Página 4: La Tormenta
Mientras Lila disfrutaba del valle, el cielo comenzó a oscurecerse. Las nubes se arremolinaron y un fuerte viento empezó a soplar, haciendo que las flores se inclinaran. Bella, preocupada, dijo:
—Debemos encontrar refugio, Lila. Una tormenta se aproxima.
Lila sintió miedo, pero sabía que no estaba sola. Juntas, buscaron un lugar seguro entre las flores. Encontraron una gran flor que las protegió de la lluvia y el viento. Mientras la tormenta rugía, Lila se dio cuenta de que incluso en los momentos difíciles, la amistad y la solidaridad podían brindar consuelo.
—No te preocupes, Lila —dijo Bella—. Las tormentas también pasan y, al final, siempre hay algo hermoso que descubrir.
Editado: 31.10.2024