas pertenecientes a diferentes empresas.
Ai: Quiero...quiero estar...contigo Naruto.
Dijo con una notable seguridad en su angelical mirada una vez que había decidido separarse poco a poco del beso, seguridad que a su vez logró seprender de una forma gigantesca al famoso joven chico de solo diecisiete años de edad, misma sorpresa que a los pocos segundos se incrementaria todavía mucho más para el cantante de estruendosa música Rock.
Ya que frente a sus ojos y de una manera sumamente lenta, la bella e inigualable ojimorada había comenzado a despojarse de la parte superior de su vestimenta, acontecimiento que además fue observado con demasiado detalle por aquél individuo portador de una brillante cabellera rubia como el ser llamado sol.
Siendo actualmente un simple sujetador de lindo color negro lo que la famosa Idol nombrada Ai Hoshino se encontraba portando ante el Rockstar de ojos azules.
Naruto: Tienes...tienes una gran belleza.
Habló de una manera sumamente seductora al iniciar a depositar pequeños besos sobre la bellísima piel blanca de aquélla cantante de solo dieciséis años, misma que únicamente se estaba dedicando a soltar pequeños y dulces gemidos llenos de placer a causa de lo que estaba recibiendo en ese preciso instante.
Hermosa joven que después de unos minutos en total extasis, pudo sentir como su acompañante posaba sus manos en el broche de su lindo sujetador negro, acción que sólamente ocasionó que la flamante pelimorada le dedicará una sonrisa traviesa al chico portador de unos profundos e inigualables orbes azules, cantante de estruendosa música Rock que a su vez tomó aquélla facción facial como el ansiado permiso para poder proseguir con lo que estaba a punto de realizar.
Así que sin perder más tiempo, el joven Rockstar llamado Naruto Uzumaki fue desabrochando poco a poco el sujetador de la Idol más popular de todo Tokyo, de esta simple forma dejando al completo descubierto el hermoso busto de la chica de ojos morados, misma que no pudo evitar sonrojarse a causa de este hecho.
Ai: Te...te gustan?.
Preguntó con una suma excitación al estar observando cómo su compañero de profesión se encontraba contemplando su busto completamente al descubierto, ojiazul que no podía creer lo realmente hermoso y perfecto que era el cuerpo de la famosa fémina que en ese preciso instante seguía sentada sobre sus piernas.
Misma pregunta que a continuación sería respondida cuando el pelirubio decidió posar sus labios sobre el lindo busto de aquélla mujer de profundos ojos morados, Idol que no pudo evitar soltar un fuerte gemido lleno de placer al estar sintiendo como el chico de marcas en las mejillas succionaba suavemente uno de sus senos.
Acontecimiento íntimo que verdaderamente estaba volviendo loca de placer a la joven más importante de la empresa productora Ichigo Productions, acontecimiento que se prolongó por unos cuántos y largos minutos mientras ambos cantantes juveniles seguían inundados completamente por la enorme excitación.
Naruto: Serás...serás totalmente...mía.
Exclamó al dejar de succionar el bello seno de la joven de largo cabello morado originaria de la enorme ciudad de Tokyo, individuo que a su vez estaba observando el inmenso placer reflejado en los ojos con forma de estrellas de su hermosa amiga, ojimorada que además podía sentir como la temperatura de su cuerpo seguía en aumento debido a las miles de emociones.
Ojimorada que después pudo visualizar como el Rockstar la tomaba de una manera suave entre sus cálidos brazos, siendo de esta cuidadosa forma como el pelirubio se encargó de recostarla sobre el mediano sillón del gran departamento, chico de ojos azules que no dudo en posarse cuidadosamente sobre la fémina más popular de la majestuosa zona urbana.
Ai: Solo...solo seremos tú y yo...esta noche.
Susurró justo antes de comenzar a besar de nueva cuenta los labios del chico que poco a poco se transformaba en la persona más importante en toda su vida, aunque este hecho al mismo tiempo que la ojimorada procedía a quitarle la parte superior de su vestimenta al Rockstar que pronto tendría una colaboración con ella.
Joven de ojos azules que simplemente continuaba disfrutando a más no poder del increíble momento que estaba compartiendo con la mujer pelimorada.
Naruto: No...no puedo...aguantar más.
Mencionó con un enorme deseo sexual al estarse dedicando a acariciar con una suma pasión el angelical cuerpo de la popular fémina nombrada Ai Hoshino, desde acariciar su cabello morado, hasta ir bajando poco a poco a la zona de su busto, provocando que la Idol soltará más y más gemidos llenos de un gran placer.
