31 - Descubriendo la ubicación.

Lo que hagas con tu tiempo está bien, yo nunca me gastaré el mío otra vez, dices tú que pierdo el tiempo sin parar, pues contigo lo perdía nada más.

Créeme, que ya aprendí a ya no perdonar, créeme, pues te acabaste toda, toda mí bondad, ahora solo espero verte con alguien más, para comenzar.

Y ya no verte más, ya para de llorar, te juro que algún día te arrepentirás, eso estaría mejor, pues mi imaginación, podría desearte algo que es mucho peor.

Quiero verte ya con alguien más, y así envenenar al aire ambiental, solo tú sabes como hacerme llorar, y a la tumba el secreto llevarás.

Créeme, que ya he olvidado cómo es eso de querer, créeme, que ya he cambiado yo no soy lo que tú crees, me he convertido en todo un cínico así es, te lo debo a ti.

Y ya no verte más, ya para de llorar, te juro que algún día te arrepentirás, eso estaría mejor, pues mi imaginación, podría desearte algo que es mucho peor.

Y ya no verte más, ya para de llorar, te juro que algún día te arrepentirás, eso estaría mejor, pues mi imaginación, podría desearte algo que es mucho peor.

Y ya no verte más, ya para de llorar, te juro que algún día te arrepentirás, eso estaría mejor, pues mi imaginación, podría desearte algo que es mucho peor.

Zona rural - Japón.

2:00 de la tarde.

Dos largos días después de aquél increíble concierto protagonizado por la estrella juvenil más importante de los últimos tiempos conocido como Naruto Uzumaki, el ambiente sumamente negativo y tormentoso parecía haber desaparecido finalmente de toda aquélla enorme zona rural invadida por un exuberante bosque, hecho que a pesar de lo desastroso que fue durante interminables horas, lograría dejar detrás un gran escenario apoderado por un bellísimo e intenso color verde.

Mismo escenario lleno de vegetación que en el tiempo actual, se podía distinguir siendo orbitado completamente por aquél brillante e inalcanzable ser nombrado sol, majestuosa zona boscosa que además en ese momento se contemplaba otorgando un ambiente demasiado amigable y repleto de un clima un tanto bochornoso, acontecimiento que era más que debido a los numerosos rayos provenientes del sol que en ese instante seguían evaporando la humedad que todavía existía en el lugar.

Ambiente bochornoso que a su vez estaba siendo del completo desagrado para cierto chico de solo quince años de edad y de ojos azules con forma de estrellas, el cuál, únicamente podía sentir con una notable molestia en su expresión, como una ligera capa de sudor se encontraba cubriendo casi por completo su cuerpo.

Tratándose de una capa de sudor que también se debía al hecho de que el misterioso pelirubio no había dejado de caminar desde hace un par de horas atrás.

Hikaru: Estas realmente segura de que este es el lugar correcto?.

Preguntó con una suma seriedad en sus palabras mientras se encontraba transmitiendo su tono de voz a través de la bocina de su gran celular inteligente, mismo pelirubio que a su vez en ese momento se contemplaba movilizándose de una forma sumamente cautelosa y lenta a través de la espesura del bosque.

Talentoso individuo dedicado al exigente mundo artístico que actualmente se apreciaba llevando puesto lo que parecía ser una larga gabardina de color gris, tratándose de un vestuario algo inusual que además se contemplaba siendo complementado con un ligero sombrero negro ónix y unos lentes de igual color.

Vestuario que al parecer estaba logrando ocultar un poco la identidad de aquél chico perteneciente a la empresa de talentos más importante de todo Japón.

?: Mi fuente es completamente confiable, así que no tengo ninguna duda de eso.

Se escuchó la clara voz de una fémina desde el otro lado del celular inteligente perteneciente al chico de apellido Kamiki, misma voz de mujer que además se había distinguido repleta de una absoluta seguridad y sin ninguna pizca de duda, tono que al menos lograria despejar un poco las enormes dudas que él ojiazul portaba en su mente desde tiempo atrás.

Hikaru: Aún así, porque Ai estaría en un lugar tan apartado de la ciudad de Tokyo?.

Volvió a preguntar, pero ahora con una notable duda, tratándose de un estado mental que el flamante joven dedicado al teatro mantenía desde hace nueve meses, estado que durante aquél lapso de tiempo, no había hecho otra cosa más que ir distorsionando los pensamientos del chico de sólamente quince años de edad.

Pensamientos que además poco a poco iban siendo consumidos por una gigantesca desesperación, un profundo odio y una inmensa cantidad de rencor.

?: No puedo decírtelo, ya que es mucho mejor que lo averigües por ti mismo.

Comentó con una leve burla reflejada en sus palabras mientras una ligera sonrisa un tanto tétrica adornaba su expresión, sonrisa que no pudo ser visualizada por Hikaru Kamiki a causa de la larga distancia que lo separaba de aquélla misma mujer, fémina que al parecer mantenía una relación demasiado cercana con el joven perteneciente a Konoha Productions.

?: Estoy segura de que te llevarás una enorme sorpresa mi querido Hikaru.

Habló con demasiada malicia al continuar demostrando aquélla pequeña sonrisa repleta de un sumo sentimiento tétrico, sentimiento que a pesar de estar siendo transmitido a través del celular, le estaba generando un notable escalofrío al chico de ojos con forma de estrellas, hecho que al parecer le ocurría al pelirubio cada vez que intercambiaba palabras con esa mujer.

Escalofrío que para la suerte de Hikaru Kamiki, desaparecería de su cuerpo justo en el momento en el que aquélla mujer decidió terminar totalmente la llamada, de esta manera aquélla misma fémina de misterioso apellido Himekawa dejando absolutamente en un profundo silencio y por unos cuántos segundos al gran actor.

Hikaru: Una...enorme sorpresa?.

Susurró con muchísimas dudas introducidas en su mente mientras no dejaba de repetirse una y otra vez aquéllas mismas palabras llenas de total malicia, tratándose de unas palabras que además habían logrado que un tremendo presentimiento se apoderara del corazón del flamante chico de apellido Kamiki, presentimiento que al parecer estaba resultando ser sumamente insoportable para el joven de sólamente quince años de edad perteneciente a Konoha Productions.