Peligrosa Obsesion

Capitulo 2

Mientras corria bajo la lluvia, sentia como me iba mojando debido a que habia empezado a llover y sentia como lagrimas bajaban por mi rostro, pero eso no me importaba en ese momento, lo unico en lo que pensaba era en. ¿Porque a mi?, ¿como mi padre era capas de hacerme esto?, si siempre prometio protegerme, cuidarme, y sobretodo que jamas me dejaria sola, es que simplemente no lo enetndia, no entraba en mi cabeza como pudo hacerme esto a mi, a su propia hija, su propia sangre. Tanto me odiaba, tanto rencor sentia hacia mi, es que simplemente no lo entendia. Pero eso no me importaba ahora, ni siquiera el hecho de estarme mojando bajo la lluvia, o el hecho de que sentia frio. Lo unico que pensaba en ese momento, era en que haria ahora, por un momento paso la idea en irme donde mi mejor amiga, pero luego descarte esa idea inmediatamente de mi mente, ya que no queria ser una molestia para ella ni menos para sus padres. Mientras pensaba en eso, me encontraba tan distraida que no me di cuenta que impacte con un pecho duro, hasta que cai al suelo debido al impacto de dicho choque. Al alzar mi vista me encontre con un hombre mas o menos de 1,77, con un cabello liso y negro como la noche, y pese a estar lloviendo y yo estar tiarada en el suelo, se podria apreciar que poseia unas facciones y pomulos bien definidos, y su rostro solo expresaba seriedad y molestia, pero eso no fue lo que mas me impacto de dicho desconocido, lo que me impresiono fueron sus ojos,negros como la noche pero que a la vez poseian una luz en su interior. Mientras me quedaba embobada mirando a semejante hombre frente a mi, no me di cuenta que me encontraba toda mojada y con mi rostro cubierto de lagrimas, hasta que dicho desconocido hablo y me dijo.

 

—Ten mas cuidado, que acaso no ves por donde vas—me dijo el desconocido mientras me miraba con evidente molestia en su rostro a las ves que se cruzaba de brazos.

—eehhh....per-perdon es que no lo vi, lo lamento mucho señor—hable ¿tartamudeando?, yo tartamudeando, no lo podia creer, pensaba mientras miraba a semejante hombre frente a mi.

—Pues fijate la proxima vez niña, no ves que este traje es caro y pudiste haberlo arruinado, y si hubiese sido asi como lo hubieses pagado, eh?—me dijo dicho hombre mientras me miraba de manera despectiva, como si fuera menos que el, por el hecho de la ropa que llevaba en dicho momento. Y en ese momento que dijo esas palabras, su actitud me molesto, y si penso que me quedaria de brazos cruzados y no le diria nada y dejaria que me hablara de esa manera, esta muy equivocado. Asique me pare y lo enfrente.

—Pero quien se cree usted que es?, Se cree que porque posee dinero puede tratar a las personas de esa manera, si es verdad choque con usted, pero no fue a proposito, y le pedi disculpas, pero eso no le da el derecho de tratarme de esa manera—le grite en su rostro con enfado mientras me cruzaba de brazos.

—Pero que niña mas insolente, que acaso tus padres no te enseñaron que se debe respetar a las personas?—me decia mientras me miraba en esa lluviosa noche. En el momento que dicho sujeto pronuncio la palabra padres, me trajo recuerdos de mi niñez, esos momentos maravillosos que pase junto a ellos, esos momentos felices, pero todos esos recuerdos se derrumbaron de inmediato en el momento que recorde lo que me hiso, el y mi madre. En ves de contestarle solo agache mi mirada, para que no viera como mis ojos se volvian a llenar de lagrimas.

—Eh que no me escuhas, te estiy hablando—me seguia diciendo el, pero en ese momento no podia contestarle, solo pensaba en lo que me habia hecho mi padre solo unos momentos atras. Hasta que lo escuche hablarme de nuevo y decirme.

—Oye niña, estas bien?—me pregunto dicho sujeto que aun desconocia su nombre, mientras levantaba mi barbilla y me miraba de una manera ¿preocupada?. En el momento que me pregunto aquello no pude aguantar mas, asi que me lance a sus brazos y llore, llore por lo que me hiso mi padre, llore por como me trataba mi hermano, llore por mi madre, llore por todos aquellos viejos recuerdos que sabia que ya no volveria a tenerlos, debido a que ya ya no los volveria a ver a ninguno de ellos. Y ahi me encontraba yo, llorando en los brazos de aquel hombre, sin importarme absolutamente nada, lo unico que pensaba en ese momento era en mis padres y en lo bien que me sentia en los brazos de este hombre y lo que provocaba en mi. Pero eso no duro mucho ya que en el momento que me di cuenta de lo que estaba haciendo, procedi a separarme de el, hasta que senti como sus brazos me rodeaban y luego el me dijo.

—Tranquila desahogate, sea lo que sea que te ocurra pasara, tu tranquila—me dijo mientras me apretaba entre sus brazos y con su mano procedio a acariciar mi cabello, dicha accion que solo me hiso llorar mas entre sus brazos.

Y ahi me encontraba yo bajo ese dia lluvioso llorando entre los brazos de un completo desconocido, sabia que estaba mal, que apenas lo conocia, pero eso no me importo en ese momento, ya que me sentia tan bien entre sus brazos, me sentia comoda y me transmitia paz. Como si el me pudiera proteger de cualquier cosa, como si el fuera a estar siempre para mi. Y en ese momento, mientras me encontraba en los brazos de dicho hombre, que aun no sabia su nombre, en ese momento supe que el seria tanto mi salvacion como mi perdicion a la vez.

Estuve por unos minutos mas, llorando entre sus brazos, hasta que decidi separarme de ese lugar calido, luego lo mire y le dije.

—Solo una pelea con mis padres nada mas—conteste mientras me perdia nuevamente en esa mirada, en esos bellos ojos que escondian tantas cosas, pero que me decian tanto a la vez.

—No creo que una simple pelea te alla puesto en ese estado, algo mas debio ocurrir para que estes asi—me dijo mientras me miraba preocupado.

Y en ese momento mientras el me miraba, mientras sentia como la lluvia me seguia mojando, no pude aguantar mas y me decidi a contarle toda la verdad a ese desconocido. Mientras le narraba todo lo que habia ocurrido, el solo me miraba y me escuchaba atentamente, no me juzgo, no me miro mal, nada, solo se encontraba ahi de pie escuchandome. Luego de contarle todo lo que me paso, el me miro y me dijo.




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