-¡Sorpresa! - gritaron todos los chicos apenas abrí la puerta.
Con la boca entreabierta, les di pase a mi casa. Era sábado por la noche. Lo que menos me esperaba era esto.
-¿Q-qué hacen aquí? - cerré la puerta al entrar el último y les seguí hacia mi pequeña sala.
-Es sábado. Toca reunión de amigos - Jimin se sentó a lo largo del sofá más extenso.
-Y lo mejor de todo, hay pizza - Yeri alzó la bolsa con una sonrisa de oreja a oreja.
-Está bien - cedí tomando asiento en la alfombra - pero lamento que este lugar sea tan pequeño - sonreí apenada.
-Estamos bien y calentitos - Haechan se sentó junto a mí - eso es lo que importa.
-¿Alguien se ofrece a pagar la gaseosa? - Soojin se recostó al lado de Jimin.
Este sonrió y la apretujó contra su pecho. Ella, en respuesta, pasó su brazo por su cadera y acurrucó su rostro contra él.
-Yo invito - Jennie sonrió sacando su billetera.
-Ay, lo siento - Yeol finalmente habló con una sonrisa - olvidé con quién estamos.
-Ya - Jennie le lanzó una almohada.
Vimos esta caer en la cara de Soojin. Ella se quedó en un rostro neutro, para segundos después ponerse en pie lentamente con el objeto en sus manos.
-Ok - Jimin tembló -. Se prendió esto.
Soojin lanzó la almohada contra Haechan y este la esquivó, impactando en la mano de Jennie a la vez que salía volando su billetera.
-Woah, llueve dinero - Yeri cogió unos billetes.
-Hey, que son míos - Jennie trató de quitárselos.
-No tienen tu nombre - contestó frunciendo el entrecejo de manera muy tierna.
Yeol aprovechó el pánico y susurró algo a Haechan en el oído, quien rió travieso ante eso. ¿Qué se tramaban? Achiqué la vista mirándolos de forma sospechosa. Al parecer, se percataron de ello, pues me miraron cómplices. Chanyeol señaló la almohada a mi costado y alzó la suya. Me estaba incitando a lanzarle el objeto a Jimin que se hacía cariñitos con Soojin en el sofá.
Para qué negarme, sería divertido.
-Y... ¡ya! - grité, ambos las lanzamos.
Fue chistoso. La almohada cayó justo en el rostro del rubio cuando hacían naricitas. Soojin levantó el rostro tipo Samara y casi nos salta encima. Jimin la sujetó de la cintura riéndose y diciéndole tiernamente que se calmara. Le dio un besito en el cuello y ella se sonrojó al instante sentándose en un segundo con los ojos muy abiertos.
-Que tiernos - soltó Yeri.
-Que me devuelvas mi dinero - Jennie toqueteaba su hombro.
-No - se cruzó de brazos protegiendo su "pertenencia".
-Entonces tú pagas - se rindió sentándose junto a Chanyeol.
-Da igual, no es mi dinero - se cruzó de brazos sonriendo.
-Ahí sí es mío - rió Jennie con sarcasmo.
-Bueno, si quieren yo voy a comprar. La señora Im tiene una pequeña bodega abierta hasta las ocho - me coloqué un chaleco y una bufanda.
-Son las siete y cuarenta y tres - me avisó Soojin.
-No demoro - respondí sonriente y salí del lugar.
-¡Misuk! - Yeri me detuvo.
-Dime.
-Toma, para que lo pagues - me dio un billete.
-Oh, gracias.
-Me debes 100 wones - entró corriendo a mi casa.
Me acordé de Yuqi. Reí levemente.
Bajé las escaleras hundiendo parte de mi rostro entre la bufanda. Hacía frío esta noche.
-Buenas noches - saludé a la señora Im que barría la entrada -. ¿Cree que podría venderme una botella de CocaCola?
-Mirae, por supuesto - entró a su casa un minuto.
Guardé mis manos en los bolsillos de la chaqueta, sentí mis mejillas rojas por la temperatura.
-¿Chica Consejos? - Taehyung apareció con su abrigo, guantes y gorra puestos.
-Taehyung, ¿qué haces aquí?
-Vengo a comprarme unos snacks, estaba estudiando - se paró a mi costado -. Jiheon está viendo películas en Netflix.
-Está bien que se distraiga - sonreí.
-Aquí tienes - apareció la señora Im - una Seven Up.
-Eh... ¿gracias? - acepté dándole el billete.
-De nada, ¿necesitas algo Taehyung?
¡¿De él sí sabe el nombre?! Mi cara debió ser muy chistosa, pues el mencionado contuvo una risa.
-Dos Doritos, un Piqueo Snax y tres Papas Lay's.
-Ya vuelvo.
Nos quedamos en silencio. La gaseosa comenzaba a pesarme, por lo que tomé la palabra.
-Bueno, me voy.
-¿Tienes visitas? - me detuvo -. Desde el balcón vi como a seis personas entrar a tu casa.
-Sí, son los que trabajan conmigo en el restaurante como meseros. Querían reunirse y tomaron mi casa por sorpresa.
-Entiendo.
-Ten, Taehyung - la señora le dio lo que pidió y el chico le pagó.
-Gracias - agradeció a la señora y dio media vuelta hacia su casa.
Hice una pequeña reverencia ya que no podía despedirme con las manos y subí a mi piso. Cuando entré, me llevé una gran sorpresa.
No, de hecho, eso ya me lo esperaba.
-¿Quién rompió mi jarrón? - avancé hacia el objeto que yacía roto en el suelo.
-Fuenteovejuna lo hizo - Yeol hizo referencia al libro.
-Fue Haechan - Yeri metió otro pedazo de pizza a su boca.
-Soplona - Donghyuck le pegó suavemente la frente con su dedo.
-Bueno, no importa - me agaché para recogerlo.
-No, no, no - Jimin posó su mano sobre la mía -. No queremos que te cortes.
-Deja que lo haga yo - sugirió Soojin, Jimin también la detuvo y lo comenzó a recoger él.
Fui por una bolsa donde metimos los vidrios y los sacamos a la entrada.
-Lo lamento - se disculpó Haechan apenado.
-No, no. Está bien, igual lo iba a reemplazar - lo calmé.
-Entonces - comenzó Yeri - propongo que comencemos a jugar el karaoke que traje.
-¿Y cómo lo trajiste? - preguntó Jennie sospechando.
-Pues en tu auto - obvió terminándose la pizza.
Jennie solo negó con una sonrisa. Sí, ya se lo esperaba. Fuimos por las cosas y comenzamos a cantar. Era, según Jimin y como diría también Yuqi:
Todo un desmadre.
-BABY, WHY DON'T YOU JUST MEET ME IN THE MIDDLE? I'M LOSING MY MIND JUST A LITTLE. SO WHY DON'T YOU JUST MEET ME IN THE MIDDLE? IN THE MIDDLE OH-UH-OH OH OH~