Muchos libros, acciones, momentos y situaciones ya anunciaban el final de la vida de una protagonista cuyo enemigo de toda su vida fue el silencio; Violín sin cuerdas.
Las siestas brutas y los colapsos obligados cada ves se hacen más frecuentes (uno peor que el anterior).
Te contaré cómo lo supe.
En la madrugada del día 22/06/2019 (al rededor de las 2:00hs) me levanté para ir al baño y algo me detuvo en seco. Miré a través del vidrio y pude observar a un chico leyendo. A pesar de que nos separaba un vidrio, podía ver su tristeza, podía sentir su dolor como si lo pudiera tocar... Kylan se merece a alguien que esté bien y no a una silenciosa porción de realidad... Estuve hilvanabando entre sí palabras para llegar a la conclusión de los motivos por las cuales me sonrojo cuando escucho su nombre.
Todavía me queda una oportunidad.
Golpee la ventana para llamar su atención.
-Me gustas Kylan, me gustas desde hace mucho, me haces feliz muy feliz. Eres una de las razones por la cual estoy decidida en romper una regla- pensé en decirle, pero no lo hice más bien solo sacudí la mano y le sonreí. En unos pocos segundos él me devolvió el saludo. Luego la vista comenzó a nublarse y solo recuerdo como la cara de Kylan se transformaba radicalmente en otra expresión al verme.
¿Pero a qué quiero llegar con todo esto? La penúltima ves que me desmayé duré casi un día completo dormida. Pero desde aquel efecto hasta este preciso momento que te estoy escribiendo diario, ya pasaron 10 días que descanso.
Un gran cambio se aproxima, lo puedo sentir.
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Es impresionante como la vida de la protagonista cambió, ella afirma que grandes cosas sucederán ¿Tú qué crees?.
Se sabrán muchas verdades.
No te pierdas el próximo capítulo.