Capítulo 5 - Alma
Creo que primeramente debo terminar este resumen de los libros para tener una base de donde partir para cambiar los hechos de la historia.
En el reino mortal hace unos 200 años los monstruos invadieron todo el territorio, miles de personas murieron a manos de feroces bestias que llamaban Harúva. Estas bestias eran enormes, horribles y lo peligroso de ellos era que con una mordida podían descomponer todo el cuerpo de una persona.
Los Harúva mataban por diversión, los seres humanos no eran su fuente de alimento. Por lo que había leído de la historia se alimentaban de los rayos lunares así que toda esa matanza era parte del entretenimiento de aquellas bestias. Eran grandes, con brazos y piernas, parecido a un ser humano pero la cabeza de un animal... me da hasta escalofríos que esas cosas vuelvan a aparecer en el libro pero de eso se trata... evitar que todas esas cosas malas sucedan.
Para acabar con esa raza de bestias, nacieron los Reyes de Arajere. Cada uno representaba una estación del año: Jasy, rey de las tierras de Araro'y, encarnaba el invierno; Kuarahy, rey de las tierras de Arahaku, simbolizaba el verano; Amaru, rey de las tierras de Ararokuégui, representaba el otoño; y, finalmente, Mainumby, reina de las tierras de Arapoty, personificaba la primavera.
Creados por un Dios, estos reyes fueron dotados de poderes especiales y acompañados por magos en cada tierra, quienes manejaban magia acorde a la estación que gobernaban. Juntos, enfrentaron a los Harúvas, logrando extinguirlos tras más de cien años de ardua lucha.
Debieron entrenar a los magos de cada reino y a sus guardias, muchas de sus vidas fueron perdidas en el proceso. Por lo que pudimos ver en la Historia, Kuarahy fue uno de los reyes más afectados, su gente moría día tras día y liderar el campo de batalla terminó siendo algo traumático para él. Esa es una de las razones por las cuales Yeruti simpatiza con él.
Pero si vamos más allá, creo que los cuatro reyes sufrieron. Fue una larga lucha, sin descanso y para colmo estaban obligados a terminar con ella.
Los reinos de Arapoty, Arahaku, Ararokuegui y Araro'y, estaban en otro tipo de dimensión. Una persona solo podía tener acceso a alguno de los reinos si poseía sangre correspondiente a la línea sanguínea de su Rey, si conseguían un guía autorizado, o con una medalla que servía de pase. Yeruti tenía la medalla que Kuarahy le había dado por eso podía pasar por los portales de cada reino sin ayuda de nadie.
Aunque cada uno de los reinos estaban apartados del Reino mortal, ellos fueron creados por un Dios con el propósito de proteger a los humanos. Al momento de la creación éste le arrebato el corazón a cada uno de ellos y los dejó en manos del Rey Mortal para que ellos se vean obligados a ayudar.
Me pareció algo cruel cuando había leído esa parte pero el Rey Amaru había confesado una vez que de no ser por eso no hubiese participado en la guerra contra los Harúva.
El corazón no era lo primordial para su supervivencia, en realidad terminar con la vida de un Rey solo podía ser de mano de una espada de sus hermanos. Como vimos en el final del libro, Jasy muere a manos de Kuarahy.
El corazón de ellos es su karakú, la parte principal, es la fuente en donde su poder se encuentra. Y también el lugar más sensible por lo que al principio cuando los reyes pusieron resistencia fueron torturados. Sus corazones fueron estrujados, cortados y quemados sin tiempo a un respiro para que entendiesen que no tenían opción, debían ayudar o serían torturados toda su vida.
La promesa que habían hecho los cuatro reyes con el Rey mortal era que luego de exterminar a los Harúvas sus corazones serían devueltos. Y aunque el día en donde aquellas bestias padecieron por fin llego... el Rey Mortal decidió quedarse con sus corazones por si otro ataque surgía en el futuro... cosa que llega a suceder ya que es la trama principal del libro.
Pero volviendo a la actualidad, el nuevo Rey quiere el poder absoluto, quiere despertar a los Harúvas y someter al Reino entero.... y también a los reinos fuera de Arajere. Eso es lo que Yeruti y los demás trataban de evitar pero todo se fue a la mierda debido a ese triangulo amoroso...
—¡Tita! ¡Tita! —Grita mi sobrina entrando a mi habitación. Cierro mi cuaderno y levanto la vista. La pequeña tiene dos trenzas que la hacen ver adorable.
Me levanto de la silla para poder sostenerla en brazos.
—¿Qué pasa pequeña?
—Mamá no quiere darme un hermanito.
Casi suelto a la pequeña del susto.
—¿Qué? —Ella coloca los labios en un puchero y aunque la estoy sosteniendo se las ingenia para cruzarse de brazos.
—Lala va tener un hermanito —Suspira dramáticamente—. ¿Por qué yo no puedo?
Dios me libre de tener otro niño en esta casa.
—Pequeña, los hermanitos son un poco... mmm, ¿Difícil de conseguir?
—¡Pero no es justo! Lala tiene papá y ahora hermanito ¿Por qué yo no?
Eso me rompe el corazón al instante. Si encuentro al patán de su padre juro que lo mataré. Fue novio de mi hermana por siete años y apenas se entero que mi hermana estaba embarazada se esfumo de la tierra.
Este pequeñito rayo de sol está mejor sin ese imbécil pero Mabel también necesita de una figura paterna. Muchas veces en los últimos meses ha intentado juntar a su madre con algún extraño guapo que ve cuando salimos juntas.
—No te preocupes Mabi, ya verás que tu mami pronto encontrara a alguien que la hará sentir la mujer más especial.
—El señor pizza está bonito. —Oh, el repartidor.
—¿Lo llamaste papá al pobre verdad?
Sus mejillas se sonrojan pero sin vergüenza no aparta la mirada.
—¡Quiero un papi bonito!
—¡Mabel! — Mi hermana nos hace pegar tremendo susto con su voz—, si era solo un niño —Se tapa el rostro con las manos—, como mucho debía estar por cumplir los veinte.
No puedo evitarlo, una risita escapa de mis labios y mi hermana me fulmina con la mirada.