La sonrisa que engañó a todos los medios, menos a él, mi secreto ocultaré, será un gran misterio, todo este terreno lo mantiene en cautiverio, mintiendo eres perfecta, es en serio, eres una Idol genial.
Zona rural - Japón.
6:00 de la tarde.
Él sol, había comenzado a ponerse poco a poco sobre las montañas de mediano tamaño que se ubicaban en esa respectiva zona invadida por un exuberante bosque, acontecimiento que simplemente parecía estar provocando que una ligera sombra de color negro se estuviera apoderando por completo del bellísimo escenario, de esta forma aquél mismo escenario empezando a transformarse lentamente en un mágico lugar que en solo un par de horas quedaría lleno de miles de estrellas.
Estrellado escenario que durante los próximos meses, dejaría completamente maravillada a la linda chica de dieciséis años perteneciente a Ichigo Productions, bella Idol que además se encargaría de contemplar y de disfrutar de ese mismo paisaje en total compañía del chico de cabello rubio llamado Naruto Uzumaki, individuo de curiosas marcas zorrunas en las mejillas que a su vez permanecería de una forma sumamente fiel al lado de la mujer que más amaba en todo el mundo.
Mismo mundo que al parecer todavía le guardaba muchas sorpresas a los dos jóvenes dedicados a la industria musical, siendo una de esas respectivas sorpresas, la que ambos cantantes recibirían en poco tiempo y de una manera inesperada, sorpresa que no haría más que unir aún más las vidas de ambos chicos originarios de la capital del majestuoso país Nippon.
Inmenso país nombrado Japón que próximamente precenciaria la llegada de dos pequeños seres portadores de un gigantesco e inigualable talento artístico.
Gorō: Qué mi simple apariencia no los engañe, todavía soy joven, pero les aseguro que poseo una gran experiencia.
Comentó con una notable seguridad en sus palabras al estar notando las miradas llenas de dudas que portaban los tres chicos presentes en la amplia habitación, los cuáles no pudieron evitar demostrar un semblante repleto de pena debido al hecho de haber sido descubiertos por el hombre de cabellera negra azabache.
Acción de parte de Naruto, Ai y Sasuke que simplemente ocasionaría que tanto Ichigo como Miyako Saitou sonrieran de una manera completamente divertida.
Gorō: Les prometo que me encargaré totalmente de que el embarazo de Ai Hoshino resulte lo mejor posible.
Dijo aún con aquél tono de seguridad en su voz mientras observaba fijamente a cada uno de los flamantes individuos, mismos que sólamente se estaban dedicando a escuchar con mucha atención al pelinegro de intensos ojos amarillentos, aunque en especial, los dos populares jóvenes que no hace mucho tiempo atrás se habían vuelto uno en cuerpo y alma.
Gorō: A simple vista, puedo deducir que el cuerpo de Ai está totalmente saludable y sano, tal vez esa fue la razón por la cuál ella quedó embarazada a la primera.
Habló con una suma tranquilidad en su mirada al estar enfocando sus ojos exclusivamente sobre la Idol más famosa en todo el país repleto de montañas, chica de largo cabello morado que además no pudo evitar que sus blancas mejillas se tornarán de un lindo color rojizo a causa del comentario de parte del ojiamarillo.
Pelimorada que actualmente seguía sentada sobre una de las dos cómodas camas ubicadas dentro de la amplia habitación perteneciente al gran hospital, misma mediana cama la cual continuaba compartiendo con aquél flamante cantante de estruendosa música Rock conocido en Japón como Naruto Uzumaki.
Rockstar pelirubio que todavía se apreciaba sentado justo a un costado de la encantadora mujer que llevaba dentro de su lindo vientre a su primer hijo.
Gorō: Aunque dejando eso de lado por un momento, quisiera hacerles una pregunta.
Decía con una ligera seriedad al instante de iniciar a contemplar tanto a la hermosa mujer de cabello morado como aquél popular chico de brillante cabellera rubia, cantantes juveniles que al parecer habían quedado un tanto extrañados a causa del repentino cambio de actitud de parte del individuo de solo treinta años de edad.
Aunque también, el hombre de apellido Amamiya logrando extrañar ligeramente a los dos presidentes de la empresa Ichigo Productions y al guardaespaldas ojinegro.
Gorō: Realmente están seguros de esto?.
Preguntó seriamente mientras apreciaba de una forma un tanto interrogatoria a los dos jóvenes dedicados al mundo musical, para después, solo comenzar a movilizarse lentamente en dirección a una de las sillas que se ubicaban dentro de la habitación, recorrido que a su vez sería observado en un total silencio por todos los presentes en ese respectivo lugar del gran hospital.
Flamantes personas que a los pocos segundos pudieron distinguir como aquél mismo hombre procedía a sentarse sobre una de las sillas antes mencionadas, médico especializado en ginecología que una vez sentado, simplemente decidiría cruzarse de brazos ante las miradas llenas de sumo extrañes por parte de los demás.
Gorō: Ambos son todavía muy jóvenes, y cuidar de un bebé no es cosa sencilla.
Exclamó justo antes de proceder a acomodarse de una mejor manera sus elegantes lentes de montura cuadrada, mismas palabras que al parecer lograrían introducir un poco de dudas en las mentes de los dos chicos originarios de Tokyo, siendo esto un tanto más notorio en la expresión de la hermosa estrella juvenil de bellos ojos con singular forma de estrellas.
Popular cantante perteneciente a Ichigo Productions que al poco tiempo transcurrido decidiría incorporarse de la cama en la cuál se encontraba sentada, misma mujer de larga cabellera morada que a continuación, comenzaría a caminar lentamente hacía una de las ventanas ubicadas dentro de la amplia estructura, acción de parte de la linda Idol que a su vez sería contemplada en un total silencio por los demás individuos presentes, en especial, por su gran pareja sentimental.