CAPÍTULO 2: SIEMPRE LA EXCEPCIÓN

Cuando abrí la puerta del bar , entré en una nube de humo de cigarro que nublaba la imagen. La música estaba a un gran volumen , los vasos de chupitos circulaban por la barra uno tras otros sin fin , y el olor a porro era apreciable.

Así se puede resumir una fiesta universitaria , ponerse ciego de alcohol y droga. Además , el cumulo de gente impedía el paso y aumentaba el calor.

Ali me cogió de la mano hasta llevarme a la barra , una vez allí , cada una tomó un asiento.

-Hola chicas , ¿qué vais a tomar? -nos preguntó la camarera mientras servía una cerveza.

-Tenemos Ron , Vodka , Larios... -nombró diferentes bebidas , de las cuales desconocía su sabor.

-A mi ponme un Ron Cola -dijo Ali sacando dinero de su cartera.

-Yo no bebo , gracias -respondí intentando que no sonara extraño.

-¿Estás de coña? , ¡es una fiesta! -exclamó como si no lo supiera.

A pesar de mi negación , pidió dos bebidas gesticulando con la mano. La camarera nos puso el alcohol en vasos de tubo al momento , dejando uno a cada lado de nosotras.

Sabía que no me lo bebería , pero aún así lo cogí en mis manos.

Mientras tanto , miraba por encima de las cabezas en busca del chico misterioso. Distinguí a borrachos , fumados , drogados y...

-¿Andy? -pronuncié su nombre en voz alta sorprendida a la vez que perpleja.

Se suponía que ella no vendría...

-Ali , ahora vuelvo -dejé el vaso en la mesa con cierta impotencia al igual que el asiento en el que estaba.

Abriéndome paso entre la gente , conseguí llegar hasta ella.

-¿Andy qué haces aquí? -cogí su brazo para que parara de bailar y me prestara atención.

-Zo... -alargó la última letra -recibí una llamada -rió sin gracia , estaba totalmente borracha , así mismo no entendí lo que quiso decirme. Lo único que sabía , era que ya llevaba aquí algún tiempo.

Y entonces , percibí un movimiento en uno de mis costados. En una de las esquinas , pude ver al príncipe de las sombras. Una capucha tapaba sus ojos dejando tan solo ver su nariz y sus labios  , en los cuales esbozaba una sonrisa sensual pero maliciosa,

Clavé mis ojos en él , en la sombra que creaba la tela sobre sus ojos , y fue entonces... , cuando sentí un escalofrío subir por mi columna.

Él , me había mirado.

-Andy , tienes que salir de aquí a que te de el aire -volví a prestarla atención cogiendola del brazo y pasandolo tras mi cuello para que se apoyara en mi y pudieramos salir.

-¿Donde crees que vas? -dijo una voz masculina agarrando a Andy por el lado contrario. -Ella se queda -su mirada me fulminó , era un chico al que no había visto antes.

-¿Eres idiota o que te pasa? , no puede ni sostenerse en pie -forcejeaba con él intentando que la soltara , pero su fuerza era mayor a la mía.

No conseguí nada , mi poca paciencia me llevó al enfado , y terminé empujándole. Pero desaté una pelea y me terminaron echando del bar , vetandome de nuevo la entrada.

Era increíble que nadie se diera cuenta de que aquel estúpido no estaba pensando con claridad.

-¡Joder! -grité con rabia cuando cerraron las puertas frente a mí.

No sabía volver a la universidad , y en el callejón no había nadie , excepto la oscuridad. Así que lo único que hice , fue sentarme pegada a la pared y contar los minutos para que la fiesta terminase.

Con la cabeza gacha y mis manos sobre mi rostro , me exalté al escuchar la puerta del bar abrirse de nuevo y escuchar unos pasos firmes y sonoros acercarse a mí.

-¿Q-quién eres? -pude pronunciar en pánico.

Tan solo veía una sombra acercarse , no podía evitar sentir miedo.

-El caos... , el hielo... , las sombras... -una voz ronca contestó disminuyendo el paso.

Solo necesitaba luz para no temer y en ese momento era lo único que no había.

Puede parecer estúpido tener miedo a la noche , pero me hace sentir insegura y recordar , recordar es lo que me hace temblar.

-No te tengo miedo -intenté sonar firme , pero las palabras me temblaban.

-¿No? -dio un último paso quedando a centímetros de mi cuerpo -estás temblando... -susurró en mi oido.

-¿Qué quieres? -mi respiración se agitaba cada vez más.

-Has jugado a encontrarme , ahora jugaremos a mi juego -colocó un mechón de pelo tras mi oreja.

Miedo , atracción... . sentía ambos a la vez , a pesar de ser contradictorio , a pesar de no verle...