De la manera más atenta permiso vengo a pedir,
para poderte expresar un poco de mi sentir,
la verdad es que me gustas mucho y no te lo podía decir,
pero hoy que me decidí a hablarte, quiero decirte,
que hace tiempo que estoy enamorado de ti,
que eres una mujer muy linda, muy especial,
y que no tengo palabras para expresar tu belleza
que se mete por mis ojos y trastorna mi cabeza.
Que siendo un hombre sensato soy de ti una pobre presa
mansa, débil e indefensa de tu esplendida belleza,
que derribó las barreras, los muros de fortaleza
para meterse en mi alma y acabar con mi tristeza.
En un momento tan breve ya perdí el razonamiento,
por no quedarme callado, por expresar lo que siento,
y ahora estoy a tu merced, como hoja que se lleva el viento,
sabes mis debilidades, conoces mis sentimientos,
y yo solo quiero tocar tu corazón desde adentro.