¿pasado o tortura? [borrador]

Vida

Cuando los jóvenes estaban por cumplir dieciséis eran capaces de desarrollar un don. Solo Las familias nobles y reales fueron bendecidas según la leyenda popular, pero siempre había excepciones. Algunos hijos no poseían el poder, estos eran repudiados y subestimados.

La casa Valeva era el hazme reír cuando ningún hijo heredó la singularidad que los hacían superiores. Hace más de cien años una joven que no era perteneciente de ningún linaje bendito despertó la habilidad mágica, el suceso es conocido como "Kasha", este volvió a repetirse desde que empezó.

El reino costero atravesado por la montaña del Santo adora a Luxh. E incluso condenan a quien fuese capaz de contradecir y apoyar a otro dios. El más leve castigo es ser asesinado en la plaza pública.

El dios de este mundo me trajo aquí. Antes de renacer tuve la posibilidad de hablar con el dios maldito. Mis muertes fueron distintas, dos vidas, dos partidas. Con cada una tengo sentimientos totalmente opuestos, amor y odio. La ultima me sentí realizada, en plenitud y en paz. Morí en la casa que compartí con el amor de esa vida. Todos mis hijos estaban ahí. Mis manos arrugadas agarraban el retrato de Antonio. Antes de mi último suspiro escuché la voz de Luxh.

— La diversión acabó.

Mi alma se desprendió y quedo suspendida en la línea de mundus. Allí donde las múltiples dimensiones se conectan, el punto de reunión de los dioses. Entendí muchas cosas de ese lugar, no era la única que viajo entre dimensiones. Cada historia está escrita en el muro de Reanir, el nombre fue dando gracias al dios Renirsa quien propuso el tratado de "Almas de mundus". El trato consiste en no intervenir e invadir dimensiones, y el intercambio de almas entre el universo.

Al menos más de seis mil firmantes en su primer ciclo. El dios maldito, Infid Akhas se opuso al acuerdo entre gobernantes del multiverso. La declaración de guerra empezó en el ciclo oscuro, los acontecimientos de Cisne Carmesí causo miles de invasiones entre universos. Las alianzas fueron fundamentales para la guerra, las cabezas de aquellos que se opusieron al tratado de "Almas de mundus" cayeron en batalla en Kull-Sil. Los que sobrevivieron quedaron encadenados en mundus.

La revuelta de sentimientos, la ansiedad de no saber qué pasará después. Los recuerdos cuando era Lya me llenan de rencor, pero luego recuerdo a Rina, mi nombre de aquella vida relaja y hermosa donde no podía dejar de amar. El amor y el odio puestos en una balanza, ¿quién ganara? Me siento dividida entre dos personas, Lya y Rina. ¿Puedo juntarlas? ¿Podría ganar así de dividida?

Rodeada de espejos que reflejaban a Rina y Lya. Los dos cuerpos eran tan diferentes, Lya se ve tan hermosa, el cabello rubio cayendo por sus caderas, el ajustado corset que se ajustan a la perfección la simetría del cuerpo. El rostro sin imperfecciones, las finas facciones, el pequeño rostro aniñado. Los llamativos ojos expresivos llenos de resentimiento. Por el contrario, Rina, tan simple a comparación del otro cuerpo, pero igual de extraordinaria. Ojos negros, piel canela como la canción de aquel artista que solía bailar con Antonio. Mi hermosa sonrisa que podía iluminar a todos.

El espacio se desvaneció en un instante, en un efímero momento puede ver a Lya con las manos manchadas de carmesí. La vista cambio, se veía la cuidad de Raki, ya muy entrada la noche dos coches avanzaban dejando atrás la nube de polvo. Uno de los cocheros se cayó gracias al hechizo lazado por la joven noble desde el otro choche, dejando desbocado a los caballos.

Los gritos de angustia de los que se encontraban dentro no causo efecto en su atacante, la chica no mostro compasión, en su rostro mostró una sonrisa satisfecha. El carro se estrelló contra un viejo cerezo, los minutos parecieron tortuosos. La chica encapuchada bajo para asegurarse de que todos se encontraran muertos. Sus pisadas y el sonido del viento meciendo las ramas fue el único ruido.

— ¿HAY ALGUIEN AHÍ? — grito con la voz distorsionada. Al no recibir respuesta su sonrisa se ensancho. «Ya era hora que esos bastardos salieran del juego». La dama no dejaba de sonreír teniendo de fondo dos cadáveres inertes. Se empezó alejar silenciosamente de la zona, pero hubo algo que la hizo retroceder.

— ¡Ah! — un quejido agónico se escuchó. La sangre abandono su cara, su piel se puso extremadamente pálida.

—¡Mierda! — susurro en un acto de impulsividad. La mujer mordió con desesperación su lengua.

El cochero se acercó a ella, tenía algo que decirle, pero por la expresión de la señorita sabía que no era un buen momento, aunque la información era de vital importancia.

— El duque Atares estará en la ciudad en cinco días — se arriesgó a comunicarle lían —. Señorita Lya, la duquesa llegara pronto, tenemos que irnos.

— Alguien está vivo, mátalo por mí, te daré una recompensa, borra la evidencia del homicidio. Te espero en mi cuarto, allí entrégame la información de Axa que te pedí.

— Sabes que no es necesario que vaya.

— Yo te quiero ahí.

Las imágenes se desaparecieron en un instante. La oscuridad volvió a prevalecer. ¿Qué sigue después? Muchos interrogantes en mi cabeza, ese recuerdo como muchos otros más sangrientos se almacenan en desorden. El frio ambiente, la revuelta de sensaciones. ¿La calidez no piensa abrazarme? Lo único que sabía es que nada será lo que fue. El miedo se volvió un cumulo oscuro aún más oscuro que este lugar.

Voces se escucharon, susurros casi inentendibles. Apenas puede entender una sola palabra que repetían a coro. Muerte, muerte... ¿Qué más tengo que escuchar? Un ruido seco y luego el espacio se ilumino y dejo ver una figura sin rostro. La extraña situación y lo que tenía de frente era la personificación de la rareza combinada de pureza.

Cubierto de rojo vivo, no dejaba ver sus manos, pero se veía la figura de un hombre. La falta de cabello era imperceptible ya que toda la atención era dirigida a su cara faltante de facciones.



#7715 en Otros
#612 en No ficción
#2803 en Thriller
#1483 en Misterio

En el texto hay: mentiras, amor, sufriendo

Editado: 07.03.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.