Me desperté asustada, había soñado algo súper feo, me sentía desesperada.
Bueno hoy es fin de semana otra vez, así que me toca ir a casa de Tomás para hacer el trabajo.
Después de darme un baño, pues había estado sudando, y de haberme vestido, voy abajo y encuentro a mis papás conversando.
Me sorprende ver a mí papá aquí a estas horas, no me hago a la idea. Al llegar me observan y me sonríen, se ponen de pie para saludarme, están felices, me encanta, hasta es contagiosa su alegría.
- Te estábamos esperando. - Me dice papá Marcos
- Para que? - Me sorprendo un poco.
- Como que para que, pues para tomar el desayuno juntos.
- Oh si el desayuno, lo había olvidado jaja
- Ay mí niña. Donde tienes la cabeza.
Me hace un cariñito en la cabeza. Yo le sonrió y me encojo de hombros.
- Mari, ya puedes traerlo.
Ella se acerca para poner la mesa, una vez termina, se lo agradecemos y se retira.
Nosotros desayunamos juntos, conversando y aprovecho para comentarles sobre mí trabajo con Tomás y el permiso, ya que están de buen humor me costó poco convencerlos. Aceptaron solo por la tarea, pues es una responsabilidad hacerla.
Una vez terminamos, fui a mí habitación a preparar mis cosas y llamarle a Tomás para ver si quedamos en reunirnos. Él me dice que está libre así que acordamos que iría a su casa dentro de media hora.
Cuando estoy lista les aviso a papi Marc y mamá que ya me iré, entonces él se ofrece a llevarme, yo feliz acepté.
Al llegar espera a que Tomás abra la puerta y lo saluda y se despide con un gesto de la mano para luego marcharse.
Yo abrazo a Tomás y le digo que nos apresuremos para avanzar lo máximo posible y tener tiempo para jugar después.
Nos ponemos manos a la obra tan pronto como nos es posible. En menos de 4 horas ya estamos terminando el borrador, entonces solo nos faltaría revisarlo y hacerlo como tiene que ser.
El poco tiempo que nos queda decidimos ver una película, se trataba de una casi de terror, bueno no era de terror, pero a mí si me pareció. Se trataba de un grupo de chicos que se pierden por una selva y allí habían nativos que se comían a las personas, la verdad que sí fue horrible, pero no se vieron escenas tan fuertes, pues a nuestra no debemos ver esas cosas.
Se pasó el tiempo y justo cuando faltaba poco para que se termine la peli, tocan la puerta, la mami de Tomás va a abrir y resulta que es papi Marc que viene a recogerme. Nos despedimos de Tomás y su mamá y nos vamos.
***
A casa llego bastante cansada, fue un arduo trabajo. La verdad es que tengo mucho sueño.
Saludo a mamá, la verdad es que ya no quiero ni cenar, solo quiero ir y tirarme a la cama.
Pero ya que estamos juntos quiero aprovecharlo, así que decido quedarme.
Mientras cenamos, pienso en que estuve tanto fuera de casa, salí como a las 11:00 a.m. y estuvimos llegando de vuelta a las 7 y más. Hoy me tocó almorzar en casa de Tomás. La verdad es que no quería incomodar, se me había olvidado ese pequeño detalle, pero sé que la señora Cristina no tiene problema, me lo ha dicho, además ella me trata con cariño así que no desconfío de su amabilidad.
Cuando terminamos me despido de ellos y voy a la habitación a darme una ducha, luego me cambio la pijama y me acuesto a mí camita.
*
Me despierto muy asustada, otra vez soñé que me perdía, esta vez fue por una montaña creo, no lo sé. Debe ser por la película, que horror, no volveré a ver una parecida.
Enciendo mí lámpara y veo que son las 3:00 de la mañana, me siento cansada, con el cuerpo pesado. Ugg me costará volver a dormir.
Mientras ocupo mí mente pensando, recuerdo que pronto será mí cumpleaños, tendré 10 años. Estoy creciendo rápido, la verdad, ya no quiero hacerlo, no quiero que pase el tiempo. Me da mucha tristeza.
No quiero separarme de mis padres.
En eso, sin darme cuenta me voy quedando dormida.