Había olvidado por completo todo lo que había sucedido hace tres años.
Tan solo pequeñas imágenes difusas aparecen en mi mente cuando trato de recordar mi pasado. Sé que tuve un equipo y lo perdí en una misión. He soñado muchas veces con ello, pero, nunca he encontrado el origen de ese recuerdo. Por más que he buscado, no existen datos al respecto, todos parecen haber sido borrados por completo.
Ahora, de la nada, llega un chico con un uniforme militar diciendo que él puede explicar todo lo que sucedió.
Estábamos todos en la sala de la casa, los sillones color chocolate eran iluminados por la luz de medio día que entraba por la gran ventana del lugar. Yo estaba sentado en el centro del sillón largo, y, a los lados, están Julie y Amelie, ambas peleando porque no aceptan la presencia de la otra.
¿Qué tipo de comedia romántica es esta?
El chico frente a mí, Kyle Moon, estaba sentado en el sillón pequeño mientras disfrutaba de una taza de té que él mismo había preparado.
–Sé los detalles porque he leído los documentos de central sobre lo que sucedió.
Kyle dejó la taza en la pequeña mesa ubicada frente a él, luego llevó la punta de sus dedos al pecho y presionó un botón ubicado cerca de el bolsillo izquierdo de la camisa, proyectando un holograma al instante.
Se podían leer varios documentos sobre misiones y informes sobre soldados en la poyección. No tengo ni la menor idea de qué hizo el chico para acceder a tal información confidencial. Hasta donde yo sabía, solo las personas mus leales a central y a los Altos Mandos tenían la oportunidad de acceder a la gran base de datos existente.
—¿Quién es este chico?
Yo aún seguía confundido. El día había comenzado de manera normal, Julie jugándome bromas como de costumbre y yo tardando en levantarme, hasta convertirse en una batalla campal entre una chica recién llegada, llamada Amelie, mi autoproclamada esposa, y mi pareja actual, Julie. No tenía idea de qué hacer.
Los vendajes que Kaly había hecho sobre mi herida eran cambiados con regularidad, ya que, si lo ponemos en términos simples de medicina, era como recibir una quemadura entre el segundo y tercer grado. Era una herida horrible, pero, gracias a la capacidad sanadora que tenía Kaly, aún siendo un Peón, sería capaz de recuperarme por completo.
El golpe que Julie había recibido ya estaba completamente curado, tan solo una pequeña marca de menos de cinco centímetros había quedado como residuo. Supongo que las mujeres se preocupan de que su cuerpo no tenga ningún tipo de cicatriz visible, creo que puedo entenderlo.
Regresé mi atención al chico frente a mí. Podía ver sus profundas ojeras bajo sus ojos, parece que no ha dormido bien en mucho tiempo, no me sorprende que central explote a sus subordinados como si ellos fueran desechables.
Kyle estaba jugueteando con su taza mientras el holograma era proyectado.
–Aunque, sería mejor que lo escuches directamente de ella. Yo solo tengo esto por decir, lo demás, tendrás que averiguarlo por tu cuenta.
Kyle golpeó levemente el holograma, haciendo que este flotara en el aire hasta donde yo estaba. Era una manera sencilla de mostrar información a los demás. Los documentos mostraban fechas cercanas entre sí. Había muchas cosas relacionadas, simplemente, no sabía qué pensar.
No recordaba nada de lo que estaba escrito ahí.
–Sé que puedes no estar familiarizado con todo esto, lo entiendo, pero, no estaría mal que trataras de confirmar qué cosas sucedieron en realidad. Yo podría decirte que todo lo que están en los documentos sucedió tal y como está escrito, pero, puede haber diversos cambios. Tú, más que nadie, sabe que dentro de una operación puede haber cambios repentinos, los cuales casi nunca se registran.
–Lo sé.
Mantenía mi vista en las abundantes líneas de texto de los documentos, pasando los ojos rápidamente por toda la información.
Hace cuatro años había sido asignado a una unidad para encontrar a una persona en los bosques de la Antigua Polonia. Recuerdo que iba con dos personas, pero no logro recordarlos perfectamente. Mientras sigo leyendo, encuentro un reporte del capitán de la misión, llamado simplemente Aly. Él reportó la deserción de uno de mis compañeros, llamado Dylan, además, reportó que, en cierta parte del primer día de operación, todos nos dividimos para cubrir más espacio y yo fui el único que optó por ir solo.
“El grupo conformado por los soldados de la escuadra 31 y 5 se detuvo en el sector siete del bosque, cada uno de los integrantes escogió una ruta diferente, por lo que no me es posible reportar lo que hizo cada una de las personas implicadas.
Mi grupo quedó reducido a únicamente los miembros de mi escuadra a excepción de Eduard, el cual se emparejó con Riley para investigar el bosque. En contraparte, el capitán de la unidad 31, Kay King, caminó en dirección al sector nueve, donde está ubicado un lago.
Las comunicaciones con ambos grupos eran estables hasta que perdimos contacto con Kay King después de unos minutos. Lo único que podíamos ver era el suelo lodoso del lago, así como estática y unos pocos gritos. Rápidamente nos pusimos en formación, llamando a los dos integrantes restantes a rodear el lago.
En mi grupo, Mía Hart, encargada de la recopilación de información, comenzó a localizar la unidad de reconocimiento de Kay, la cual fue encontrada a pocos metros de la orilla del lago.
Había un par de pisadas hechas por alguien ajeno al grupo cerca del lugar. Kay King vestía un par de botas estándar, por lo que su grabado era fácil de identificar, junto a este, un par de huellas hechas con los pies descalzos, y con una menor profundidad que las hechas por Kay, indican la cercanía de nuestro objetivo.
Mía se encargó de registrar la dirección de estas, por lo que no fue difícil encontrar el paradero de Kay. Este estaba tirado tan solo unos cuantos metros dentro del bosque que circundaba el lugar. Tenía una marca de herida en su ropa, pero no había sangre visible, por lo que descartamos la atención médica.