La cena avanzaba perfectamente, el ambiente se había relajado y las risas por las anécdotas del tío Malcon en su viaje de fotografía eran épicas, aunque conocía ya varias de ellas, mi Madre y el tío Malcon tenían una relación desde hace unos 4 años, cuando una navidad el tío Malcon por fin se le declaro a mi madre y le pido salir formalmente en una relación, ese día la abuela se había declarado una casamentera exitosa, argumentando que no solo tenia buen ojo para el diseño de interiores, si no para las personas también, ella la mayor parte de la vida les había dicho que terminarían juntos que solo ellos no tenían la valentía de afrontar lo que les pasaba y darse cuenta que al otro le pasaba lo mismo y si era muy parecido a lo que siempre nos han dicho a Nick y a mí.
Por años había estado construyendo mis propias hipótesis, la primera o la abuela a todos sus casos como casamentera les decía lo mismo, o simplemente estaba realmente convencida de que las Jones habíamos nacido para estar con los Taylor, como en muchas ocasiones lo había dicho.
Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de una copa, centre mi atención en dirección a el ruido, el tío Malcon se había puesto de pie para lo que parecía decir algunas palabras.
-Gracias a todos por su atención, quiero decir algunas cosas esta noche y me alegra mucho tener a toda mi familia reunida.
Todos nos miramos unos a otros, todos estábamos intrigados, todos menos los abuelos, la abuela tenia una gran sonrisa en la cara, y el abuelo destellaba orgullo de sus ojos, miré a mi madre que estaba tan interesada en lo que el tío Malcon quería decir que fue entonces cuando lo entendí.
-Como sabes mi último proyecto fotográfico, era captar la belleza del mundo, he viajado por lugares que jamás imaginé, encontrando la belleza que nadie jamos creyó que pudiera existir en esos lugares, fue un viaje un tanto largo, en donde estuve separado de las personas que amo por un tiempo, y estar aquí de nuevo me hace muy feliz.
El tío Malcon hizo una pequeña pausa antes de continuar, miro a todos en la mesa, pero se centro en mi y en Nick que se encontraba sentado a mi derecha.
-En mi viaje entendí, que hay cosas que simplemente son por que deben ser y que no importa cuánto queramos evitarlo será, cuando dejamos de luchar contra eso, empezamos a ver la magia que hay detrás, la fuerza que tiene y la paz que da.
El tío Malcon son sonrió con su típica sonrisa que decía escuchen lo que digo se de lo que hablo, y entonces se giró para tomar la mano de mi madre.
-Yo hace 4 años deje que las cosas fueran como debían ser, y mi vida se lleno de magia y paz por completo, Irina, tu llegaste a esta casa a llenarla de luz, me enseñaste a ver la belleza de la vida en lo inesperado, en lo poco común y en lo que pocas personas ven, me enseñaste que la magia de la vida esta en las cosas mas pequeñas y en las personas que amamos.
Mi madre nos dejaba de sonreír, mientras le acariciaba la mano, la escena era de película, amaba ver a mi madre tan feliz y al lado de alguien tan bueno como el Tío Malcon.
-Es por eso he decidido ponerle tu nombre a esta exposición, por que quiero que todos vean lo que tu me enseñaste a ver, y que sepan que la inspiración de mi trabajo es la mujer mas maravillosa que la vida a podido poner en mi camino y que es la mujer con la que espero pasar el resto de mi vida.
Los ojos de mi madre se abrieron tanto que por un momento pensé que se saldrían de sus orbitas, el Tío Malcon se está arrodillando frente allá, mientras sacaba un pequeña caja de su bolsillo.
-Irene Jones, ¿me arias el honor de ser tu esposo?
Mi madre empezó a llorar mientras asentía con la cabeza, en cuanto tuvo el anillo en su dedo de abalanzo sobre el y lo beso mientras repetía una y otra vez que sí, todos aplaudimos felices y emocionados por la gran noticia, nos empezamos a mover para festejar a los nuevos prometidos, entre toda la algarabía sonó mi teléfono.
-Bueno.
Responde sin mucha importancia, aun mirando fijamente a los novio, cuando escuché la voz de Sam fue cuando recordé que había accedido a ir con el por una copa.
-Emma estoy afuera de la casa de tus abuelos, que es toda ese ruido, ¿todo en orden?, ¿están discutiendo por tu renuncia?
-Sam
En cuanto esas 3 letras saliendo de mis labios, Nick se giró en mi dirección, la expedida sonrisa que tenía minutos antes desapareció y solo me miro con el seño fruncido.
-Dios perdóname, se me a olvidado por completo que iríamos por unas copas, no puedo irme ahora, el tío Malcon le ha pedido matrimonio a mi madre, lo siento se que es importante lo que debes contarme, pero no puedo irme ahora.
Mi madre se acerco lentamente, mientras acariciaba mi brazo para llamar mi atención, giré a verla y sin esperar pregunta solo respondí.
-Sam esta afuera, quedamos en ir por unos tragos.
Mi madre asintió lentamente mientras veía como la abuela se acercaba a nosotras, Nick seguía con el seño fruncido y la quijada apretada, que le sucedía ahora.
-Por que no lo invitas a entrar, el es como de la familia también, así que invítale a entrar.
Sugirió mi madre mirando a la abuela en busca de su aprobación, la abuela asintió tan animada como siempre.