Una mañana de primavera,
Estaba sola y aburrida,
Y una bella señorita,
Me entendió se mano amiga.
Me enseñó cosas importantes,
Que no he olvidado,
Siempre le agradece,
Su cariño y su cuidado.
Una profesora como ella,
No había encontrado,
Me hace sentir segura,
Cuando estoy a su lado.
No es la mejor de todas,
Pero es la que más quiero,
La que me ayuda a levantarme,
Cuando caigo y no puedo.
Me da consejos,
Me acompaña en el camino,
Y si tengo miedo,
Se queda conmigo.
Hoy yo sigo mi camino,
Pero la llevó conmigo,
Porque para olvidarla,
No tengo un solo motivo.
Debidado a : prof. Betania N. S.
'Star'