Creo en ti, con la venda en los ojos.
Creo en ti, con las flores robadas en mano.
Creo en ti, aunque mientas, y sé con solo verte la genuidad verdadera.
Creo en ti, en el pasar de los años, en tu corazón cuando los semáforos están en rojo, amarillo y verde.
Creo en ti, por fertilizar mis raíces, y ser el sol quien me apoya.
Creo en ti, porque te lo ganaste con pico y pala en mano.
Creo en ti, por cada dolor que has ido quitando.
Y creo en ti, por el simple hecho de tenerte adentro, en mi alma.