Pensamientos de una incomprendida

Miedos que te ciegan

La última vez que vi tus ojos... Recuerdo que me contuve. Me abstuve a decir un «hola» por temor a una mirada glacial de tu parte. Cuando los días pasaron y ya no volví a verte nunca más, comprendí que el miedo me cegó a mi felicidad, viví con ese temor tanto tiempo... y me fui perdiendo de sueños, planes e incluso acciones que pude llegar a tomar.

Pero sólo fue una ilusión, un recuerdo falsificado por mi mente astuta. El fantasma de las palabras «no puedes», «no llegarás», «no te amará», son oraciones y pensamientos que se armaban para hacer un complot contra mi persona.

Fui mi peor enemigo porque ni las bocas más sucias pudieron herirme así. Yo me herí, me auto causé un dolor que no existía, una fabricación de un estado depresivo y por eso te perdí. Todas tus oportunidades, muchos sueños, perdí mi autoestima, me perdí a mí por los miedos.

 

 

 

 

¡Hola mis pollitos! ¿Cómo están? ¡Porque yo estoy de maravilla! Gracias a un gatito...

Ya tu sabe, ya tu sabe 7u7r

Bueno a lo que voy. ¿Les ha pasado lo mismo? ¿Cuando quieren hacer algo y terminan inventándose toda una historia llena de fracasos? Pues a mí, sí. Pero les tengo un ejercicio para ello, cada vez que tengan miedo no duden, háganlo sin pensar, a veces el aventurarse a lo desconocido lo es todo. <3



#21955 en Otros
#1684 en No ficción
#6565 en Relatos cortos

En el texto hay: poesia, poemas, romance

Editado: 18.03.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.