ULISES…
Vueltas y vueltas en la cama y no logro concentrar el sueño, que pasa conmigo, miro el reloj 4:10 am, necesito salir de aca, me levante de la cama, di unas cuantas vueltas en la habitación mirando el techo con las manos en mi cuello, no creo poder dormirme, y sigo aquí recordando que solo hace un rato fui una mierda con Esmeralda, quizás eso sea lo que me tiene asi. Asi que me despoje de mi ropa y me metí en la ducha, Salí lo mas rápido posible, me puse lo primero que encontré en el armario, pase mis manos por mi cabello y tome las llaves, al abrir la puerta, me encuentro a mi madre parada frente a mi puerta.
_ Que haces vestido asi a esta hora Ulises. Pregunto algo confundida.
_ Voy de salida mama, no me esperes en el almuerzo. Bese su frente y la esquive, pero ella me detuvo tomando mi brazo.
_ Hijo, necesito que hables con tu padre, ya casi no esta en casa, y tu tampoco estas aquí, voy a parar en loca aquí sola Ulises.
_ Te prometo que hablare con el, te amo. Asi que Salí de casa, con ganas de destruir algo y sacar toda esta rabia que tenia adentro, conduje hasta el gimnasio del cual era dueño, estaba listo para desquitarme.
LUEGO DE UNA HORA…
Estaba cansado de golpear la pera de boxeo, y seguía con ese nudo en la garganta que no podía expulsar.
_ Y que hace tan temprano el señor aca. Había llegado Mauricio, el cual no sentí llegar.
_ Tratando de liberarme un poco y tu te caíste de la cama. Pregunte igual de serio que antes.
_ No, VINE A TRABAJAR. Exclamo algo intrigante. Pero ya hablando enserio que haces aca hombre. Se coloco enfrente de mí y sostuvo el saco de boxeo.
_ No pude dormir anoche.
_ Y eso.
_ Noce, me imagino que fue por el dolor de cabeza que tengo desde ayer. Retire los guantes, y tome mi botella de agua.
_ Me imagino que ese dolor de cabeza tiene nombre y apellido, como ESMERALDA COX, deberías aceptar que… no había terminado de hablar cuando lo interrumpí, me había dado en el punto exacto.
_ ACEPTAR QUE, EH, ACEPTAR QUEEE, QUE ESMERALDA ME TIENE LOCO, que desde que apareció lo unico que hago es ponerme como un IDIOTA, que ayer tire todo a la MIERDA, por cobarde, por imbesil.
Golpee lo mas fuerte que pude el saco de boxeo, estaba enojado, frustrado y confundido.
_ Dime que tengo que aceptar Mauricio. Pregunte cansado tirándome en el suelo.
_ Creo que eso es todo amigo. Estrechándome la mano para levantarme.
_ Pero ya no la volveré a ver, ayer la cague completamente, asi que seguiré como el lobo solitario. Eso me provoco una risa de medio lado, mientras que Mauricio me miraba con los brazos cruzados.
_ Ya veras que no es asi y tu lo sabes.
ESMERALDA…
_ Con que allí viene la carcelera. Tenia que aguantarme los chistes pesados de mis amigas en el colegio, mi rostro mostraba que mis noches desde que conocí ah Ulises no eran del todo normales.
_ Cállense y déjenme en paz. Tomando asiento en uno de los bancos del patio del instituto.
_ De veras que estas mal Esmeralda, ósea no puedes ver al tipo este porque hasta en la cárcel llegas a parar, asi de buenote esta.
_ No seas Ridícula Rebeca, solo que el tipo esta loco y me tenia mis cosas ni modo que las dejara con el, debería estar en estos momentos en un manícomió.
_ TIENES QUE MOSTRARNOS AL TIPO. Dijo Camila con mirada curiosa.
_ NO, ni loca, me prometí a mi misma no volverlo a ver nunca mas en mi vida, y eso voy hacer.
_ Con eso lo dices todo amiga, Cami, el tipo de Esme esta mas bueno que comer con las manos. No paraban de reir.
_ Mejor me voy, no tengo ánimos de reírme y mucho menos de eso. Me levante y me dirige hasta el baño, y para completar mas mi mañana me conseguí con la menos que quería ver.
_ Valla, valla, con que aquí tenemos a la chica pandillera.
_ No estoy de ánimos hoy para discutir contigo victoria, si quieres que alguien te preste atención ve a la plaza.
_ No cariño, para nada, solo dejame decirte, que para la proxima mi madre no va a tolerar tus ridiculeces ni tus metidas de patas, porque me imagino que no faltara una sorpresa de nueve meses.
ESTA VEZ SI QUE LA MATO.
_ Óyeme una cosa, sifrina barata, ( la tome por el brazo y la enfrente) tu a mi me respetas me entendiste, te voy a dar un consejo si quieres que tus prótesis dental te perduren hasta que te pudras de lo vieja, es mejor que no te metas conmigo, mira que cargo unas ganas de acabarle la cara a una Sifrina como tu, asi que déjame en paz.
_ Sabes una cosa, Esmeraldita, Ulises Egan No es, ni sera para ti, porque aunque tu no lo creas, ese muñeco que vi ayer NUNCA oyeme bien NUNCA te va a parar.
_ PUES COMETELO GORDA. Salí de la sala de baño furiosa, de donde conoce Victoria a Ulises, quizás lo vio ayer cuando salio de la comisaría.