Estaba oscuro, pero sentía que mis pies y manos se movían. Sabía que estaba buscando algo en esa oscuridad y de repente un sentimiento de triunfo me lleno al sentir que lo había encontrado. La luz volvió alumbrar mis ojos y me encontré con la cara de un niño que me mira divertido.
ꟷYa me atrapasteꟷdijo con una sonrisa
ꟷEs que soy la mejor en este juegoꟷrespondí orgullosa
Escuchamos la voz de alguien llamándolo. Noté como el temor recorría su cuerpo.
ꟷParece que algo pasoꟷdijo con temor en su vozꟷNos vemos despuésꟷSe despidió mientras corría hacia la persona que lo llamo, la cual se encontraba en el umbral del edificio que estaba enfrente del arenero.
Ahora me encontraba sola en el arenero. No me gustaba estar sola, porque la tristeza me inunda al recordar el motivo por el que estaba ahí. Miré hacia el gran edificio en donde hace instante había entrado mi amigo, en el entraba y salía gente vestida de blanco. Tenía miedo de que me llamen porque seguro me dirían algo que no quiero oír. Por ello me senté en la arena y apreté bien fuerte mi oso de peluche.
De la nada el escenario cambio. Volví a estar nuevamente en el arenero con el niño con quien jugaba antes, pero esta vez me encontraba abrazándolo.
ꟷYa no llores. Te aseguro que no se va a morirꟷle dije dándole fuerza a quien utilizaba mi hombro como pañuelo.
ꟷDicen que no va a despertarꟷrespondé con la voz entre cortada.
ꟷNo hay que perder la fe, siempre hay que tener esperanza. Mi mamá siempre dice esoꟷaseguré con una sonrisaꟷ. Ya vas a ver que se va a levantar.
El niño me miró con sus ojos rojos y en sus pequeños labios surcó una sonrisa. Eso me daba un poco de paz, no me gustaba verlo llorar.
Un nuevo escenario se presentó. Ya no estaba en el arenero ahora me encuentro en una habitación un poco oscura, donde había una cama en la cual una persona dormía. Aunque esta estaba conectado a muchos aparatos. No podía ver a la persona porque su cama estaba bastante alta y yo era muy pequeña. Lo único que podía ver era como el niño que siempre me acompañaba tomaba su mano con sus pequeñas manitos y la apretaba con fuerza mientras sus lágrimas surcaban su pequeña carita. Un grito desgarrador se escuchaba de su infantil voz
ꟷNo me dejes, no te vayas ꟷpidió el niño desconsoladoꟷme voy a portar bien, ya no voy a romper tus cosas. Pero no te vayasꟷ Siguió suplicando mientras sus lágrimas se impregnaban en el dorso de la mano de esa persona que estaba en la cama.
Sentía una gran presión en el pecho, yo también quería llorar. Sabía que no conocia a la persona que se encontraba en la cama, pero siento un gran afecto por ese niño que lloraba sosteniendo su mano. Puse mi oso de peluche en mi cara para que se borren mis lágrimas.
El escenario nuevamente había cambiado. Sabía que el motivo por el que me encontraba en ese lugar se había terminado. Un dolor grande me embarga. La persona por la cual estaba ahí ya no estaba.
ꟷMi abuelito se fueꟷle comuniqué con tristeza a mi amigoꟷ.Ya no vendré más.
El pequeño niño me miraba desilusionado. Empezó a mirar al piso haciendo que su flequillo tape sus ojos.
ꟷYa no voy a tener a nadie con quien jugarꟷdijo en tono triste
Sabía que la persona por la que él estaba, aun no se había ido. Por ello él se tiene que seguir quedando. Aun había esperanza
ꟷMi mamá les dio nuestro número a tus papas. Así que seguramente vamos a encontrarnos para jugarꟷle aseguré con una sonrisaꟷ. Pero por ahora para que no te sientas solo. Toma a Toby. Abrázalo cuando estés triste y cuando nos volvamos a ver me lo devuelvesꟷ extendí mis manos con mi peluche en ellas hacia él.
