Capítulo 8: El partido bajo la máscara

Frances Wilson levantó la mano para agitar su copa, las yemas de los dedos rozando el frío borde metálico. La sala del banquete era un maremágnum de voces, conversaciones, el tintineo de las copas, y todo el acontecimiento parecía cálido pero hipócrita. Echó un vistazo a la sala y sus ojos se posaron en uno de los altos cargos de la familia Carter con un claro objetivo en mente: Jason Harris, el asesor estratégico de la familia Carter.

Los latidos de su corazón se aceleraron ligeramente. Esta noche, en lugar de ser la segunda hija de la familia Wilson, era miembro de la élite empresarial. ¿La familia Carter? Cooperaría con ellos y los desmantelaría. El objetivo estaba claro: sacarle a Jason información privilegiada, especialmente sobre los movimientos empresariales de Alex Carter. La familia Wilson estaba en crisis, y el comportamiento de Andre Wilson empezaba a ser errático. Perturbar a la familia Carter podría suponer un resquicio de esperanza para la familia.

Se ajustó el traje y sus ojos se posaron en Jason ──traje negro, aura tranquila──, ¿quién dijo que el centro comercial no podía ser un campo de batalla?

──«Jason», dijo en voz baja mientras se acercaba, «Ha pasado mucho tiempo, y la fiesta de esta noche es un verdadero espectáculo».

Jason giró la cabeza y la vio, sonriendo ligeramente. La mirada en su cara que decía, «Bien, como si él debiera fingir ser amistoso,» era una que ella había visto demasiadas veces.

──«Frances, no esperaba verte aquí». Mantuvo la distancia, con un matiz de imperceptible cortesía en la voz. «Los Wilson son cada vez más populares, sobre todo en el sector del lujo».

Ella rió suavemente, pensando para sí misma, ¿a quién le importan los lujos en una escena como ésta?

──«Son sólo algunas pequeñas tácticas», respondió ella con suavidad, su tono oscuramente provocativo. «Sin embargo, la familia Carter parece estar haciendo también bastantes movimientos nuevos, especialmente en el sector inmobiliario».

Jason enarcó ligeramente las cejas, al parecer sin captar el sarcasmo de sus palabras, y en su lugar sonrió con suficiencia.

──«¿Lo dices como un cumplido?».

──«No creo que necesitemos hacernos cumplidos, ¿verdad?». Frances agitó ligeramente su copa, con un atisbo de desafío en los ojos. «Sin embargo, estoy bastante interesado en algunas de sus recientes adquisiciones, y he oído que hay un nuevo plan de inversión en el extranjero...».

En los ojos de Jason brilló un atisbo de alarma, pero lo ocultó rápidamente, sin cambiar su sonrisa.

──«Ya sabes, los asuntos de familia nunca permiten que se entrometan extraños, ni siquiera por una amistad tan estrecha». Con una pizca de coquetería en su tono, intentaba claramente reconducir la conversación a la zona segura.

Imperturbable, Frances barrió con la mirada a su alrededor, captando a Alex Carter no muy lejos. Ella tiró de la conversación de nuevo.

──«Hablando de eso, el heredero de la familia Carter está de moda últimamente». Sonrió levemente, pero su mirada era fría como un cuchillo. «Sus decisiones han cambiado el panorama de la industria, y todo el mundo especula si va a hacer alguna inversión innovadora».

Jason estaba visiblemente interesado en el tema, una sonrisa irónica apareció en la comisura de su boca.

──«Eres muy bueno eligiendo temas. Puede que tenga nuevos planes, pero que sepas que no soy el único que toma esas decisiones». Sonaba relajado, pero estaba claro que intentaba evitar revelar más.

──«Por supuesto», Frances rio suavemente, sus dedos golpeando el borde de su vaso, su voz sin prisa. «Sin embargo, como miembro de la élite empresarial, deberías saber cómo proteger tu ventaja y evitar que se filtre cualquier información desfavorable».

Jason frunció ligeramente el ceño, consciente de que estaba a punto de decir demasiado.

──«Qué casualidad que lo preguntes». Finalmente bajó la voz, como si se sintiera acorralado. «En realidad, hay algunos movimientos importantes en la familia de los que no estoy del todo seguro, sobre todo en lo que respecta a la decisión de Alex.» Miró alrededor de la habitación, parecía un poco inquieto. «Pero hace poco se celebraron algunas reuniones de alto nivel, sobre algunas de sus inversiones, que probablemente se anunciarán el mes que viene».

A Frances se le torcieron las comisuras de los labios, divertida. Sabía que había algo de verdad en aquello y, de todos modos, había conseguido algo lo bastante valioso.

──«Gracias, Jason.» Susurró, con los ojos desencajados. «Aunque saber esa información puede que no me ayude mucho. Eres lo bastante listo como para saber ocultar lo que sabes».

Un destello de vacilación parpadeó en los ojos de Jason, pero no discutió más, y la conversación terminó ahí.

Con una sonrisa en la cara, Frances se dio la vuelta con elegancia y se dirigió al otro extremo de la fiesta, pensando para sí misma: «Hmph, Jason, ya me has dado suficientes pistas por hoy. El resto, confiar en mi ingenio.

Después de la fiesta, Frances se asomó al balcón con Alex, la brisa fresca le rozaba la cara y le quitaba el ajetreo de la sala. No lo miraba a él, sino que su mirada se posaba en el horizonte de la ciudad a lo lejos. Los pensamientos se arremolinaban, pero una cosa estaba clara en su mente: todo lo que acababa de hacer había llamado la atención de ciertas personas.

──¿Me has oído? La voz de Alex era grave, con una pizca de sorna en el tono.

Ella giró la cabeza, con un destello de duda en los ojos, pero en el fondo de su mente sabía que él había percibido algo.

──¿Sabes lo que hice? Su tono era llano, pero con una pizca de provocación.

Alex no contestó directamente, sólo la miró, con una sonrisa burlona curvando las comisuras de los labios.

──«Siempre tan lista, digna de ser la heredera de la familia Wilson».

Ella levantó una ceja, una pausa sin aliento en su mente. Este hombre era tan molesto ──