Algunos psicólogos aseguran que la crisis de los 40´s o crisis de la mediana edad afecta de manera diferente a hombres y mujeres. Las personas en esa situación hacen un análisis entre lo que siempre se ha querido ser o tener y lo que se es y se tiene realmente; cuando la diferencia es significativa puede haber alteraciones en el comportamiento.
Ciertos hombres necesitan reafirmar que siguen siendo atractivos y tienen capacidad de conquista. Las mujeres suelen ver cambios en su aspecto físico y notan que ya no lucen tan jóvenes lo que puede ocasionar baja de autoestima entre otras cosas.
En una relación de pareja, es posible que alguno de los dos esté acostumbrado a dar por hecho que el otro siempre estará ahí y busque un nuevo reto.
Cuando ErdoSü entró a la oficina de Yunuen después de su llamada no imaginó lo que encontraría. Éste puso en sus manos el acuerdo de divorcio.
–Te pido que leas a detalle antes de firmar, si tienes alguna duda te explico, de igual manera si quieres modificar o agregar algo podemos conciliarlo.
ErdoSü leyó entre líneas y al descubrir de qué se trataba lo rompió en pedazos.
– ¿Qué es ésta tontería? –exclamó furioso.
–Disculpa, creí que sabías. De cualquier manera debo agilizar los trámites por petición de Cloe –informó Yunuen.
– ¡Por favor espera! No des continuidad a ese documento, necesito tiempo, quizá unos pocos días –ErdoSü salió rápidamente de la oficina sintiendo que el mundo le caía encima.
El ambiente en la casa había cambiado y los gemelos lo percibían. La familia completa se sentó a comer y reinó un silencio incómodo.
–Los niños y yo nos mudaremos a Brasil en menos de 15 días, viviremos allá por lo menos un año –informó Cloe con frialdad.
ErdoSü se quedó sin habla, aún no había podido platicar con ella sobre su petición de divorcio.
–Yo no quiero irme –se quejó Alí.
– ¿Suré y Nahué pueden ir con nosotros? –preguntó Nebi.
–No, no pueden –respondió Cloe.
–No quiero ir a una escuela diferente y ser el niño nuevo –argumentó Alí.
–Todo saldrá bien –prometió su madre acariciándole la cabellera.
Al terminar de comer, los pequeños salieron a jugar al jardín.
–Iré con ustedes –anunció Rosario.
Cloe habló de inmediato a la empresa para que incluyeran el boleto de avión de su suegra.
ErdoSü permaneció en silencio. Cloe le extendió el formato para tramitar la salida de los niños del país, él lo leyó y lo puso en la mesa.
Parecieron olvidar que Rosario estaba presente.
–Estás tomando decisiones precipitadas y tú no eres así –aseguró él–. Necesito un poco de tiempo, mi cabeza es un caos, no estoy preparado para afrontar los hechos y sus consecuencias. Te recuerdo que nunca me he separado de los niños desde que nacieron. No me castigues de esa manera. Además no deseo divorciarme, nunca te había fallado, creo no he sido mal padre o mal esposo.
Cloe habló con frialdad sin voltear a verlo.
–No hay marcha atrás. Falta poco para el viaje así que por favor firma el formato.
–No lo haré –afirmó ErdoSü.
Rosario intervino.
–Hijo, Cloe necesita ese espacio, tal vez es lo mejor por un tiempo.
–No madre –repitió él.
Cloe no podía ver a su esposo a la cara así que bajó la mirada y habló como para sí.
–En mi primer embarazo estuve tranquila y rodeada de amor, el resultado son esos niños maravillosos. La situación ha cambiado pero haré lo posible por gestar a mi bebé en un ambiente de paz para que nazca con buena salud. Obviamente eso no será posible si permanezco aquí.
ErdoSü firmó el documento y se fue.
Bree había estado al pendiente de Cloe y los niños para ayudarlos en lo posible.
–Mi relación con Rahui se enfrió al enterarme de lo que hizo –confesó a su amiga mientras tomaban café en el jardín–. No soporto que me hable, mucho menos que me toque. Su presencia es como una burla.
– ¡Perdónalo! Es un ser humano íntegro –aconsejó Cloe–. Después de lo ocurrido debes amarlo y valorarlo más porque superó su naturaleza de hombre por amor a tus hijos y a ti. Nunca te ha fallado y es un maravilloso padre. No cometas el error de crucificarlo por el error que casi comete.
–Un coqueteo es infidelidad, besarse y tocarse mucho peor. ¿Y si lo hubiera hecho yo? Estoy dolida y furiosa. Para superar esto necesito tiempo. ¿Perdonarás tú a ErdoSü?
–Es muy pronto para saberlo. Lo amo por supuesto, no es algo que pueda cambiar de un día para otro. Sin embargo el que haya dicho que le gustaría poner en pausa su vida con nosotros me resulta imposible de digerir. Además ni siquiera hemos hablado, él dijo estar confundido y todo quedó en el aire. Cuando cierro los ojos lo imagino besando otros labios y tocando otra piel y es un veneno con el que no puedo vivir. Estoy tratando de ser fuerte pero el dolor es brutal.