15. RENATA BARRIE

CAPÍTULO QUINCE - RENATA BARRIE

“La nueva versión de Renata Barrie”

“Hazle caso a tu enemigo porque, guerra

avisada… no mata gente”

Renata Barrie

El frío viento del invierno recibe la llegada de la época en donde los niños festejan por regalos supuestamente traídos por el querido Papa Noel. Disculpa si todavía eres inocente creyendo en eso, pero es la verdad. Las familias del vecindario andan en tiendas comprando juguetes—que por cierto, han empezado a crecer las tiendas—, han abierto salas de cine en donde el público puede ir… el restaurante que tanto iba con William ha cerrado y ha sido cambiado por un KFC que no entiendo muy bien el gusto, siendo sincera, me gustaba mi restaurante.

Ha llegado la ropa que “la gente adolescente” utiliza, han cambiado un teatro por un estadio para que el público se entretenga, han llegado más aplicaciones en donde no tengo ni idea de cómo se utiliza pero al menos me sé unas cuantas en básico: Youtube es para ver videos, Tik Tok es para ver videos de gente bailando, Facebook es para tener una relación social en tu comunidad y Instagram es para explorar tu vida hacia otras personas… eso quiero decir que ha pasado ya bastante tiempo desde que la Renata que quería paz se fue de mi cuerpo.

Subo las escaleras, haciendo sonar los tacones rojos. Miro mi reflejo en el espejo y pienso en lo que tuvo que pasar ella, en lo duro que no pudo resistir.. Teodoro no era su hijo biológico, por ello no sacó su conducta, saco la de su padre… que por cierto, ahora sale con sus amigos.

Pudo ser fuerte, pero no tenía fuerzas para sacarlo.

Pudo ser valiente, pero se rindió cuando todo se le aventaba encima.

—Renata, debemos hablar… —dice William, saliendo de la habitación que compartimos de nuevo. Él sabe como soy, sabe quien soy y simplemente lo beneficia. Mi sincera verdad es que “Renata” merece a alguien mejor que él

—Si, claro —dije moviendo mi cuerpo hacia él, que termina sentándose en la mesita. Tomó asiento. 

—Quería decirte algo muy importante, pero puede que te lastime un poco —toma aire y lo expulsa muy ruidosamente, —Es sobre mi plan de venganza… yo, en un principio eras parte del plan, pero, luego pensé que no quería hacerte daño… yo, no puedo vivir contigo cuando somos un par de desconocidos durmiendo en la misma cama

—Entiendo, entonces mudate a otra habitación… o puedes irte de la casa

—Renata, esta es mi casa…

—Pero soy tu esposa y soy la madre de tu… —no, no soy la verdadera madre, —Tienes razón, mejor me voy

—No era lo que quería decir, Renata… oye, escuchame. No te vayas.

Voy hacia la habitación y veo aquellos recuerdos que tuve junto con él, desde el momento en que dormí por primera vez con él hasta esta mañana que ninguno de los dos sentimos nada por el otro. Como aquellos días que él era distante conmigo porque estaba con alguien menor que yo o cuando peleábamos por cosas absurdas. Quito los pensamientos de pronto, agarro la maleta y saco mi ropa del armario. 

De pronto tengo las manos en el cabello de William, con ojos suplicantes y con una voz un poco más gruesa susurra.

—No te vayas, te necesito

Hace tiempo diría que yo hubiera creído en sus palabras, pero ya me aburrí de él y no soy la anterior persona que le tenía miedo. Él, Verdades y Willy deben pagar por todo lo que le han hecho.