CARTA 3
Querido A:
Hoy estaba recordándote, te voy a ser sincera, te extraño. Extraño eso que teníamos, aunque nunca lo supe con certeza, no necesitaba una etiqueta para quererte como te quise.
Lamento que no me quisieras ni un poco, claro que lo decías y yo lo creía pero tus acciones me demostraron lo poco que yo valía para tí.
¿Sabes lo difícil que es pensarte diario y no poder hacer nada para saber de tí? ¡Claro que no lo sabes! Te fuiste sin importarte dejarme, sin importarte lo mucho que te necesité.
Me tienes aquí desesperada por saber de tí, y no poder hacer nada porque estás al otro lado del mundo.
En parte agradezco que así sea, sino yo estaría peor de lo que estoy ahora.
Atentamente:
Una estúpida chica.