Pensamientos escritos de una Almendra

Sin Fecha — 6

Déjame llorar en tus brazos,
como si fuera tu niña pequeña.

Déjame desahogarme,
deja que me tranquilice al 
compás de tus besos.

Déjame decirte lo mucho
que te amo y amo estar a tu lado.

Deja que te diga mil cosas al oído,
aunque tenga tantos nudos en la garganta.

Déjame amarte esta noche, aunque 
este llorando en tu regazo.

Se solo mío y déjame ser solo tuya.
Deja que te llene de besos y yo 
dejaré que seques mis lágrimas.




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