Cuando llega el atardecer es inevitable
Mirar el cielo y ver el reflejo de memorias
Que vuelan como mariposas, escapando de su jaula
Es como ver pequeñas estrellas fugaces
Disiparse en la oscura la noche,
Y une vez más tu recuerdo aparece ante mí,
Nublando la visión que hay ante mí
Provocando un remolino de emociones
Que no cesan de parar
Dime, ¿porqué no te marchas de una vez
y te disipas como aquella estrella fugaz?
¿Porqué tu recuerdo está nublando mí presente?
Es inevitable pensar
Que tan solo ayer eras parte de mí,
Es inimaginable el dolor que causaría tu partida
Miro al cielo una vez más y veo una luna,
Una luna brillante y reluciente como un diamante
Tanto es su resplandor que me deja ciega,
Una ceguera que me recuerda lo feliz que fui,
Es como comer un agridulce dulce, eso eres tú
¿Dime porque no te marchas de una vez
y te disipas como aquella estrella fugaz?
¿Porqué tu recuerdo está nublando mi presente?
Es inevitable pensar
Que tan solo ayer eras parte de mí,
Solo quiero dejar escapar estas mariposas
Y Verlas convertirse en estrellas fugaces
En compañía de esta luna que brilla ante mi