Pistas del más allá.

Pistas del más allá.

• ¿Podes creer Matilde? – protestó ante su esposa que lo recibió con un mate amargo – dos horas de sesión con la loca esa. –

Termino el mate y se lo devolvió mientras se dirigía al ordenador del escritorio.

• Años enseñando criminalística, LA CIENCIA al servicio de la lucha contra el crimen, LA CIENCIA, así con mayúsculas y todo ¿Para que? Para terminar pidiéndole ayuda a una “bruja” – se escandalizó.
• Bueno José, los tiempos cambian. Siempre decís que no se debe descartar nada –
• Si, si, pero no sé, esto me parece demasiado. Esperar que la victima nos envié un mensaje del mas allá diciéndonos donde encontrar al asesino…No, sé me sigue pareciendo mucho –

Como toda respuesta Matilde se encogió de hombros y se fue a atender al nietito, que esa noche dormía en casa.

Mientras tanto José se sentaba al ordenador tecleando la clave de acceso al sistema policial paracontinuar revisando expedientes, tenia que dar con algo que lo ayudara a desentrañar el misterio, y no descansaría hasta lograrlo.

En eso estaba cuando la quietud del hogar y el cansancio lo alcanzaron.

Se despertó sobresaltado.

¿Cuánto tiempo habría dormido?. Con los ojos aun entrecerrados consulto el reloj y respiró algo más tranquilo, tan solo había sido una “cabeceadita”, unos de 20 minutos.

• Bueno a seguir. – se dijo

Mecánicamente se levantó de la silla, fue al baño a lavarse la cara para despabilarse y luego a la cocina por una tasa de café.

Mientras lo preparaba le vinieron a la memoria sonidos, como balbuceos, risas, golpeteo de teclas…seguro un sueño mientras dormía.

¡Un sueño!, se alegró. Es que cuando un problema lo aquejaba y no conseguía darle respuesta, a veces sucedía que la solución se le presentaba en sueños…No seria la primera vez que le pasaba.

La ciencia moderna tenía una explicación para esto…

• “Es que durante ciertas etapas del sueño la conciencia pierde el control de la mente y esta, liberada, fluye sin ataduras tras la solución del problema…” - o eso decían.

La gente de antes, menos instruida y con más fe, decía que era por inspiración divina. Que los ángeles aprovechaban el sueño para comunicarse con los hombres.

Comunicarse con los hombres durante el sueño…

¿Por qué no? Se preguntó, esperanzado, en una de esas la “médium” estaba en lo cierto y la occisa había tratado de comunicarle algo. Casi a la carrera volvió al ordenador.

Podía ser que dormido hubiese tecleado la respuesta.

Apresurado miró la pantalla.

…Si lo escrito era una respuesta al misterio, este tan solo se había cambiado por otro y estaba alli en la pantalla.

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¿Qué habría querido escribir? ¿Qué mensaje le llegaba del más allá?

Apoyando los codos en el escritorio y la cabeza entre las manos, volvió a enfrascarse en el trabajo, tenia que encontrar una solución y bien podía ser que la tuviera ante los ojos, pero ¿Cómo averiguar cual era el mensaje?

La abuela, con el nieto en brazos, se asomó a la puerta a mirar que hacia el abuelo…llevaba un buen rato enfrascado en ese caso. Y seguía. Aun faltaba para la cena, lo llamaría más tarde

• En fin, ese es su trabajo y lo que le gusta -le dijo al niño que le sonreía pícaro. queriendo librarse de ella para seguir correteando.
• Espero que no le hayas hecho un lio al tocar el teclado. – comento la abuela - Vamos, la mamadera ya debe estar lista.–

© Omar R. La Rosa

Nota: Se agradeces la inestimable colaboración del Facu, que redacto el mensaje del más allá.