En una escala de uno al diez ¿Cuánto te amas en verdad? El amor propio es más que una frase ME AMO a mi mismo, suena sencillo e incluso hasta algo cliché, sin embargo, es un poco más complejo y complicado de lo que suena y a Emma le demoro cinco largos años y muchas cicatrices en el trayecto para darse cuenta de lo que de verdad ella vale. Emma es una joven de veintidós años que sufrió mucho antes de aceptar y entender lo que de verdad valía le pena, pero el recuerdo de la increíble y dulce Emily la seguía a donde vaya, las constantes pesadillas que la atacan por las noches eran fiel reflejo de aquello que no la dejaba en paz esa era su consciencia, pero un día apareció el tan guapo como arrogante, porque si Emma tenía el amor propio reconstruido y en altísimo nivel Owen lo que tenía era un ego que llegaba hasta las nubes, pero tenía que llegar una mujer PERFECTAMENTE IMPERFECTA a poner su mundo de cabeza y le haría entender quiera o no quiera la diferencia entre amor propio y un ego inflado por tanta proteína. Será una lucha de poderes, una lucha donde cada uno busca tener la razón, lo que ellos laman odio inmediato yo lo llamaría una flama a punto de explotar, pero ¿Quién caerá primero? Como dicen “Más rápido cae un hablador que un cojo” En esta historia ¿Quién es el hablador? La obstinada y aguerrida Emma con un pasado que desconoce, pero que sabe que la atormenta o el egocéntrico y maniático del orden Owen que, aunque por fuera es rudo y superficial por dentro no es más que un hombre que vive con la culpa de haber dañado a un ser inocente.
EL AMOR NO CONOCE DE TALLAS, NO CONOCE DE PASADO, SOLO VE EL PRESENTE PENSANDO EN UN FUTURO ninguno de ellos pensó que terminaría sintiendo lo que sintieron, paso de ser una estupidez a ser algo real, pero cuando las caretas se caen ¿Quién saldrá más lastimado en esta historia?