Te conocí en un momento frágil para las dos.
Te conocí en un estado donde no tenías lugar para nadie más.
Te conocí y al abrirme tu alma entendí lo que es realmente el amor.
Te conocí en todas tus facetas tierna, serena, atormentada y sabia y quedé rendida ante cada una de ellas.
Te conocí y bendigo el día que respondí a tu llamado de auxilio.
Te conocí y quiero seguir estando a tu lado bella mujer de sonrisa tierna.
Te conocí y cada día admiro más tu forma de andar por la vida, porque eres la mujer que hace que quiera ser tu acompañante en el camino que nos brinda esta vida.
Te conocí y ahora sé que es para hacerte esta propuesta de hacernos compañía sin entorpecer nuestros espacios. ¿Aceptarías atravesar junto a mí este camino que nos depara el destino?