Duele la soledad en la que me encuentro, por más que lo intento no llego a florecer, con cada estación que pasa mi vida se marchita. Si tan solo pudiera cambiar la línea del tiempo, volver a cuando éramos felices, pero ahora solo puedo ahogar mis penas en alcohol, el LSD no me hace efecto y me hundo cada vez más en el silencio.
Quiero que me lleve una tormenta a un lugar donde las zapatillas rojas no las quiera una reina rota, que los enanos no me pongan en un ataúd de cristal. Lo único que quiero es llorar, que alguien me quiera sin más, que la soledad me deje en paz.
Solo quiero sonreír, jugar como niña de tres, que nadie me vea crecer. Quiero gritar y que por fin alguien me pueda escuchar, que me abrace sin preguntar, que las pesadillas no vuelvan.
Soy una fracasada sin sueños por cumplir, una inútil en la vida de los demás, la piedra que todos desean sacar. Si una estrella fugaz me llega a escuchar espero que me lleve al mas allá, donde es imposible reencarnar.
Editado: 15.11.2024