Capítulo 30.2

Capítulo 30.2

Nuevo día

Me desperté un par de horas después… Me fui al baño para ducharme, al salir note en el espejo que tenía algo en el cuello… Un chupón, sonreí de inmediato… Comencé a hacerme el desayuno y Cantaba mientras lo hacía… Luego tome mis pinturas y un lienzo y comencé a plasmar como me sentía en aquel momento… y vaya que me sentía completamente satisfecho, alegre, ¡estupendo!…

Ya cuando era medio día recibí un mensaje de Peyton… Me acaba de responder el mensaje que le deje hace unas horas… Se acaba de levantar…

–Hola

–Hola

– ¿Sí pudo dormir?

–Sí… Me acabe de levantar…

–Y ¿no le dijeron nada?

–No… Nadie sabe…

–Tienen el sueño pesado…

–Sí –Río.

–Oye… Me dejaste una huella…

– ¿Una huella?

–Sí…

– ¿Cómo así?

Me tome una foto del cuello y se la envíe…

– ¿¡Hay enserio le hice eso!?

–Me reí–, Sí…

–Perdón…

–Tranquila… Me gusta…

–Lo siento enserio… Qué pena…

–Tranquila, en un par de días se borrara…

–Sí… Esperemos…

Pero lo que no se borrara será el recuerdo de esta noche…

–Y ¿Qué haces?

–Nada… Esperando el desayuno…

– ¿Desayuno? Almuerzo querrá decir –reí.

–Por eso, los dos–río.

Casi todo el día estuvimos hablando por momentos, molestábamos, en otros pocos recordábamos lo que habíamos hecho… Hasta que llego la noche…

Ella mando un enlace, era un video, un poema…

–No sabía que le gustaba la poesía…

–Sí, es que él tiene algo que…

–Sí… Ya lo había escuchado antes.

–Sí, tiene una forma de transmitir… Que vaya…

Quise intentar algo nuevo… Sé que no era bueno para esto pero… Aun así quise intentarlo por ella…

Tome un lápiz y una hoja y comencé a plasmar palabras, párrafos cortos… Luego de un rato había terminado, no sé qué tal me había quedado, tome el celular y comencé a grabar un audio…

Decía así:

Somos… La palabra que no usamos en nuestro vocabulario…

No se puede afirmar lo que no existe, pero… No podemos negar la existencia de lo que somos… Aun cuando somos nada, algo somos… Puesto que en la nada hay algo, aunque sea tan solo el sonido de la palabra en el viento…

Somos aquello que hace nuestras almas se unan, se separen, se peleen o entrelacen…

Somos la octava nota musical, el Do que se repite pero que no hace parte de la escala…

Somos el suspiró que llega repentinamente y solo dura un momento…

Somos el segundo que acaba de pasar, efímero en el tiempo…

Somos esa risa, esa mirada, esa caricia incluso hasta aquel beso, que nos hace ser algo, que en realidad no somos…

No somos sería equivocado pero más lo sería el decir que somos…

Simplemente somos… Lo que no somos…

Ella escucho el audio… Estaba a la expectativa de cómo reaccionaría…

– ¡Wow! ¿De quién es?

–Es… Tuyo…

– ¿Cómo así?

–Me pregunto de quien es… Y te respondo que es tuyo…

–Ah, pensé lo busco o algo así…

–No… Lo acabe de escribir para ti…

– ¡Me encanto! Está muy lindo… ¡Gracias!

–Tú me inspiraste…

Me propuse entonces a partir de ese día, que cada día que pasara junto a ella… Le daría un poema… No sé qué pase en el futuro… No sé qué nos depare el destino, a lo mejor nos tiene para estar juntos… A lo mejor somos pasajeros en la vida del otro…

Pero nada de esto importa, no importa si mañana ya no estoy a su lado… Aunque haré todo a mi alcance para no separarme de ella una tercera vez… Quiero permanecer a su lado, enamorarla y en el proceso me enamoro yo más también… Quiero hacerla la mujer más feliz de este mundo, quiero vivir miles de experiencias juntos, quiero recorrer el mundo tomado de su mano, visitar, correr, conocer… Quiero amarla cada día más que el anterior, no me veo en un futuro con alguien más que no sea ella… Quiero intentarlo de una y mil maneras, no hasta que salga bien una vez… Sino hasta que deje simplemente de salir mal… Prefiero mil veces pelear con ella, que hacer el amor con otra… Sé que es muy apresurado todo este pensamiento, sé que no debo pensar en un para siempre, aun cuando ni siquiera la tengo… Pero es que no quiero un para siempre que se acabe mañana… Quiero ir poco a poco, un día a la vez y que ese poco a poco sea un infinito...