Otra estúpida historia de Amor

17.

Capítulo 17

Summer y Lucía.

Amarah

Subir al avión y pasar por todos esos momentos angustiosos valieron la pena cuando llegamos a la isla, Maui era más que un sueño hecho realidad. Jamás había estado en la playa porque en Afganistán no hay Mar.

-¿que te parece? ¿Te gusta?- Zayn me preguntó y ni siquiera pude responderle estaba llorando de la felicidad.

- Es fantástico, ha válido completa y absolutamente la pena - contesté cuando estuve más calmada. Y antes de que me dijera alguna otra cosa, me quité con rapidez los zapatos, los calcetines abrí la puerta de la cabaña y corrí directamente hacia al mar.

Gratificante sentir mis pies hundirse en la arena, pero la sensación del las olas reventando en la orilla y mojarme los pies, eso simplemente era la gloria.Volvería a sufrir mil veces todas las penurias que he tenido que pasar si el resultado me lleva al Mar.

Recuerdo claramente las postales del mar que Fátima Ahmadi me enviaba en secreto desde Estambul, me parece soñando que ahora también yo pueda verlo y sentirlo en carne propia.

Coloco mis manos en simulación al lente de una cámara e intentó capturar el momento para guardarlo en mi mente, me gustaría tener una verdadera para poder capturar el atardecer naranja que se mezcla con el azul del cielo y el mar para crear esa tonalidad perfecta de colores que solo la naturaleza puede darnos.

- ¿Quieres que te tome una foto?- Zayn parece leer mis pensamientos. Asiento feliz de que pueda guardar ese recuerdo en físico, porque de verdad quiero compartirlo con Fátima, Ella me mantuvo viva cuando nos convirtieron en nada, ella y Yamal Admet quien servía de mensajero entre ambas.

- Bien solo no te muevas - índica concentrado en la foto, y yo concentrada ahora en él. -¿Vas sonreír o te quedarás ahí toda sería?- agrega sonriendome de una forma contagiosa y aunque muero de vergüenza, mi deseó en que la fotografía sea realmente buena es mayor. Así que sonrió.

- listo ya está ¿Quieres mirarla?- me pregunta y yo digo que sí, al mismo tiempo corro hacia él.

-¡Que bonito el mar! Y ni hablar del atardecer...- Estoy fascinada, simplemente me encanta.

- ¡Que bonita tú!- agrega. Eso no me lo esperó, me pongo tan nerviosa que intento hablar pero las palabras no me salen - ¿Nos hacemos un selfie? - me pregunta y lo miro aún más nerviosa, el corazón me late a millón él lo nota y me avergüenzo aún más. -Necesitamos fotos para convencer a migración - agrega y su respuesta me calma un poco de seguir imaginando cosas que no son.

-si, claro- contestó y me pongo junto a él. Estamos super cerca, tanto que me embriagó del olor de su perfume. El coloca uno de sus manos en mi cintura y se agacha un poco para quedar a mi nivel. Luego con la mano que tiene libre ajusta la cámara en donde nos reflejamos. Lo que queda de sol le ilumina el rostro, su sonrisa es radiante y plena, como si denotará felicidad genuína. Y verle me hace sonreír también, así que cuando da click la fotografía queda perfecta... Bueno, al menos para mí.

-Ya está, ha quedado muy bien, te sienta bien el mar Amarah- agrega y se separa de mi, luego me dice algo mas pero yo ni siquiera lo estoy escuchando, solo estoy mirandole como una auténtica idiota. - ¿Me estás escuchando? -el se acerca a mi cara y me chista los dedos para que reaccioné.

-No, me he quedado pensando... Lo siento mucho- él me mira confuso - ¿Que has dicho?- agregó rápidamente y doy un par de pasos hacia atrás, necesito mantener un poco la distancia entré ambos o sino voy a terminar besándolo como la primera vez.

-He dicho que tengo mucha hambre... - no puedo dejar de mirarle sin sentir cosquilleo en el estómago, me preguntó si ¿esto que me sucede es lo que llaman sentir mariposas?

- ¿Tú no?- agregá y yo ya volví a perderme en la conversación por andar divagando en mis pensamientos.

-¿Yo no que?- digo y Zayn suelta una risa espontánea.

-¿Estoy hablando mandarín? Parece que no nos estamos entendiendo...-se acerca un poco y yo doy dos paso hacia atrás mi pie cae en un hueco en la arena no tan profundo pero lo suficientemente hondo como para hacerme caer de culo. Luego el agua se incorpora y hace lo suyo terminado de poner la cereza al pastel. Zayn se parte de la risa, y no sé si me gusta escucharle o me molesta más que se burle. Supongo que gana la segunda porque me levantó super enojada de haber hecho el ridículo frente a él. -Amarah... Lo siento espera- dice aún entre risas que no puede contener.

Yo lee ignoro y camino a pasos largo, mientas voy destilando agua, por toda la cabaña. Me sorprendo de ver a las dos Chicas del avión con las maletas en el pequeño salón.

-¡Oh! Vaya que sorpresa ¿también se están quedando aquí?- cuestiona mientras me mira de arriba a abajo conteniendo la risa.

-¿Que hacen ustedes aquí?- Zayn aparece y la mira con cara de pocos amigos.

-¡Pues esta es nuestra cabaña, eso dice nuestra reserva!- la chica rubia le entrega la reserva y Zayn la revisa.

-Esto es imposible, debe de haber un error -

- No hay error, hay dos habitaciones, una con una cama matrimonial y la otra doble ( dos camas) la de ustedes es la primera, la de nosotras la segunda - la morena le explica como si Zayn no supiera leer. Debo admitir que me causa gracia la forma en la que lo hace enojar.

- se leer niña, a lo que me refiero es que no queremos compartir, pidan cambio de cabaña, pagaré la diferencia -

- ¡Que egoísta!- la morena se lleva las manos al pecho indignada - ¿Tú has visto Summer? ¿Has visto lo desagradecido que es éste individuo? - La rubias asintió dándole la razón a su amiga, en todas está yo estába observándolos discutir.

-¿Porque debería agradecerles? ¿Por venir a molestar?- Zayn les gritó.

- te cambiamos el asiento de tu novia amargo, deberías ser más agradecido ¿Y tú estás bien cariño?- la chica rubia se acercó a mí. - ¿te ha hecho algo este lobo?- me tomo de las manos.




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