Ai: Yo tampoco...así que...hazlo de una vez.
Pronunció al estar sintiendo cómo su cuerpo se encontraba ardiendo a causa del gigantesco deseo sexual que poseía, tratándose de un deseo que no hacía más que seguir ocasionando que la pelimorada respirara de una manera agitada, siendo una respiración que en ese preciso momento se encontraba compartiendo con aquél chico de intenso cabello rubio.
Cantante juvenil de diecisiete años que al escuchar las palabras por parte de la Idol, no hizo otra cosa más que empezar a desabrochar lentamente su pantalón ante una ojimorada que apreciaba este hecho con un inmenso sonrojo en su mirada, bella fémina de cabello morado qué a su vez podía sentir como su corazón se encontraba palpitando a mil por hora.
Sonrojo que a los pocos segundos aumentaría mucho más para la Idol cuándo está misma mujer observará cierta parte del cuerpo del joven pelirubio, parte anatómica que en ese preciso momento se encontraba absolutamente erecto e hinchado, hecho que al parecer le estaba provocando un poco de dolor al ojiazul.
Naruto: Realmente...estás...segura?.
Habló con duda al estar observando fijamente a los ojos a la hermosa mujer que en ese instante se encontraba ubicada de una manera suave debajo de el, pelimorada perteneciente a Ichigo Productions que simplemente decidió regalarle una pequeña sonrisa al chico que se apreciaba posado justo encima de ella.
Sonrisa que al parecer fue todo lo que el Rockstar más famoso de Japón necesito para saber que aquélla fémina de verdad deseaba intimar sexualmente con el.
Naruto: Iniciemos...con esto.
Dijo con deseo al instante de comenzar a desabrochar de una manera lenta y tranquila el pantalón de su compañera, acción que en todo momento fue contemplada con una notable excitación por aquélla misma fémina ojimorada, la cuál solo fue capaz de sentir como su gran amigo la despojaba de toda su vestimenta inferior, absolutamente de toda.
De esta forma el Rockstar de ojos azules pudiendo apreciar la zona más preciada de la cantante juvenil de apellido Hoshino, Idol que en el tiempo actual se podía visualizar completamente desnuda ante el ojo seductor de parte de su acompañante, mismo que no podía evitar sonrojarse enormemente a causa de la inmensa belleza que demostraba su querida amiga.
Así que después de haberla contemplado durante un lapso de tiempo y mientras él todavía permanecía encima de ella, el individuo de apellido Uzumaki procedió a colocar su miembro totalmente erecto justo en la entrada vaginal de Ai Hoshino, la cuál solo observaba esta acción con una gigantesca excitación reflejada en su sonrojada mirada repleta de total lujuria.
Naruto: Seré...seré cuidadoso.
Decía con suavidad en sus palabras antes de decidir acariciar con demasiado cariño una de las sonrojadas mejillas de aquélla cantante juvenil de la ciudad de Tokyo, para después de unos cuantos segundos y de una forma cuidadosa, ir introduciendo su miembro erecto dentro de la Idol Ai Hoshino de una manera sumamente lenta.
Misma que sólamente pudo cerrar sus ojos morados debido al ligero dolor que conllevaba perder aquella sagrada barrera que la reconocía como una mujer pura.
Ai: A partir...de Ahora...me perteneces completamente...Naruto Uzumaki.
Comentó con un poco de dolor en su excitado tono de voz al lograr sentir como su flamante acompañante introducía por completo su miembro dentro de ella, hecho que a los pocos segundos transcurridos provocó que la fémina de largo cabello morado se abrazara fuertemente al cuerpo del gran Rockstar.
Esto al mismo tiempo que también la ojimorada clavaba levemente sus uñas sobre la espalda del joven poseedor de una increíble popularidad ante los medios.
Naruto: Lo...lo mismo...digo.
Exclamó mientras apreciaba detenidamente como la angelical mujer que se ubicaba debajo de él se acostumbraba a tenerlo dentro de ella, la cuál todavía se podía visualizar absolutamente abrazada al cuerpo del chico que dentro de poco tiempo tendría una gran colaboración musical con ella.
Fémina que después de unos minutos, solo afirmo con un ligero movimiento de cabeza para que el Rockstar más popular de todo Japón continuará con su trabajo, de esta manera el pelirubio comenzando con unas muy pequeñas y leves estocadas, las cuáles eran un inmenso mar de nuevas sensaciones para los dos jóvenes amantes.