Él lo tomó y lo abrazó. Se veía un poco feliz y yo a pesar de mi tristeza por mí perdida, también me sentía de esa manera, ya que lo volvería a ver. El niño se acercó más a mí hasta estar tan cerca que pude sentir su respiración y en un rápido movimiento posó sus labios en los míos. Me quedé petrificada por tal acto. El beso que solo habrá durado tres segundos terminó. Y yo aun no sabía qué decir, vi la cara del niño la cual ahora estaba toda roja.
ꟷPor favor cuando nos volvamos a ver, se mi noviaꟷdijo en tono muy bajo.
Él no espero ninguna respuesta mía y salió corriendo hacia el edificio. Salí de mi aturdimiento y grité algo, pero no sabía que era. Lo único que sabía era que él dio la vuelta y con una sonrisa me dijo POLO.
Mis ojos se empiezan abrir y ví como la luz alumbraba mi habitación. Me senté en mi cama, rememorando el sueño que acababa de tener. Bueno, en realidad no era ningún sueño. Solo eran recuerdos de cuando mi abuelo fue internado hace doce años atrás. En ese entonces solo tenía cinco años y solía jugar con otro niño en un arenero que había en el hospital. No recuerdo mucho su cara y tampoco recuerdo su nombre. Aunque mis sueños siempre terminan cuando él gritaba Polo. Así que solía llamarlo así. Tenía estos sueños de vez en cuando, pero últimamente se han vuelto recurrentes.
Siempre me había preguntado que paso con él ¿La persona que estaba en esa cama habrá muerto? Había intentado hacer memoria sobre quien era esa persona a la cual el niño lloraba, pero era inútil. También le había preguntado a mi mamá, pero debido a la muerte de mi abuelo quien era su padre, ella no recordaba nada además de su dolor. Así que mi búsqueda había sido inútil. Aunque eso nunca había hecho que dejara de pensar en él. Algunas veces me pregunto ¿Se acordará de mí? ¿Habrá guardado mi peluche?¿Cómo será ahora? ¿Dónde estará? Recuerdo que espere a que él llamara, pero eso nunca pasó. Supongo que fue la ilusión de una niña al tener "su primer amor". Ariel no fue un buen primer novio, por ello siempre me digo a mi misma que mi primer novio fue Polo. Había idealizado tanto a ese niño que algunas veces pensaba en que lo encontraría y sería el chico perfecto, lindo, inteligente, deportista y un caballero.
Todo lo contrario, a cierto idiota que conocía. Ah dios, otra vez estaba pensando en él. No sabía qué me pasaba últimamente, antes ni lo registraba y ahora siempre lo tenía presente. Desde nuestra hermosa charla ya había pasado una semana. Y como prometí no le había vuelto a dirigir la palabra. Pero, aunque lo niegue mis ojos siempre lo andaban mirando. Lo veía hasta cuando estaba en casa. Al entrar a Facebook o a Instagram lo primero que me salía eran fotos de él. No era que Marco tuviera alguna red social, pero yo al ser amiga de Luis en Facebook y seguirlo en Instagram me encontraba con sus fotos con Marco. Bueno, para ser sincera mayormente eran fotos de Marco. Luis le tomaba fotos a cada rato y las subía, había de cuando estaba jugando futbol, de cuando estaba con sus amigos, de cuando estaba comiendo, solo falta de cuando se estaba bañando y toda la vida de Marco seria publicada en internet. Y lo peor de todo eso eran los comentarios que le dejan. "Hermosa pareja" "Que bueno que está tu novio" "Que viva el amor" "Buena Luis". No era que me pareciera mal que fueran novio y toda la cosa. Pero, ¿era necesario publicar cada momento juntos? No mejor dicho ¿era necesario que Luis saliera con Marco? Antes estaba contenta porque Luis lograra salir con su Crush pero ahora... algo había cambiado. Supongo que debe ser porque Luis me caía súper bien, pero Marco era otro cantar.