Capitulo 38

Eran mas de las dos y media de la mañana pero no le importo. Asi que se levanto y despacio camino hacia la cocina, prendio la luz y luego intentando no hacer ruido camino hacia la nevera para sacar una botella de leche. 

—Asi que esta es la hora cuando las ratas salen de sus guaridas y salen en busca de la comida... —dijo Rafael riendose al aparecer parado serca del desayunador, haciendo que ella se sobresaltara.

—¡ Ah !... ¿ que haces ahi ? —saco la botella  de leche de adentro de la nevera y luego lo dejo sobre el desayunador, antes de ir a sacar una taza de la alacena.

—No podia dormir, asi que estaba despierto y como escuche unas pisadas me alerte y vine a ver que era —era cierto pero tambien sabia muy bien lo inquieta que ella estaba y de esa ansiedad que tenia por solo hablar con el, ya que cada vez que lo hacia y lo miraba a los ojos ella sentia una calidez y una paz dificil de explicar con palabras  pero que a la vez le inquietaba  y esa noche quiera o no, lo estaba necesitando y mucho.

—Bueno, yo tambien no podia dormir y cuando algo asi me pasa, siempre vengo por un vaso de leche... —se tomo un trago y luego le miro y levanto su taza  mostrandoselo —¿ quieres un poco ?

—Si, gracias —dijo al sentarse en uno de los taburetes de la cocina y ella fue a sacar una taza de la alacena y despues de que le sirvio, se sento enfrente de el.

—Bueno, ya puedes decirlo... —dijo riendose despues de que se habia llevado la taza hacia la boca.

—¿ Que cosa ? —se hiso el desentendido pero el sabia muy bien a que se referia.

—Ya sabes... que al final tu y Cristian tenian razon.

—¿ Razon en que ? —ella le quedo mirando al mover la cabeza hacia un lado y tratando de no sonreir porque simplemente no podia no hacerlo al ver como el buscaba la forma de hacer que ella dijera todo exaptamente con palabras lo que el le dijo.

—En que Lucas no es un angel caido...

—Si, y que no es quien te salvo esa vez que casi te atropella un coche... —dijo serio y ella enseguida recordo la pluma blanca que habia encontrado ese dia en la terraza.

—Eras tu ¿ verdad ? —el asintio antes de llevarse la taza hacia la boca y luego los dos hicieron silencio por varios segundos en los que ella se sintio rara, confundida pero despues de todo, se sentia agradecida con el.

—Gracias, si no lo hubieras hecho yo hoy no estaria viva —los ojos de ella se iluminaron y Rafael noto una extraña emocion en su interior que no pudo descifrar con claridad, pero sintio que era una mezcla de alegria con tristeza.

—De nada, pero solo hacia mi trabajo —dijo al restarle importancia e intentar  ya no ser tan amistoso como antes ni de andar todo el tiempo atras de ella, como si estuviera mendigando su atencion y su amor tambien.

—Si, lo se... —dijo al mirarlo con curiosidad —pero siento que igual debo agradecertelo —el dejo la taza sobre el desayunador y le quedo mirando.

—Sabes ahora mismo, me gustaria tomar un poco de aire y salir al balcon, pero si tu... —dijo al levantarse del taburete mientras apoyaba las manos sobre la mesada y el le interrumpio.

—Vamos, te acompaño.

—Ok...  —los dos caminaron hacia el balcon y ella enseguida se apoyo con los brazos sobre el tapial como si estuviera abrazandose a si misma —siempre hago esto cuando no tengo sueño.

—¿ Y tu tia no se enoja porque andas desvelada hasta tan tarde ?

—No, porque ella duerme como un tronco y Jacoba es parecida. Asi que solo me cuido de no hacer ruido por Katelijn, esa niña tiene oídos de gato... —ambos se rieron y luego el tambien se apoyo sobre el tapial observando hacia la calle y luego miro hacia el cielo nocturno que estaba con pocas estrellas y entonces no pudo evitar recordar las palabras de Miguel y de Gabriel... una ataque de demonios que podia ser masivo se avecinaba y tenia a Brisa como tal vez, el principal motivo de esta —¿ en que piensas ? —dijo al verlo con curiosidad e interes, porque no lo podia negar pero desde que Rafael era su amigo entre ellos habia crecido un poco mas la confianza y siempre que tenia algun problema con Lucas o con cualquier cosa ahi estaba el, para ayudarla siempre que lo necesitaba.

—En nada... —dijo despues de haber negado un poco con la cabeza y ella giro todo su cuerpo para mirarlo de frente.

—¿ Sabes ? creo que si yo no hubiera ido al recital de los Splirber donde conoci a Lucas, estoy segura que me hubiera interesado en ti primero —por un momento el se quedo todo duro. Sus palabras le habian tocado hasta lo mas profundo de su alma pero tambien lo habian echo reaccionar. Asi que con su cuerpo todo tenso, se aparto del tapial y luego le miro serio —¿ que pasa ? ¿ te molesto lo que dije ? —se rio pero el igual siguio mirandola con gesto serio.

—No, es solo que creo que es demasiado tarde —por un momento ella le quedo mirando y cuando estuvo a punto de contestarle el siguio —tenemos que volver a dormir... —se metio adentro y dejo a Brisa con ganas de decirle lo que sentia y como no queria irse a dormir sintiendose de ese modo, fue atras de el, lo agarro del brazo y le hiso girar hacia ella.

—Escucha... —dijo decidida y como vio que el miro de mal modo su mano puesta en su brazo, la saco enseguida  —no se bien que es lo que me pasa contigo pero si despues veo que con Lucas las cosas no van a... —le interrumpio.

—¡¿ Que ?! —ella le hiso seña para que bajara la voz por Katelijn —despues de que lo que paso ¿ todavia piensas seguir con el ?

—Bueno... es que todavia lo quiero y eso no se puede borrar de la noche a la mañana.

—¿ No te das cuenta que el estuvo a punto de llevarte directamente a la boca del lobo ? Belial te queria para matarte, Dalila aunque estaba celosa estaba con el, al igual que Yesica y al final viste como las dos se pusieron del lado de el.

—Lo se, pero se tambien vi que Lucas hiso hasta lo imposible para protegerme.