Estoy perjudicado por los amores e ilusiones.
Estoy lleno rabia por escribir poemas.
Estoy desesperado en el silencio de mi cuarto.
Vienen a mi mujeres que son como el rio
solo son un pasaje lento y tierno.
Cada vez que llegan les escribo,
trato de nutrir sus corazones solitarios,
trato que mis palabras adsorban sus penas,
que mi compañía de poeta sea una sonrísa para ellas.
Pero estoy desligado a quedar eterno en sus vidas,
ellas marchan con sus sonrisas,
desmembrando el ultimo aire de mi cariño.
No dediques poesía a las sonrisas,
no salves sus corazones solos,
exíliate al insomnio de olvidar,
y prepárate para estar loco en la soledad.
Ahí estoy yo en mi estrecho cuarto,
tirado sin ropa y sin alma,
matando moscas con mis ojos,
los rostros de ellas vuelan muy rápido.