Capítulo 10, Las voceras

Liyul, Eali y Melenas se apresuran a encontrar un buen espacio en el parque, ya era hora de los anuncios y todo el lugar se estaba llenando de muchas personas. Liyul logra ver un sitio para los tres, pero antes que termine en avisarle un grupo de magos lo toman. Eali tampoco tenía mucha suerte, por el otro lado Melenas rebuzna al ver uno no muy lejos, ¡suerte!, los 3 se apresuran a agarrarlo, al mismo tiempo un grupo de magos en el cielo se dan cuenta del espacio y se lanzan para llegar primero. Eali y Melenas explotan en carrera, él corre con todas sus fuerzas pero rápidamente baja la velocidad, no iba a llegar a tiempo: sin embargo Melenas no se rinde, esquiva a todo mundo a su al frente y termina saltando sobre 2 personas, un poco agotado aplasta su trasero en el suelo para cementar su territorio. Liyul y Eali llegan después de unos segundos y se disculpan con el grupo de magos que aun molestos deciden irse.

Los dos abrazan a Melenas que comienza a rebuznar orgulloso de si mismo, contento por haberle ganado a los magos: Eali saca dos jugosas manzanas y se los da a su amigo, los sostiene para que pueda comérselos mas fácil. Aprovechando el tiempo Liyul suelta su canasta y extiende un mantel, reparte la comida y bebidas, también sus galletas y pastelitos. Ya eran las 10 de la noche, pero el parque se encontraba bien alumbrado, de repente una voz indica que el evento estaba por comenzar y ordena a todos los que estén volando que aterricen de inmediato. Las luces en los parques y en toda la ciudad comienzan a disminuir, no del todo, lo suficiente para que puedan iluminar el cielo.

Las luces de teatro se enfocan en la maga con el sombrero de caballo, esta vez no estaba sola, la acompañaban otros magos con sus propios atuendos, la mas cercana traía un ropaje de deporte.

—Buenas noches a todos y bienvenidos a nuestro festival, hoy vamos a presentar un programa para todos ustedes. Voy a introducir a mis amigos que van a ser los voceros de cada uno de los eventos…

Sin que la dejen que termine la vocera de la gran carrera la empuja, docenas de enormes pantallas como espejos aparecen, en ellos se puede ver claramente el rostro de una pecosita morena de cabello corto y con un cuerpo atlético.

—Hola a todos, mi nombre es Alita Delpaz y quiero invitarlos a que vean el gran evento La Gran Carrera —lo anuncia con gran pasión y alegría que anima a la gente—. Van a ver a 50 participantes que van a luchar por los 5 primeros puestos, y les tengo una sorpresa, entre ellos se encuentra Figuel, el tercer mas veloz de todo el mundo y Yasmin, la campeona del continente. Gracias a estos espejos van a poder vivir de cerca cada momento del evento y van a poder alentar a sus favoritos corredores, no se lo pierdan. El evento va a comenzar a las 10 de la mañana y espero verlos a todos.

Al terminar ella desaparece, otra mujer con un uniforme de combate toma su puesto. Ella traía puesto una ligera armadura de magos, su cabello celeste era largo y lacio, y uno de sus aspectos mas notables era su estatura que llegaba a los 7 pies. Su voz era fuerte y clara, algo intimidante.

—Hola mis queridos combatientes, es un orgullo ser la vocera del evento El combate de Magos, mi nombre es Kaila Blash. Yo soy la segunda comandante del norte y quiero invitarlos a presenciar los mejores guerreros de nuestro territorio. Uno de ellos es nuestra preciada campeona Lucero Elfin, ¿podrá haber alguien que la pueda vencer este año? Vengan a presenciar el poder de la mejor maga donde 16 guerreros van a luchar por el chance de derrocarla. Los 5 primeros puestos van a ser otorgados entre los 4 mejores y Lucero. El evento va a comenzar en dos días, no se lo vayan a perder y vengan a alentar a sus favoritos guerreros.

Kaila saca su espada de hielo y cortando el aire hace que nieve comience a caer por un momento, la tercera y el cuarto mago aparecen juntos.

La maga era bajita comparada con el resto, pero había algo diferente en ella, su vestido complementaba su preciosa figura, sus grandes senos, delgada cadera y suaves piernas. Su vestido de dos piezas era extravagante de color rojo decorado con pequeños diamantes. Cuando las luces se agrupan en su rostro ella desenvuelve su radiante largo cabello marrón, y al abrir sus ojos azules las luces cambian a diferentes colores y una canción comienza. Ella toca su pecho y entona fuertes notas, estirando sus brazos aumenta la voz llenando todo el cielo con la canción folclórica Mi Querido Quinton, el imperio que no puede ser conquistado. En la canción cuenta que por 300 años los otros imperios nunca pudieron invadir sus tierras, un país lleno de guerreros que siempre vigilan cada rincón de sus territorios, donde los mas poderosos magos viven, la envidia de todo el continente.

Mientras que canta su compañero comienza a bailar, la agarra de la cintura por su detrás, meciéndola con su cuerpo, y sin que ella pare de cantar y con una sonrisa se zafa de sus brazos, pero él no se rinde. Prosigue a atraparla de la mano para hacerla girar, ella termina otra vez en sus manos lista en recibir un beso, y antes que le plante uno ella pone su dedo logrando impedirlo. Los dos comienzan a bailar al ritmo de la canción para terminar.

—Hola mis queridos amigos, yo soy Shi’el Yans —dice la maga cantadora.

—Y yo soy Aguila Añeni —agrega el mago.

—Nosotros vamos a ser los voceros para los eventos de cantantes y bailadores —aclaran los dos.

—Todos son invitados a participar, no importa si eres un profesional o un principiante, solo tienes que cantar tu favorita canción con pasión y mucho amor, yo te voy a otorgar el poder para cantarlo a todo fervor —proclama Shi’el—. Solo tienen que venir a mi oficina de talento y si pueden cantarlo por 2 minutos van a recibir mi estrellita para poder participar, espero ver a muchos de ustedes.

La mayoría en la audiencia cuchichean, solo necesitan una canción y van a poder cantarlo con su poder, ¿pero qué era el premio?, muchos se preguntan.